Los gobernadores de dos estados occidentales han promulgado leyes para facilitar el proceso de permitir que las condenas penales pasadas eliminen sus registros.
En Utah, el gobernador republicano Gary Herbert firmó la Ley 431 de la Cámara de Representantes : la Ley de pizarra limpia. La medida crea un proceso para la eliminación automática y eliminación de ciertas condenas penales, incluidas condenas por delitos menores por la posesión de una sustancia controlada.
Para ser elegible para la eliminación automática, uno debe haber completado su sentencia y no tener condenas posteriores por un período de cinco años. Según los informes del Salt Lake City Tribune , Utah se convertirá en el segundo estado de la nación en promulgar una política de eliminación automática tan amplia.
La nueva ley entrará en vigor el 1 de mayo de 2020.
En Nuevo México, el gobernador demócrata Michelle Lujan Grisham firmó en ley la medida HB 370 , la Ley de antecedentes penales Expungement. La Ley permite a los condenados por ciertas infracciones, delitos menores o delitos graves, una vez completada su condena y el pago de las multas aplicables, solicitar al tribunal una orden para eliminar los registros de arresto y los registros públicos relacionados con esa condena. Aquellos que buscan desalojar las condenas por delitos menores deben esperar dos años después de completar su sentencia, y no tener condenas posteriores, antes de buscar la eliminación. Aquellos con condenas por delitos graves deben esperar seis años antes de presentar una petición ante el tribunal.
La nueva ley entrará en vigor el 1 de enero de 2020.
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