Reportera se bebe una botella de lubricante vaginal con THC

Una reportera probó el nuevo lubricante vaginal que contiene THC, Foria, y como no podía conseguir el “subidón” al esparcirlo por sus genitales decidió beberse la botella entera. “No recomiendo beber cualquier tipo de aceite lubricante,” dijo la periodista después de la experiencia .

Mira González, periodista de VICE, publicó en una columna personal  su experiencia después de beberse una botella entera de lubricante, Foria, producto que contiene altas cantidades de THC y que está diseñado para alargar el orgasmo sexual femenino.

De acuerdo con la declaración del fabricante de la marca del aceite lubricante, contiene 450 mg de THC el equivalente a unos 45 porros aproximadamente.

González consumió el aceite lubricante por vía oral en lugar de aplicárselo como un tópico por sus partes más intimas como dicen las instrucciones de uso del fabricante. Al ver que su experiencia lubricante no satisfacía sus expectativas decidió consumirlo de forma oral y todo el frasco, esperando sentir su influencia con la esperanza de que el efecto se viera reforzado.

                 “Me encanta la idea de consumir THC a través de mi vagina, pero el lubricante de cannabis no estaba teniendo los efectos psicoactivos en mí que normalmente tienen los comestibles”

               “Cuando se trata de alimentos y extractos de cannabis, por lo general me dicen que se consume 2 o 3 veces menos de los que recomiendan en la venta de la tienda”, escribe González, “me siento enojada y me pongo a la defensiva cuando la gente piensa que no puedo manejar mis medicinas, lo que inevitablemente me lleva a consumirlo todo para demostrar que están equivocados”

Aunque González se describe a sí misma como una joven que “tiene una amplia experiencia en el consumo de cannabis,” ninguna experiencia anterior la había preparado para una experiencia tan intensa como la que le llevó la mayor cantidad de THC consumida. Aparte de un mareo severo y la dificultad para levantarse de la cama, González también experimentó una noche llena de pesadillas.

“Me desperté a la mañana siguiente y llorando le decía a mi amigo que no quería ir a Disneylandia,” dice ella. “A pesar de que ni siquiera tenía planes para ir allí.”

También dijo que durante dos estuvo  experimentado ataques de pánico e incluso tuvo dos sesiones cortas de alucinaciones visuales, aunque el principal efecto secundario y claro del THC era su profundo sonambulismo.
 “Doy una calificación de la experiencia de 2 entre 5, y por lo general no recomiendo beber cualquier tipo de aceite lubricante, especialmente uno que contenga THC”, concluye, “Sin embargo, un número pequeño de sorbos de aceite en la boca debe traer consigo una experiencia psicoactiva agradable “.