El presidente de ACM, Tony Salas, dice que el Perú tiene potencial para ser un gran exportador de cannabis, aunque la reglamentación del Minsa lo aborta.
La comisión compuesta por el gobierno peruano y el Ministerio de Salud, TAS, es la encargada de elaborar la normativa de la Ley del Cannabis Medicinal y que deja fuera la exportación de cannabis. Según las fuentes de empresas especializadas, en la próxima década este mercado estará valorado en más de $150.000 millones, aunque el reglamento que se está redactando dejaría al Perú fuera de la tarta, ya que no le permitiría exportar.
El uso de los cannabinoides es esta generalizando y hoy en día el 40% de los medicamentos basados en ellos se enfocan en solucionar ciertas afecciones como el sueño y el dolor. En países como Canadá, EEUU, Israel, Australia, Alemania y Colombia, ya están implantados, por nombrar a potenciales países líderes en cada región.
Perú opera al revés de toda la idea del libre mercado y de aprovechamiento de las ventajas como el clima, agua y tierras para el cultivo de cannabis, como sí se ha hecho con frutas y verduras de alto valor en el mercado mundial.
Perú, gracias a sus clima costero, soleado y benigno, además de su mano de obra económica y con bastante sol, ponen a Perú con unas condiciones inmejorables para competir en la producción exportadora de cannabis.
La comisión multisectorial que elabora el futuro reglamento, ha publicado un proyecto de normativa en el que no se incluye la normativa de exportación de productos derivados del cannabis terapéutico, y no considerando que el reglamento debería aprovecharse de las ventajas de la demanda mundial de estos productos. Esto limita al Perú: el país sólo pretende producir para el mercado interno, y abriendo las fronteras para que países exportadores si se beneficien de las necesidades de salud pública de los peruanos.
De esta forma y con esta normativa propuesta, se quedarían fuera de las fronteras peruanas una gran cantidad de impuestos que se dejarían de percibir. Además, se limita el acceso al cannabis medicinal en el mercado local, ya que sólo una compañía sólida de exportación puede ofrecer inversiones para el desarrollo de la investigación y el abastecimiento local a costes bajos.
También esta normativa propuesta es desfavorable para los agricultores o productores peruanos que no podrían convertirse en agroexportadores muy competitivos con la planta. La buena reputación de Perú en muchos cultivos podría aprovecharse para vender toda la medicina natural de otras partes del país. El presidente dela República del Perú, Martín Vizcarra, fue embajador en Canadá, país líder del cannabis medicinal y por lo tanto es conocedor de esta nueva industria.
