Un nuevo estudio sugiere que la legalización de la marihuana recreativa en EEUU hace bajar el consumo de los jóvenes en los estados donde se legaliza.
El estudio fue publicado esta semana por la revista médica JAMA Pedriatics. Este encontró que la legalización del uso recreativo estaba relacionado con la bajada del 8% de adolescentes que consumieron en los últimos treinta días. También el estudio reveló una caída del 9% en el número que dijeron que habían usado al menos 10 veces en los últimos 30 días.
Estos hallazgos se producen después de que otro estudio del American Journal of Public Health revelase la semana pasada que el consumo entre estudiantes de secundaria a nivel nacional aumentase del 0,6 por ciento en 1991 al 6,3 por ciento en 2017.
Mark Anderson, uno de los coautores del periódico JAMA Pediatrics, insistió en que su estudio no es solo fumar humo.
Fines recreativos y medicinales
“Para ser claros, no encontramos ningún efecto en el uso de adolescentes después de la legalización con fines médicos. Aunque evidencia de una posible reducción en el uso depues de la legalización con fines recreativos”. Así lo dijo uno de los autores del estudio, Mark Anderson, a CNN . “Debido a que nuestro estudio se basa en una mayor variación de políticas que en trabajos anteriores, consideramos que nuestras estimaciones son las más creíbles hasta la fecha en la literatura”.
Una razón podría ser que es más difícil y más caro para los jóvenes adquirir cannabis en los dispensarios autorizados, Mark Anderson.
Los nuevos resultados se asemejan a un estudio que muestra una disminución en el uso de adolescentes en el estado de Washington. Este fue después de que las ventas de cannabis recreativo comenzaron en 2014 en el estado.
Calmar a los prohibicionistas
Los resultados “deberían ayudar a calmar algunas de las preocupaciones sobre que el uso entre adolescentes realmente aumentará.” “Esta es una pieza importante al sopesar los costos y beneficios de la legalización”, dijo Anderson.
“Para ser claros, no encontramos ningún efecto en el uso de los adolescentes después de la legalización con fines médicos, sino la evidencia de una posible reducción en el uso después de la legalización con fines recreativos”, dijo Mark Anderson, coautor del estudio y profesor asociado de la Montana State University en Bozeman.
