El lunes fue un buen día para el candidato presidencial republicano Ted Cruz. El senador de Texas salió de los caucus de Iowa en el primer puesto entre los candidatos republicanos para las primarias, gracias en gran parte a su fuerte apoyo entre los cristianos evangélicos.
Con el 98 por ciento de los distritos electorales escrutados, Ted Cruz tenía casi el 28 por ciento de los votos, mientras que Donald Trump tuvo un 24 por ciento y Marco Rubio tenía el 23 por ciento, de acuerdo con The New York Times.
La reforma de la marihuana se perfila como un tema muy importante en este ciclo electoral norteamericano, por lo que ¿dónde está el principal candidato del Partido Republicano en política sobre la marihuana?
Cruz se opone consistentemente a la legalización de la marihuana de uso recreativo, pero recientemente ha dicho que los estados deberían tener el derecho a determinar sus propias leyes sobre la marihuana.
Cruz está cantando con un tono más moderado en políticas sobre cannabis en estos días, pero en el pasado talló una oposición bastante rígida contra la legalización de la marihuana.
En el 2014, Cruz criticó al presidente Obama por no tomar medidas enérgicas contra los estados como Colorado y Oregon que legalizaron la marihuana con fines recreativos, según lo informado por La Fusión.
Pero ahora Cruz se encuentra entre un grupo de candidatos del Partido Republicano que han “bajado el tono de la retórica prohibicionista” en este ciclo electoral, escribió Romain Bonilla escribe para Marijuana Politics
Un número de candidatos presidenciales republicanos ahora dicen que apoyan la marihuana medicinal y también piensan que serían los estados los que deberían tener el derecho a elegir si así lo desean en legalizar o no la marihuana dentro de sus fronteras.
El hecho de que la mayoría de los candidatos presidenciales republicanos están jugando con su oposición a la legalización de la marihuana en estos días, muestra como los reformadores de la marihuana han llegado lejos en los últimos años. Parece que aquellos días han quedado atrás, cuando los líderes republicanos pueden perder puntos políticos por demonizar la marihuana.
