PARANOIA O MI MUJER ME VIGILA

zarbel

Cogollito
25 Agosto 2004
4.609
16
43
38
Près de la France
www.erowid.org
Pues es lo que ocurre cuando se fuma: que se puede notar uno vigilado.

Los hay que convivían pacíficamente con sus padres, con toda confianza entraban los progenitores en la habitación del vástago, hasta pillarle con el culo al aire y decir éste: pasa mamá, pasa, que ahora termino de vestirme; o decirle al infante: ¡otra vez masturbándote!, tal era la falta de costumbre de echar el cerrojo o llamar a la puerta, antes de entrar.

Pero comenzó a fumar...

Y el acto íntimo de liarse un porro, en la habitación, ese acto delictivo, provocador, ese pacto con el diablo, debería quedar en secreto, y el infante se acordó de que existía un cerrojo interior en la puerta de su cuarto. Corrió el pestillo, sigilosamente, para no meter ruido, pues estaba cometiendo, por vez primera, un acto furtivo en la casa familiar, estaba a punto de romper la confianza de toda una vida, de crear una barrera entre él y sus padres. Casi tiritando, con las manos frías, tocó el pestillo y se acordó que estaría sin engrasar, duro de mover. Tomó la guía del pestillo y movió la mano, haciendo cada vez más fuerza, y notaba que el pestillo estaba duro, casi cortante, estaba empezando a hacerle daño tanta resistencia del frío metal, pero, por fin el cerrojo cedió, de pronto, haciendo un ruido extraño, parecido a un golpe seco.

Ese cerrojo comenzará a funcionar en adelante día tras día, cada vez que se líe el porro, o cada vez que se fume, en la ventana. Y un día los padres descubrirán que está el cerrojo echado, y preguntarán -¿Por qué has echado el cerrojo?- Y el niño les responderá: -para que no me veais el culo-. Y, en ese instante, se romperá la relación paterno filial, porque los padres se han dado cuenta de que el niño les ha descubierto.

Los padres ahora saben que ya no van a poder engañar más a su hijo, y que éste ya no se fía de ellos, pero el adolescente todavía no se ha dado cuenta de lo que los padres sospechan. El muchacho sólo ha cerrado la puerta para tener su intimidad con la marihuana, pero los padres creen que es porque se masturba mucho más a menudo, está leyendo cosas extrañas o está tomando LSD. El chico comienza a recibir mensajes de sus padres, como "te estás destrozando la salud", o como "te conviene salir más". Claro, el chaval relaciona marihuana con enfermedad o con aislamiento, y comienza a sospechar que sus padres saben que fuma marihuana, y todo lo que le están diciendo son indirectas sobre su inconfesable vicio.

A partir de este momento, nace el marihuano nato, el típico, el que vive vigilado por sus padres. Lo que más le extraña es que, cuando piensa que sus padres lo saben, ¿por qué no le echan de casa por drogadicto?, y no comprende el porqué de permanecer aún en la casa paterna.
Y decide aclarar las cosas en su casa, tras varias semanas dejándose el grifo del baño abierto, entrar varias veces en la cocina y volver a salir, delante de su madre, por no acordarse de para qué había entrado en la cocina. Es cuando reúne a sus dos padres y les dice: "fumo marihuana", y ve la mirada de su madre, con los ojos llenos de espanto como diciendo "ya me lo temía yo, que sólo podía ser lo peor", y la mirada de su padre como diciendo "qué cabrón, qué suerte tienes".

La madre va a sugerir lo mejor para su hijo, ir al médico, someterle a un tratamiento, vigilar sus amistades, hablar con el colegio..., en fin, todo lo que haga falta. El padre, por su parte, no tardará en hablar con el marihuano para decirle que, hombre..., estas cosas se hacen juntos, padre e hijo..., como dos colegas, y tal.

El muchacho se pregunta que por qué es tan rara la gente adulta, pues se lo ha contado porque le consta que ya lo sabían y, si lo sabían, ¿cómo es que se han sorprendido tanto? Y empieza a sospechar que quizás no lo sabían y que ha metido la pata, pero, al fin y al cabo, ahora podrá fumar sin necesidad de echar el cerrojo, como antes.

