Pythium:
El Pythium es un hongo parásito, destructor de las raíces. En condiciones favorables, el Pythium se multiplica con gran rapidez y libera esporas microscópicas que infectan las raíces y no permiten que reciban alimento. Ataca principalmente a semillas y plantones que aún tienen poca resistencia a las enfermedades. Las plantas más grandes son más resistentes aunque también se vean afectadas, pero si se detecta en una fase primaria podrán ser tratadas y salvadas, a pesar de que la cosecha se verá definitivamente afectada.
Como otros hongos, Pythium está en cualquier parte del entorno de la planta, y atacará prácticamente a todas las plantas. Las mejores condiciones para su desarrollo son los altos niveles de humedad y las temperaturas entre 20 y 30°C. En cultivos hidropónicos también influye una oxigenación pobre de la solución nutritiva. Es una espora de hongo que vive en el aire y en el agua, y que se presentará en tu lugar de cultivo sin importarle lo limpio que esté. La traerás en tus zapatos, en tu ropa, en tus manos, etc. Vendrá en el agua, especialmente si la traes de fuentes, ríos u otras corrientes libres. Este hongo tiene millones de oportunidades de entrar en tu jardín. Por lo tanto, es muy importante mantener muy limpio el entorno y cuidar mucho la calidad del agua que utilices.
Sintomas:
Ante un ataque de Pythium por lo general las semillas infectadas se tornarán blandas, pastosas y negras, y luego morirán. Los plantones tendrán tallos muy húmedos y se colapsarán. Aparentemente sin razón, plantas ya crecidas y plantas madres comenzarán a marchitarse y cogerán un color amarillento (que a menudo se identifica erróneamente como una deficiencia nutricional), y a veces las hojas tenderán a enrollarse hacia abajo. Las plantas tendrán un crecimiento pobre y el rendimiento se reducirá; hasta se puede llegar a una pérdida de toda la cosecha.
No es fácil detener un ataque de Pythium a tiempo, especialmente cuando se cultiva en suelo, ya que los primeros síntomas de estrés en la planta no aparecen inmediatamente en la parte que está sobre la tierra. Sólo después de algunos días las plantas se verán tristes. Pero en el ámbito de las raíces el juego ya ha comenzado hace tiempo. En cultivos hidropónicos el Pythium, que adora y prospera en el agua, es una enfermedad bastante común. Si no se vigila lo suficiente, las consecuencias pueden ser desastrosas.
La infección comienza en la punta de la raíz y lentamente desintegra las raicillas capilares y las finas raíces laterales, que
son esenciales para la absorción de nutrientes. Las raíces blancas y relucientes se tornarán de color marrón claro, luego marrón oscuro y llegarán al negro. Cuando la infección es severa, la parte más baja del tallo se pondrá fina y negra. Por lo general, la porción suave y delgada de la raíz que sufre putrefacción se puede separar con facilidad del núcleo central.
A menudo se describe el Pythium como una “infección secundaria”, porque sólo ataca la planta cuando ésta ya ha comenzado a deteriorarse, en condiciones de cultivo que no son las mejores. Se aprovecha de tejidos enfermos o con heridas para colonizar las raíces y causar putrefacción y descomposición de las mismas.
Control:
Vigila tus plantones y esquejes, ya que es en esta etapa cuando tu planta se puede infectar. Es importante elegir el substrato de germinación cuidadosamente y mantener la zona de germinación lo más limpia posible.
Cuando prepares los esquejes para multiplicación, utiliza siempre herramientas limpias y cuida tanto al esqueje como a la planta madre, ya que el corte ocasionado durante la operación es una oportunidad maravillosa para la penetración de los agentes patógenos.
Cuando cortes tallos de la planta madre, ocurrirán otros fenómenos: la masa de raíces es muy importante para las nuevas necesidades, y parte de ella comenzará a decaer. En ese momento producirá más etileno y los agentes patógenos, incluyendo al Pythium, se apresurarán en aparecer.
Por lo tanto, no dudes en renovar tus plantas madre. Después de algún tiempo tu planta madre envejecerá y puede ser que sea portadora de esporas de Pythium, con lo cual, los esquejes también serán portadores.
Esta es la causa por la cual es recomendable utilizar la planta madre una o dos veces y luego reemplazarla con una de las plantas nuevas hecha con los esquejes. De esta forma siempre tendrás madres jóvenes y sanas para obtener esquejes sanos y vigorosos, sin enfermedades.
El transplante es otra operación clave, ya que una raíz herida es el campo perfecto para una infección. Cuando hagas un transplante, utiliza un lugar limpio y sé especialmente cuidadoso con las raíces jóvenes. Para evitar el estrés del transplante y la manipulación de las raíces, puedes usar los sistemas de propagación aero-hidropónicos con los cuales sólo tienes que mover tu planta de un tiesto al siguiente, sin interferencias en el sistema radicular.
Como norma general, comienza con plantas y semillas libres de enfermedades.
Evita darles demasiado alimento y poner demasiadas plantas juntas y mantén una buena ventilación. Según parece, el Pythium se desarrolla mejor con niveles alcalinos altos, por lo tanto mantén el pH lo más bajo posible, pero siempre teniendo en cuenta las necesidades de las plantas.
Algunos cultivadores han descubierto otras formas de prevención de hongos utilizando agentes humectantes y cloro en la solución nutritiva, luz ultravioleta, peróxido de hidrógeno y ozono. Pero hay que tener mucho cuidado: determinados métodos pueden ser perjudiciales ya que interfieren con algunas de las sales minerales de la solución, poniendo en peligro el equilibrio en el alimento de la planta.
Productos contra Pythium:
.Alial fungicida.
.Tarpán (Gleba).
.Diconox.