El oxígeno no es un factor particularmente crítico porque el aire está lleno de este elemento. Como las plantas de marihuana durante el día hacen la fotosíntesis, liberan oxígeno como un subproducto de la producción de azúcar.
Las raíces utilizan el oxígeno absorvido directamente de la tierra o del que está disuelto en el agua. La cantidad de oxígeno disuelto que el agua contiene está determinado en gran parte por su temperatura. El agua más fría retiene más oxígeno, mientras que el agua caliente no sostiene mucho. Las condiciones anaerobias son amigables con los patógenos que podrían atacar las raíces estresadas. Hay algunas maneras de infundir oxigeno en el agua.
En primer lugar, mantener el agua en el suelo o el riego hidropónico alrededor de 72 * F o 23 grados Celsius. Esta temperatura permite que el agua mantenga cantidades adecuadas de oxígeno. Utiliza un enfriador de agua (puedes encontrar en comercios especializados de acuarios), si la temperatura es más alta. Estas unidades mantienen la temperatura fría en el depósito, incluso si la temperatura ambiente es mucho mayor. Esto ayudará a las plantas cuando la temperatura del aire se eleve por encima de los 90 * F o 23 grados celsius. Una raíces frescas, ricas en oxígeno mantienen la planta sana y disminuyen los daños que el aire caliente por lo general causa.
Con una bomba de aire, se puede mantener el agua circulando. También se puede utilizar una pequeña bomba sumergible para crear una mini cascada. Esta turbulencia constante permite que el agua esté en contacto con el aire. El agua intercambiará cualquier dióxido de carbono que se esté llevando a cabo por el oxígeno.
El suelo suelto proporciona espacio para contener aire y agua y también promueve el intercambio del suficiente oxígeno para las raíces. Se puede complementar el suministro de oxígeno con peróxido de hidrógeno (H2O2), a razón de alrededor de 1 parte por 500 en la solución de nutrientes del agua. El H2O2, se encuentra con frecuencia en las tiendas de jardinería de interior, debes diluir en una proporción de 1 parte por 200, o alrededor de 6 onzas por galón.
Puedes enriquecer el agua de tu hidropónico con peróxido de hidrógeno en la misma proporción que el agua de riego. El H2O2 mata a los patógenos y algas en sistemas hidropónicos alrededor de 1 parte por 200 (6,5 onzas de 10% H2O2, o 20 onzas de H2O2 al 3% por galón).
El peróxido de hidrógeno es básicamente agua con un átomo adicional de oxígeno. Este átomo tiende a saltar de su vínculo inestable y se combinan con otra molécula. Es por eso que el peróxido de hidrógeno puede quemar la piel y la ropa. Debido a que es una molécula inestable, el oxígeno extra podría saltar del H2O2 y tomar otro átomo de O para crear O2. Por supuesto, la combinación restante de H2O es una molécula de agua. La molécula de O2 permanece disuelta en el agua y está lista para ser recogida por las raíces hambrientas de oxígeno. También destruye los patógenos “quemandolos”. El peróxido de hidrógeno es eficaz durante unas tres semanas, momento en el que más necesita ser añadido.
Por Robert Bergman más información en ILoveGrowingMarijuana.Com