Y vuelve a su habitación, dispuesto esta vez a hacerse el porro sin cerrar la puerta, con toda confianza, igual hasta se presenta su padre: pero, al ir a por la cajita con la hierba..., no está. ¡Ha desaparecido! Y comienza a dudar de si la dejó realmente en ese lugar, o fue un sueño, porque estaba fumado cuando la guardó, pero tampoco recuerda otro sitio que no fuera ése en que fue dejando la cajita, ya que siempre estuvo allí.

Y se vuelve a producir un cambio: ¡está siendo vigilado y le han robado la hierba! Acude a su padre y le pregunta: ¿tú has entrado en mi cuarto?
¿Yo? -dice el padre-, nunca entro cuando no estás tú. Y comienza a sospechar que ha sido su padre, porque, ¿cómo ha sabido que no estaba él cuando entraron en su cuarto? Pero podría ser también su madre, así que se dirige a su madre: "Mamá, me falta una cajita de mi cuarto". -¿Ah, sí?- responde la madre. -¿No será una "cajita" con hierba de droga de ésa, de marihuana lavacerebros, no? Pues sí, la he cogido yo, por tu bien, para que no te hagas daño-.

El hijo sabe que su madre no la ha guardado, la ha destruido inmediatamente, y que, tal vez, su padre sí se la hubiera guardado, por lo menos para fumársela él, o quizá juntos los dos, ¡pero la madre!, marihuana perdida definitivamente.

Años más tarde, con algunas canas encima y menos pelo del que fue, nuestro personaje se casa y tiene su propia casa, y para recordar viejos tiempos y hacer posible lo que no pudo ser en casa de sus padres, decide comentarle a su mujer: "Cariño, en ese cuarto libre, vacío, voy a plantar marihuana". -¿Ah, sí?- Contesta la mujer, -¿Y no te puedes meter en un lío por eso?-. ¡Qué va, cariño, qué va, si se pueden tener en casa hasta seis u ocho, es legal no pasa nada!

Y plantas, y las ves crecer, y cosechas, y comienzas a fumarte la cosecha, normalmente antes de estar curada... Y notas la hierba floja, como que no te hace nada, jeje, y le ofreces a tu mujer, que fumaba contigo alguno, antes de casaros, pero te dice: -No, ahora no-. Y piensas, ingenuo de ti, que fumará otro día, y le vuelves a ofrecer y te contesta: -No, ahora no-. Sigues fumando, todo el día, estás en casa tan a gusto, creyendo que tu mujer es feliz contigo fumando porros, y le vuelves a ofrecer y te vuelve a contestar lo mismo, y por fin le espetas: -¡Oye, ¿no dijiste que ibas a fumar conmigo?-. A lo que te contesta: -¿Yo fumar contigo? No, yo dije que no me apetecía fumar, pero ni entonces ni ahora ni nunca, que eres un drogadicto y un vicioso-.

Y ahí te han dado, te han vuelto a engañar, vas a estar otra vez vigilado, pero esta vez por una persona que no es tu madre, sino alguien que puede denunciarte y puede hacerte daño, si quiere, para su propio provecho y en tu propio mal. Podrías creer que tu novia fumaba porros, pero sólo lo hacía por ti, por estar contigo, por agradarte, pero recuerda que logró que dejaras tú de fumar, mientras ella continuó fumando tabaco, no sólo mientras fumaste tú, sino más de un año después.

Y dejarás de fumar en tu casa por lo mismo que dejaste en casa de tu madre: porque te vigilan, y ambas dicen lo mismo, que es por tu bien.

Ya no podrás apartar la vista de tus plantas sin pensar un instante en que unas malvadas tijeras de cocina, puestas en las manos de tu mujer, privarán silenciosamente de la vida a tus hijas vegetales, a tus amigas. No sabrás en dónde dejarlas a secar, sin que el amoníaco o la lejía proporcionados por la mano de tu mujer arruine la cosecha.
Discurrirás miles de lugares seguros para evitar la mano que hurte el frasco de la hierba seca y lo arroje por el retrete, mano que pediste para ti..., sin saber bien lo que hacías..., seguramente por eso ahora entiendes algunas sonrisas que viste el día de tu boda.

