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Deleted member 228320
Invitado
Hola a todos.
Soy nuevo en esto del autocultivo, inspirado por el confinamiento, como supongo que tantos otros.
A día de hoy tengo una pequeña jungla montada en un armario de 60x60, de cañamones rescatados del grinder. Una lámpara led que dice equivaler a 300 W de sodio, un extractor TT un poco atenuado y 3 macetas con las supervivientes de 5 plántulas preciosas que germinaron de 5 semillas.
Después de ese pleno germinativo, eljodido gato me descabezó dos plantitas, de las que una prendió de nuevo y la otra (algo masticada) no. O esa superviviente u otra que se quedó algo enana fue descartada por puro sexismo cuando sus hermanas empezaron a mostrar sus pistilos.
Las plantas se vinieron para dentro después de crecer en la terraza algo más de lo que convenía, cuando por lo reconocible de las hojas y los efluvios que soltaban empezaba a ser un inquietante cantazo tenerlas en exterior. Y, sobre todo una de ellas, tremendamente espigada ya antes del desparrame de la prefloración.
Y así estamos, con fotoperiodo 12/12, con el interruptor en posición de flora, con un filtro de carbono incorporado al conjunto cuando dejó de convencerme el razonamiento de que el (delicioso) olor que llegaba a oleadas tenía que ser del famoso tarro de gel atrapaterpenos y no de nuestra amiga Maruja pidiendo guerra y con unas ganas enormes de darle candela al resultado de mis desvelos, aunque aún me temo que me queda una buena temporadita de espera.
Pues eso, por aquí nos veremos.
Soy nuevo en esto del autocultivo, inspirado por el confinamiento, como supongo que tantos otros.
A día de hoy tengo una pequeña jungla montada en un armario de 60x60, de cañamones rescatados del grinder. Una lámpara led que dice equivaler a 300 W de sodio, un extractor TT un poco atenuado y 3 macetas con las supervivientes de 5 plántulas preciosas que germinaron de 5 semillas.
Después de ese pleno germinativo, el
Las plantas se vinieron para dentro después de crecer en la terraza algo más de lo que convenía, cuando por lo reconocible de las hojas y los efluvios que soltaban empezaba a ser un inquietante cantazo tenerlas en exterior. Y, sobre todo una de ellas, tremendamente espigada ya antes del desparrame de la prefloración.
Y así estamos, con fotoperiodo 12/12, con el interruptor en posición de flora, con un filtro de carbono incorporado al conjunto cuando dejó de convencerme el razonamiento de que el (delicioso) olor que llegaba a oleadas tenía que ser del famoso tarro de gel atrapaterpenos y no de nuestra amiga Maruja pidiendo guerra y con unas ganas enormes de darle candela al resultado de mis desvelos, aunque aún me temo que me queda una buena temporadita de espera.
Pues eso, por aquí nos veremos.
