El juez alemán Andreas Müller recomendó fumar marihuana a sus colegas en una entrevista reciente con Die Welt. El Juez Müller cree que prohibir la posesión y el uso de cannabis es inconstitucional en Alemania. También, dijo a la prensa que el alcohol representa una amenaza mayor para la persona y la sociedad.
Andreas Müller es juez en el tribunal de distrito de Bernau y llegó a ser conocido como “el juez de menores más duro de Alemania”. A consecuencia de sus juicios, el juez de 58 años se hizo famoso por sus fuertes condenas para la delincuencia juvenil y para los radicales de derechas. De hecho, prohibió en sus juzgados que éstos últimos llevasen botas militares, además de enviar a presión con largas condenas a jóvenes matones.
También, el Juez Müller lleva más de veinte años relacionado con todo lo referente a las políticas de drogas en Alemania. A su vez, el juez alemán es una de las personalidades más influyentes a favor de la legalización del cannabis en el país. Su estrategia en este campo iría más cercana a la tolerancia y a la educación que la disuasión.
En su entrevista con el Diet Welt y cuando le formularon la pregunta sobre su enfoque personal sobre el consumo de cannabis, el juez alemán contestó:
“ Fumé mi primer porro cuando tenía 18 años. También recomendaría a todos los jueces alemanes que fumen marihuana. La mayoría no notaría nada, y otros verían que no es tan malo, aunque la mayoría de ustedes, de todos modos, probablemente lo sepan de su entorno. O por tener experiencias personales”.
En otra entrevista con RTL dijo que él siempre abogó por una política de drogas diferente durante décadas.
“Con la criminalización, no hemos creado nada más que destruir muchas carreras a través de la estigmatización y a través de la criminalización. Hemos destruido familias y aún las destruimos hoy”.
Dos puntos de vista diferentes
“Tratos abiertos y honestos son lo que necesitamos y no campañas como fumar hierba no es genial “. Esto es todo lo contrario de la campaña contra el cannabis de Daniela Ludwig, la comisionada de drogas del gobierno federal alemán. La campaña comenzó con una oferta de prevención en las redes sociales y tenía como objetivo desalentar en consumo de cannabis en particular en los jóvenes. “El cannabis ha estado a la vanguardia de las drogas ilegales en adolescentes y adultos durante años”, dijo la comisionada Ludwig. El debate sobre la legalización le resulta problemático porque crea la impresión de que el cannabis es una “hierba inofensiva”.
El punto de vista del juez Andreas Müller no es el mismo. La protección de los menores también es muy importante para él en esta cuestión, pero cree que hasta ahora se ha tenido un enfoque equivocado.
“La protección de los menores hasta la fecha no es suficiente porque todos pueden llegar a algún lado. Ciertamente tenemos algunos jóvenes que fuman demasiado, pero no podemos ir allí con el derecho penal. Y decirles: ustedes son los malos, los llevamos al tribunal, los estigmatizamos, los criminalizamos”.
El Juez vivió la política de drogas en su propia familia
El juez dice que lidiar con el alcohol está asumido por la sociedad y el cannabis está mal visto por ahora. “Todos pueden emborracharse y quien fuma cannabis es malo. […] Esto está muy mal”. Su padre fue alcohólico. Se cuenta que su hermano de joven fumó cannabis y fue pillado trayendo de los Países Bajos. Fue encarcelado y su padre continuó bebiendo. No entiende por qué su hermano era más criminal que su padre.
“Nuestra ley de uso de cannabis es inconstitucional. Viola el principio de proporcionalidad”. Es por eso que recurrió al Tribunal Constitucional Federal, que también podría verificar en contra de la política si estas leyes son realmente inconstitucionales. Espera que las políticas de drogas actuales se repiense y se ajusten.
El pasado mes de abril ya envió una propuesta al Tribunal Constitucional Federal Alemán (BVerfG) de cambios relacionados con la prohibición del cannabis en el país. También y anteriormente en 2002, Müller pidió al BVerfG que verificará si la prohibición del consumo de cannabis cumple con la ley alemana. En ese momento, el BVerfG consideró inadmisible la solicitud del juez, en parte porque se vinculó a una decisión anterior de 1994 que criminaliza el cannabis.