¡¡¡Y te sientes engañao, timao y estafao!!!

No te cabe opción: o la droga o tu mujer.

Quizás ahora muchos se den cuenta de por qué mucha gente mayor no fuma marihuana, sólo somos cuatro divorciados, porque mi mujer me ha confesado que no va a fumar jamás y me siento estafado, no se puede disimular lo que no se es hasta casarse, y luego comenzar a mostrarse como se es, ese engaño es causa de divorcio y hasta de nulidad, por error en la persona, que no se mostró como era realmente. Yo me divorcio, no quiero tener una segunda madre en mi vida.
Como hay que elegir entre la esposa o la marihuana, eligo la marihuana o, aun mejor, la libertad de no vivir vigilado el resto de mi vida, será que la marihuana me ha resucitado la paranoia.
 

Carletus

Semilla
6 Abril 2004
3
0
0
Caramba, , menudo rato divertido me he pasado leyendo tu historia...Estoy aquí en la oficina, sólo y aburrido, desde hace unas horas, y lo que comenzó como una tediosa mañana más, se acabó convirtiendo en un montón de risas, recuerdos, pensamientos y , cómo no, un porrito en la ventana, tras haber empujado sigilosamente el frío metal del pestillo -sólo en el despacho, pero hay gente fuera-. Dado el escaso trabajo que tengo -soy un crack del escaqueo-, al poco de llegar al curro -media hora tarde, por supuesto-, ya me aburría, así que pinché en "favoritos", elegí el CannabisCafé, busqué los últimos posts y me encontré con uno sobre si habíamos encontrado algo extraño en la tele,en el que exponías una certera reflexión adornada con detalles tan reales y simbólicos como el del Iberia ése con rosca para cambiar de la primera a la primera...

Tanto, tanto me gustó lo que escribiste, que, copié tu nick en el portapepeles , cliqueé sobre el icono de búsqueda en el CC y me encontré con tus siete posts en ese foro.

Me picó la curiosidad por saber qué significaría eso de "zarbel", así que abrí el google, y me encontré con más de mil páginas, y en las primeras me enviaba a este foro, a un post de humor -oye, por cierto, el chiste ese de la nevera vaya viejo que es jeje-.Ya dentro de este foro -en el que estuve registrado tiempo ha pero al que no que no llegué a añadir, en mis favoritos; ahora mismo lo acabo de hacer-, repetí la búsqueda de tu nick y el primer hilo que me he encontrado ha sido éste.

Y oye, enhorabuena, tío; escribes de maravilla, pintando con humor situaciones demasiado habituales y que, al menos en mi caso, se han presentado tal y como las cuentas. ja, ja, ja.

¿Porqué será que tantas tías fuman con nosotros cuando somos novios, pero dejan de hacerlo cuando nos casamos?

No sé

Eso sí, a tu reflexión sobre la paranoia que sufrimos los fumetas, yo añadiría otro apartado. El de los hijos. Por el CC, para un amiguete mío -Freaky-, y últimamente, el muy cabroncete, se ha puesto en la firma esto: Si no sabes explicar a tu hijo por qué fumas marihuana, deja de fumarla. (Famoso aforismo de uno de los Furry Freaks Brothers, creados para el cómic underground por Gilbert Shelton). Ignoro las razones que llevaron a Freaky a poner la cita de marras, pero me tiene frito. Cada vez que la leo, me quedo quieto parado delante de la pantalla, sin poder levantar los dedos del teclado, con cara de idiota y pensando que, si los freak brothers dicen eso, yo cada vez soy menos jipy, ya que soy de los que, ya acostumbrados a echar el cerrojo para saborear el Thc en nuestros tiempos como hijos y como esposos, también lo hacemos ahora que somos padres.

Y por el camino que lleva la cosa -lo de la prohibición -, me veo de abuelo arrastrándome con la ayuda del bastón hasta la puerta para empujar con las dos manos, falto de fuerzas, el viejo cerrojo que me ha acompañado desde esa primera vez que lo utilicé, allá en mi preadolescencia.

