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Estado de Nueva York, la medicalización de la marihuana

15 November, 2010, 9:31 AM
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00038512En el debate sobre una ley para legalizar el uso de la marihuana para uso medicinal y terapéutico siguen existiendo dos preguntas claves las cuales a mi juicio deberíamos de responder quienes estamos a favor y quienes mantienen una posición antiprohibicionista: ¿Quiénes se benefician de la aprobación de la ley?, y ¿quiénes se benefician de la prohibición?

El proyecto de ley que se discute en este momento en la legislatura del estado de Nueva York, concerniente a legalizar el uso de la marihuana para uso medicinal no debe de estar motivado por intereses político de buscar dinero para balancear el desastre económico en el presupuesto estatal que han dejado las medidas neoliberales que se caracterizan por aumentar los beneficios a la gente rica y por otro lado eliminar la inversión social en el desarrollo humano de la mayoría del pueblo. Tampoco debe de estar motivado con valores de la religiosidad anestésica que un sinnúmero líderes religiosos que se han autoproclamado guardianes morales han dado al pueblo para mantenerle en la inercia.

Curiosamente, quienes se oponen a este proyecto de ley de la legalización parten de varios postulados erróneos. Por un lado, equívocamente creen que la marihuana es la droga puente para el uso de otras drogas como la cocaína y heroína. Ya deberíamos de reconocer que la droga puente para el uso de otras drogas, aunque el asunto es mucho más complejo, lo sigue siendo el alcohol.

Otra postulado erróneo lo es el asunto de la adicción. En las investigaciones científicas existen discrepancias en los análisis acerca de la adición o no adicción al uso de la marihuana. Donde no existen discrepancias sobre adicción lo sigue siendo en el uso del alcohol y de la nicotina. Lo que sí tenemos claro es que cuando la persona que usa marihuana está privada de la misma no experimenta la sintomatología de substracción que encontramos en personas dependientes a la nicotina y/o alcohol. De aquí la creencia que no es adictiva.

Por otro lado, la apreciación farmacológica que se encuentra en el uso de la marihuana es significativa. Algunos de sus usos medicinales son en el tratamiento de la glaucoma, cáncer, SIDA, dolores crónicos, epilepsia y la esclerosis múltiple, etc.

Otro lugar de análisis crítico en la legalización del uso de la marihuana para uso medicinal y terapéutico lo es en quienes están detrás de la errada campaña de “guerra a las drogas” quienes ocultan las estadísticas verdaderas. Por ejemplo, anualmente aquí en Estados Unidos mueren a consecuencia del uso de drogas: Nicotina 400,000; alcohol 100,000; drogas ilícitas 35,000, cafeína 2,000, y aspirinas 500. El número de personas muertas por el uso de marihuana sigue siendo cero. Este proceso de “guerra a las drogas” es la que tiene nuestras cárceles repletas y de aquí el que seamos el país con más personas encarcelas en el mundo entero. Esto es una guerra declarada contra a la genteimages 42pobre y negra; vean el perfil de la población penal.

A mí me parece que ya es tiempo de que entremos en una fase de salud pública, no de justicia criminal, en dondepasemos a una despenalización parcial o completa de las drogas ilegales, en combinación con un sistema de regulación, como sucede con el alcohol y las drogas recetadas.

No hay que ser una persona genio para entender que al proporcionar suministros legales de las drogas ilegales definitivamente el precio caerá, llevando al colapso al mercado de drogas ilegales. Por lo tanto, dejará también como resultado una reducción de los delitos cometidos tanto por quienes proveen como para las personas usuarias de drogas. En la paz con justica vamos a legalizar el uso de la marihuana para uso medicinal y terapéutico.

Fuente ElDiario

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