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¿Qué es el lavado de raíces y por qué hacerlo antes de cosechar la marihuana?

11 April, 2023, 0:15 AM
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En ocasiones, el lavado de raíces de cannabis es necesario e imprescindible para una cosecha con éxito, te explicamos por qué.

Con las plantas de exterior en plena floración, hay momentos en que las malas decisiones pueden afectar negativamente a la cosecha. Puede ser que tengamos unos cogollos grandes, resinosos y con un aroma increíble, pero a la hora de fumarlos nos podemos llevar una decepción al descubrir que su sabor es demasiado fuerte o que “rasca”. La diferencia entre unos cogollos con un excelente sabor y otros con un sabor más áspero y que como se suele decir “rasca”, tiene mucho que ver con algo tan simple como un lavado de raíces.

Cualquiera que haya tenido que cosechar su planta o parte de ella sin hacer un lavado de raíces, coincidirá en que su sabor deja mucho que desear. En ocasiones, ni con un curado de meses se consigue suavizar su sabor. Por ello, debería ser obligado realizar un lavado de raíces siempre que se cultive en macetas.

Si nunca habías escuchado sobre el lavado de raíces, te explicamos qué es, cómo se hace y por qué tu planta puede necesitarlo.

¿Qué es el lavado de raíces?

El lavado de raíces en las plantas de marihuana consiste en enjuagar el sustrato de la planta con agua pura para eliminar los excesos de nutrientes y sales acumuladas. Esto se hace para preparar las plantas para la cosecha y para mejorar la calidad del producto final.

Durante el cultivo de las plantas de marihuana es normal que se utilicen fertilizantes y otros aditivos para proporcionar los nutrientes necesarios para el crecimiento y la floración de las plantas. A medida que se utilizan estos nutrientes, se acumulan en el sustrato y pueden afectar negativamente la calidad del producto final.

El lavado de raíces es una forma de eliminar estos excesos de nutrientes y sales del sustrato, lo que puede mejorar el sabor, el aroma y la calidad general del producto final. Además, el lavado de raíces también puede mejorar la salud de la planta y prevenir problemas de sobrealimentación o toxicidad de nutrientes.

¿Por qué hacer lavado de raíces?

Aprender cómo hacer un lavado de raíces es importante por varias razones. En primer lugar, puede mejorar la calidad del producto final. Al eliminar los excesos de nutrientes y sales acumuladas en el sustrato, se puede mejorar el sabor, el aroma y la calidad general del cannabis.

Además, el lavado de raíces puede mejorar la salud de la planta. Si se acumulan demasiados nutrientes en el sustrato, la planta puede sufrir de sobrealimentación o toxicidad de nutrientes. Esto puede afectar negativamente el crecimiento y la floración de la planta e incluso causar daños permanentes.

El lavado de raíces también es relevante para preparar las plantas para la cosecha. Al eliminar los excesos de nutrientes y sales del sustrato, se puede reducir el tiempo necesario para secar y curar las plantas después de la cosecha. Esto puede aminorar el riesgo de moho y otros problemas de calidad del producto final.

¿Cuándo se debe hacer el lavado de raíces?

Lógicamente, debemos dar el suficiente tiempo a la planta para obligarla a consumir los nutrientes almacenados. Normalmente, con hacer el lavado de raíces 10-15 días antes de cosechar, será suficiente. También dependerá mucho del tamaño de la maceta o contenedor, además del tamaño de la planta. Realmente no existe ninguna regla que asegure la mejor limpieza de las raíces.

¿Cómo hacer lavado de raíces paso a paso?

  • Reúne tus materiales
  • Haz un riego previo
  • Lava las raíces
  • Repite el lavado
  • Cosecha las plantas

Reúne tus materiales

Antes de empezar el lavado de raíces, es importante preparar todos los materiales. Es necesario contar con agua pura, sin nutrientes ni sales, y un recipiente grande para enjuagar el sustrato de las plantas. También necesitarás herramientas de jardinería, como tijeras, podadoras y guantes.

Haz un riego previo

Hacer un riego previo poco antes del lavado de raíces es de gran utilidad. Esto ayuda a humedecer el sustrato y a aflojar cualquier exceso de nutrientes y sales acumuladas en el sustrato. El riego previo también ayuda a preparar las raíces para el proceso de lavado.

Lava las raíces

Para hacer el lavado de raíces, se debe enjuagar el sustrato con agua pura. Se debe utilizar un recipiente grande para enjuagar las raíces de la planta. Se recomienda utilizar al menos tres veces el volumen de agua que se utiliza normalmente para regar las plantas.

Se debe verter el agua lentamente sobre el sustrato para enjuagar las raíces. Es importante asegurarse de que todo el sustrato esté completamente enjuagado y que el agua salga completamente limpia al final.

Repite el lavado

Después de enjuagar las raíces, es importante esperar a que el sustrato se seque antes de volver a regar las plantas. Esto puede tardar varios días, dependiendo del tipo de sustrato y del clima.

Una vez que el sustrato esté seco, se debe repetir el proceso de enjuague de raíces dos o tres veces más. Es importante seguir enjuagando el sustrato hasta que el agua salga completamente limpia.

Cosecha las plantas

Una vez que se ha completado el lavado de raíces, las plantas deben estar listas para ser cosechadas. Es importante dejar que las plantas se sequen completamente antes de cortarlas y colgarlas para secar y curar.

¿Qué hacer después del lavado de raíces?

Después de realizar el lavado de raíces, simplemente regaremos cuando la planta tenga necesidad de agua con el pH regulado, hasta la cosecha. Es normal que las hojas se vuelvan amarillas o la planta desarrolle carencias de todo tipo. Pero, a fin de cuentas, es el objetivo: que la planta agote los nutrientes, si es posible. Lo que no se debe hacer es usar ningún tipo de fertilizante tras un lavado, ya que no habrá servido de nada hacerlo.

¿Cómo puedo ahorrar agua en el lavado de raíces?

Todos estamos de acuerdo con el hecho de que el agua es barata, pero ello no significa que no podamos poner de nuestra parte para no desperdiciarla. Para los lavados de raíces, una excelente opción son los llamados “Flush”. Estos productos disuelven las sales acumuladas en el sustrato para después simplemente eliminarlas con un riego abundante.

Se emplean como si de un abono se tratase, añadiendo al agua de riego y regando la planta. Se deben dejar actuar unos minutos antes de añadir más agua para eliminar por el drenaje todo ese exceso de nutrientes.

 

Saber cómo hacer un lavado de raíces es una práctica esencial para cualquier cultivador de marihuana que busque mejorar la calidad y el sabor de su cosecha, así como evitar problemas de salud de la planta. Si se hace correctamente, el lavado de raíces puede ser una de las mejores maneras de garantizar una cosecha de alta calidad y saludable. Sigue aprendiendo sobre cultivo cannábico leyendo La Marihuana y participando en nuestros foros.

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