Bueno, y nada más, . Muchas gracias por alegrarme el día .
Nos leemos
 

zarbel

Cogollito
25 Agosto 2004
4.609
16
43
38
Près de la France
www.erowid.org
Bueno Carletus, eres muy amable, muchas gracias, anima a intentar contar algún nuevo relato, con mejor o peor acierto. En cuanto a explicar un hijo por qué fuma su padre, o por qué bebe su padre, siempre ha sido complicado y muchos padres han sido violentos con sus hijos por esta causa. A mí me ha tocado muchas veces ir a buscar a mi padre al bar, enviado por mi madre, porque mi padre se podía pasar horas jugando a las cartas, mientras mi madre y sus hijos esperaban el regreso de su padre, para ir a dar una vuelta la familia completa. Mi padre no se jugaba el dinero, porque jugaban muy poco en cada partida de chinchón, pero recuerdo llegar al bar y decirle -"mamá ha dicho que vayas, que te estamos esperando"- y mi padre decirme -"dile a tu madre que voy en seguida"-, y volver de nuevo, a la media hora, a insistirle de nuevo para que fuera a casa, a veces durante más de una hora metido en un bar atestado de humo de cigarros puros y de olores a café y licores, esperando a que se levantara mi padre de la silla. Jamás en toda mi vida se me ocurrió preguntarle a mi padre por qué hacía eso, de cabrear a mi madre (luego la pagábamos nosotros) yendo al bar. Mi madre si se lo reprochaba y se producían escenas bastante violentas entre ellos. Yo fui un niño que vio reñir a sus padres, como muchos de mi generación, pero nunca les vi reconciliarse delante de nosotros, siempre lo hicieron en privado.
Claro, viniendo de esa generación de niños que casi trataban a su padre de usted, igual que hizo el mío con mi abuelo, pues un padre era un señor que apenas se le veía un momento, casi como un emperador chino.

Luego me hice mayor, la Armada, mil hostias encima, mi padre ya casi viejo... ¡Y me puse a plantar marihuana delante de sus ojos, pero no supo lo qué era esa planta tan verde y tan alta!

Si un hijo mío (que no lo tengo) me preguntase el porqué de fumar marihuana, le diría que porque quiero, porque es un acto libre de mi voluntad y que me ayuda a comprender mejor el mundo. En este mundo se puede ser de dos maneras: buscar el propio interés o buscar el interés común. Yo creo que soy más pacífico, menos nervioso y agresivo si fumo marihuana, aunque seguro que me hace más lento para todo, pero no me importa, no corro mucha prisa y me puedo hacer esperar un poco.
Hay quien bebe para calmar su sed y habrá quien fume para calmar su sed mental o espiritual. Es decir, mi hijo entendería que yo fumo para ser mejor persona, porque me apacigua el espíritu, me siento más bueno.

Como ves, yo no sería violento con mi hijo, simplemente le explicaría la verdad que yo he experimentado fumando a lo largo de los años y que todo lo que ayuda a ser mejor es, en principio, bueno.

Sobre la cuestión de la novia que fuma y más tarde es esposa que no fuma, es aplicable a muchas más acciones, siendo la más frecuente la de dejar de salir uno de los cónyuges cuando ha contraído el matrimonio, por aquello de "qué bien se está en casa, con la camita, la tacita del váter, la ducha propia y el orinalito", además, "como en casa no se come en ningún sitio", y "salir es cada vez más caro". Con estos argumentos se acabó el salir, comienza el primer embarazo, viene el primer hijo, llegan los siguientes, y se va alejando ad calendas grecas el día en que quedará libre para ver el Acuario de Valencia o pasar una semana en Canarias.

Y es que, a mí, después de vivir encerrado entre cuatro paredes durante años y años, varios de ellos sin pisar la calle, porque cada fin de semana mi señora está cansada de trabajar entre semana y quiere permanecer en casa, lo de que fume o no me suena a broma. ¿Qué más da? ¿No era mucho más importante que fumar el hecho de que pasamos una semana santa en el Saler y, además, flipamos con un porro y con un helicóptero de la Guardia Civil esa noche tibia en la playa? ¿O cuando venía conmigo a la noche, incluso a fumar chinos?

