Hay personas que no pueden ni fumarse uno porque les podría desencadenar problemas psicológicos, pero para ello hay que tener cierta predisposición, si eres una persona equilibrada, no hay antencedentes de cancer de pulmón o garganta o boca en tu familia, y no tienes una personalidad adictiva o compulsiva, un canuto de vez en cuando no sienta mal.
Si eres fumeta habitual, poco a poco tu cuerpo se irá acostumbrando a la dosis que le proporciones y llegará un momento en el que tendrás que aumentarla. De continuar así, la dosis necesaria para tener un agradable viaje se puede duplicar, triplicar, cuadruplicar... en fin, que necesitarás mucha más cantidad para sentir la magia de la subida.
El cuerpo humano es sabio, y tiende al equilibrio, así que si tu tratas de desequilibrarlo durante mucho tiempo, él hará lo posible por volver a la situación normal.
A nivel psicológico desarrollarás dependencia. Si todos los días al levantarte te lias un canuto, establecerás un ritual diario en el que al final, si no fumas, notarás que algo te falta. A mí me pasaba con mi sofa de fumar. Dejé de fumar al mismo tiempo que me mudé de casa, y cuando volví a ver a mis antiguos compañeros, al sentarme en el sofa me entraron unas ganas tremendas de fumar... en fin, que creas lazos de los que sólo te puedes desprender con voluntad y cambio.
A nivel de salud, la combustión del canuto tiene efectos nocivos. Cuanto más fumes, más efectos nocivos, logicamente.
Muchos fumetas, para evitar todo eso establecen descansos. Con descansos de una semana o un mes se recupera la magia de fumar y se mantiene a raya la dependencia psicológica.
Bueno, te he metido un buen rollo, pero creo que mejor estar informado antes de tomar decisiones que te afecten ¿no?
Saludos
