Nueva York, EEUU.- Según leíamos en el Daily News, Judá Izsraael, activista y co-propietario de Candy Weed World ha a paseado sus dulces caramelos por South Beach, Florida, de Nueva Orleans a Jamaica y en Queens.
Regala sus piruletas en las calles de la ciudad, así es.
Judá Izsraael tiene una sensación de bienestar por cumplir su misión de difundir el evangelio de la ganja, lanzando caramelos “de cannabis” con nombres gloriosos como White Widow, OG Kush and Dream Blueberry desde South Beach, Florida, a Nueva Orleans.
Ahora, el activista y co-propietario de Candy Weed World esta recorriendo la Gran Manzana para convertir a la gente a favor del cannabis.
“La marihuana ha tenido una mala reputación durante muchos años por el hombre”, dijo Izsraael, de 43 años, el miércoles pasado . “Ahora es su momento.”
Conduciendo una Ford Econoline adornada con hojas de marihuana y chicas en bikini, Izsraael ha repartido piruletas junto St. Marks Place y W. 4th St., Times Square y Union Square desde el abril pasado.
Izsraeel también pregona fuera de Barclays Center de Brooklyn, en Jamaica y Queens sobre como su mercancía inspira , dijo.
“Nos instalamos donde queremos”, dijo un Izsraael relajadoy vestido de Crocs, pantalones cortos y una camiseta en tonos tierra. “Todos debemos educar a la gente.”
La noche del miércoles, un puñado de mujeres atractivas con pantalones cortos y camisetas sin mangas y que trabajan para Izsraeel paraban a los transeúntes en la calle 14 cerca de University Place con puñados de cannabis piruletas.
La mayoría ignoraba que estaban “inspiradas con sativa”, otros estaban atónitos.
“¿Esto es real?” -preguntó una mujer con los ojos abiertos y la boca abierta. “¿No nos quedaremos “pillados”?”
Izsraael dice sus dulces contienen sólo una pequeña, pero legal, cantidad de THC,el ingrediente psicoactivo de la marihuana que te consigue colocar.
“No estamos dando porros”, dijo. “No podemos garantizar que todo el mundo se coloque”.
Pero eso no impidió que algunos “fumetas”experimentados tratasen desentir el zumbido.
“Fumo mucho malezas, esto es totalmente emocionante”, dijo Barbara Bulvinaite, de 19 años, tomando una con sabor Purple Haze piruleta.
El residente de Washington Heights añadió que había pasado recientemente una noche en la cárcel por fumar en un coche.
Reynilda Fernández, de 26 años, se sentía igualmente eufórica.
“La marihuana es lo mejor del mundo”, dijo la artista del Bronx, que gozaba de un dulce sabor Sour Diesel. “Pero me voy a tomar como 20 de estas cosas para colocarme”.