Esto es parecido al tango de "y pensar que hace diez años fue mi locura",
porque la vida de casado marca la vida.

A decir verdad, yo he estado quince años sin fumar nada, salvo tabaco, que también lo dejé hace más de dos años, pero volver ahora a fumar marihuana me ha devuelto el alma, porque además mi situación personal es grave y necesito un estímulo distinto y una fuerza especial para hacer frente a lo que me acontece y acontecerá en breve.

Sobre Zarbel, es un adjetivo vasco, que significa "alegre, bebidillo, ligeramente trompa, medio pedo, etc.". Elegí este adjetivo como apellido porque encaja bastante bien con mi vida, con mi historia y con mi forma de ser, creo que me he pasado y me paso la vida "medio trompa".

A board: No me escondo cuando fumo en casa, pero mi mujer ha conseguido que le pida permiso, porque se ha estado venga quejar del olor de la marihuana, que si le apesto la habitación, que si le apesto la casa, que si huele muy mal... Bueno, el caso es que ahora le pregunto -¿Me voy a fumar la pipa a otro cuarto?- Y me contesta -"no, fumátela aquí, que no me molesta, lo que me molesta es que fumes tanto"-.
A ti te consta que hace cuatro días que he empezado a fumar, porque hasta el día veinte prácticamente no tenía más que alguna hoja, pero ya tengo el sanbenito de drogadicto en mi propia casa, me lo he ganado en menos de dos semanas, que son las que llevo fumando sin parar, desde que me levanto hasta que me acuesto. ¡Y yo era el que decía que lo malo de la marihuana es pasarse, que había que controlar el fumeteo y que tanto porro al día no era bueno, ya, ya!
Pues eso, menos mal que mi mujer no regresa hasta la noche y me pego todo el día solo y no ve sino el último cogollo que me fumo, que si no...

Bueno, a ver si la próxima cosecha sacamos algo más, porque de ésta no va a haber tiempo ni para dejar secar del todo los cogollos recogidos.
 

akiyavi

Semilla
3 Diciembre 2003
1.300
4
0
41
depende el dia
Jeje Zarbel así me gusta hay que ser un poco golfo siempre,que la monotonía es muy aburrida.
Respecto a lo de fumar y que te reprochen jeje pues en casa mi madre sabe que fumo y no le gusta ni pizca,hasta me quitó un libro que tenia de cultivo jeje.
Lo del olor tambien me habia pasado con la ex-novia decia q le revolvia el estómago,pero bueno he fumado delante de ella tranquilamente aunque tambien sacaba lo de no me gusta que fumes tanto,asique simplemente no me lo tomaba muy en serio,que fumar lo que yo fumo es bien poco pero eso si lo disfruto igual que el que más,cuando cosecho me agarro mis 2-3 fumadillas semanales q si son de palancas con 2-3 canutillos toy ya feliz jeje.
 
G

Guest

Invitado
Valla q 8) Carletus me gano x puesta de mano de decir q lo de Zarbel esta de berga yo siempre leo los post de este tio.Zarbel deverias sacarle provecho a este don xq lo describes de una manera q parece q fueras escritor y lo mejor de todo es q llo cuentas cmo si fuera mi vida o alo mejor de la mayoria de fumetas. Valla he! :D
 

zarbel

Cogollito
25 Agosto 2004
4.609
16
43
38
Près de la France
www.erowid.org
Gracias, Reef, eres muy amable, pero no soy escritor, soy un abogado de provincias que hace lo que puede y sabe, intentando exponer cosas que nos suelen pasar a muchos y que me suceden o me han sucedido realmente.
 

