La Ministra de Justicia de Israel sugiere que las multas sustituyan a los procedimientos penales, los ministros votarán el proyecto de ley este domingo.
El Ministerio de Justicia de Israel está estudiando la posibilidad de despenalizar el consumo de marihuana, dijo el miércoles la ministra de Justicia, Ayelet Shaked.
Shaked dijo a la Radio del Ejército que bajo las directrices potenciales, aquellos pillados consumiendo cannabis tendrían que pagar una multa, pero ya no sería considerado un acto criminal.
La razón de ser de la potencial política, dijo Shaked, es que el consumo de marihuana está demasiado extendido para ser considerado como un crimen, aunque mediante la emisión de multas, se mantendría como un acto que no está permitido por el gobierno. Cuando el entrevistador le preguntó Shaked si este podría ser el primer paso en la legalización de las drogas blandas, la ministra destacó que “estamos hablando de despenalizarla, no legalizarla.”
Shaked también dijo que había comenzado a investigar el cambio de políticas sobre las drogas blandas poco después de entrar en el cargo el año pasado, y que una amplia labor ya se había hecho en esta materia.
Mientras que la ministra de Justicia no entró en detalles, la revista online en hebreo Cannabis Israel dijo el martes que el Comité Ministerial de Legislación votará el domingo un proyecto de ley para despenalizar la marihuana.
Según el informe, la nueva legislación despenalizaría en Israel la posesión de hasta 15 gramos de cannabis para cualquier persona mayor de 21. Aquellos pillados en su casa con una cantidad personal de cannabis pagarían una multa de NIS 300 y en publico 1.500 NIS.
La nueva política no cambiaría las ramificaciones para los que están atrapados cultivando la droga en sus hogares ni para los usuarios menores de 21 años, dijo el informe.
En marzo, una legislación similar fue rechazada por el Comité Ministerial de Legislación, que habría permitido hasta cinco gramos de cannabis para uso personal.
Entre los países occidentales, Israel ya tiene uno de los índices más altos de consumo de cannabis legal por habitante, con más de 21.000 personas con licencia médica para usar el medicamento.