KArlos_GM

Semilla
10 Julio 2004
113
0
0
43
Hola Zarbel,

Creo que tu y yo tenemos un problema. Y ese problema no es ni mas ni menos que la impulsividad. Yo bebía, fumaba, me drogaba, etc.
Hace 8 meses que dejé el tabaco. No me costó mucho dejarlo, ya que la adicción fisica es ligera. Lo malo es la adicción psicológica. Si a eso le añades lo de la impulsividad, ahi se presenta el problema. Yo nunca he sido fumador de maría. Aveces los colegas me daban un cogollo, y lo fumaba, pero jamas he sido fumador de marihuana asiduo.
Fue al dejar el tabaco, y para tapar ese vacío, y de paso poder seguir siendo impulsivo,, me puse a cultivar cannabis. La culpa de que ahora sea cultivador de cannabis la tiene el maldito tabaco! Lo dejé y se vengó de mi.
Me dió la idea de cultivar maría y aqui estoy.
Zarbel, quiero decir que somos viciosos por naturaleza. NO vale que me digas que fumado comprendes mejor el mundo. Eso no es posible, ya que tu estado natural es el estar sobrio. Pero amigo...el tabaco se está vengando de nosotros! :(
Por haberlo abandonado...
Seguimos siendo victimas de los vicios, sean unos u otros, se fumen os e beban!

Saluos
 

zarbel

Cogollito
25 Agosto 2004
4.609
16
43
38
Près de la France
www.erowid.org
Pues sí, es verdad, creo que Board se ha tomado muy en serio lo que dije en plan de broma, cariñosamente, a todos nos gusta que nos tengan en consideración y valoren lo que hacemos o decimos, si bien siempre encontraremos respuestas y reacciones para todos los gustos. Afortunadamente no hemos tenido nunca ningún problema serio con nadie, aunque a veces se cabree uno ante una respuesta maleducada o fuera de tono; quizás sea lo peor cuando alguien pone en nuestra boca lo que no hemos dicho ni intentado decir, pero siempre habrá de todo y hay que aceptarlo: c'est la vie.
Y en cuanto a lo que dice KarlosGM, también es verdad, si bien yo dejé de fumar y he dejado también de beber, casi no bebo nada de nada que contenga alcohol. Me he propuesto tener tres vicios: sexo, música y droga blanda, porque me estoy haciendo viejecito y me tengo que cuidar: ni tabaco, ni alcohol, ni estrés.
Es cierto que soy un vicioso, pero voy a cumplir dos años y medio sin tragarme el humo del tabaco, y año y medio sin cocerme, creo que JAMAS he estado tanto tiempo sin acabar ciego, al menos desde que tenía catorce años.
Yo lo de la marihuana, sinceramente, pensaba que era peor, que me iba a pegar más, pero no es así, al menos la que yo he cosechado, me permite continuar con mi actividad normalmente, me hace más pausado, más sereno, lo cual me está viniendo de maravilla con la que está cayendo en mi vida.
 

board

Semilla
26 Junio 2003
1.950
3
0
50
dime dnde esta, q si eso ya paso yo
joer tu hablas cariñosamente y en broma , y yo no?
ademas no se kien es el q pone cosa en tu boca q tu no dices, explicalo, no sere yo, ni en la tuya ni en la de nadie, entre otras cosaa por q no me importa mucho lo q digan los demas, en el buen sentido lo digo y cariñosamente eh
 

KArlos_GM

Semilla
10 Julio 2004
113
0
0
43
Hola Zarbel,

Joe tio ya eres como un padre para nosotros, aunque yo tb tengo mis añitos jejeje.
Cuidate y ojalá te veamos mucho tiempo por aqui, que nos han enseñado muchas cosas y a mi personalmente me has abierto los ojos en todo este tema de la marihuana.

Un abrazo.
 

zarbel

Cogollito
25 Agosto 2004
4.609
16
43
38
Près de la France
www.erowid.org
Karlos, ¿tío o padre? Me alegro de que hayas aprendido cosas, yo he aprendido un montón y me habéis venido muy bien, porque necesitaba sentirme acompañado y contar mis cuitas a alguien. Lo he pasado muy jodido y el día clave fue ayer, pero también ha pasado y por la tarde me eché cuatro caladas a la salud del mal rato que pasé y que intenté solventar de la mejor manera posible. Ahora, si quiero salvar mis plantitas que tengo comenzando a crecer (por cierto, vaya diferencia entre la White Russian y el resto de las niñas, en tamaño y lozanía) conviene que me modere y fume sólo el finde, no vaya a ser que mi señora decida aplicar la tijera asesina (sospecho que está hasta el gorro de verme fumar y chatear).
 
-