Cultivo de guerrilla de jorge cervantes

Karrigüela

Semilla
6 Enero 2012
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INTRODUCCION:

Introducción Marihuana en exterior: cultivo de guerrilla muestra a los lectores cómo los cultivadores de marihuana de distintosclimas y continentes utilizan las técnicas de cultivo de guerrilla (clandestino) para hacer crecer la mejor marihuanacon la ayuda de la Madre Naturaleza. Alrededor del mundo, cada vez se cultiva más marihuana de calidad enexteriores. Los cultivadores de América del Norte, América Central, Europa Occidental, Australia y Nueva Zelandaestán aplicando los sencillos principios que describe este libro para cultivar más y mejor marihuana cada día. Entretodos los cultivadores de cada clima, he creado un cultivador «compuesto» para ilustrar la agricultura de la zona.Se examinan los cinco climas principales para el cultivo del cannabis y se incluye una sección especial de cultivo desecano. Los cultivadores «compuestos» de los diferentes climas dan ejemplos paso a paso y explican exactamentecómo cultivan grandes cosechas.Cientos de cultivadores fueron entrevistados para recoger la información de este libro. Los cultivadores «compues-tos» que se citan son de cinco climas muy diferentes. También se incluye una pequeña sección sobre cultivo desecano. Diferentes climas requieren distintas técnicas y estrategias de cultivo. Cada uno de los cinco ejemplosmuestra una mirada personal frente a un clima y los particulares desafíos que plantea. Por ejemplo, un cultivador enlos Alpes suizos o en las Montañas Rocosas de Estados Unidos utiliza unas técnicas de cultivo muy diferentes a lasde un cultivador en un clima árido desértico como el de la península Ibérica o la costa de California. Pese a todo, losdos cultivan la misma planta y pueden usar técnicas similares. Para entender completamente un clima, el lector debeestudiarlos todos, ya que el libro se centra en las similitudes y diferencias entre los cultivadores y los climas. Eldetallado Apéndice ayudará a definir los términos y será de gran utilidad para los lectores serios.Cada capítulo comienza con una breve introducción sobre los cultivadores, el clima y las situaciones de cultivo.Todos los cultivadores descritos tienen el mismo deseo: cultivar marihuana de la mejor calidad de forma segura,fácil y con la menor inversión posible de tiempo y dinero. El texto continúa describiendo sus técnicas para seleccio-nar y acondicionar zonas de cultivo en relación con la seguridad. El clima y la tierra constituyen el tema principal decada capítulo, ya que de ellos depende lo que el cultivador tiene que hacer para lograr los mejores resultados.Las soluciones para los problemas de cultivo pueden variar de un clima a otro, pero también pueden ser las mismas.Una adecuada provisión de agua puede ser la principal preocupación en un clima seco, mientras que la proteccióndel frío será básica en un clima de montaña. En los climas húmedos, el moho de los cogollos será la principalpreocupación, independientemente de la altitud o localización.Los cultivadores utilizan también una combinación de técnicas de cultivo en interior y exterior para lograr losresultados más seguros. Con la llegada de numerosos bancos de semillas que proveen de excelentes semillas, loscultivadores pueden hacer esquejes en interior y sacarlos al exterior para aumentar la cosecha y disminuir la canti-dad de trabajo.Los cultivadores guerrilleros también dan muchos consejos de cultivo que están destacados como diálogo. Uneditor comentó: «Leer cada capítulo es como hablar con un amigo que ha estado cultivando marihuana en mi climadurante veinte años. Puede decirte todo lo que hizo, de principioafin, y lo mejor de todo, es real, son consejosdirectos».El Apéndice está lleno de información sobre cannabis, tierra, fertilizantes, agua, insectos y mucho más.Puedes encontrar mis artículos enCannabis Culture(Canadá), High Times(Estados Unidos), Hanf, Grow(Alema-nia), High Life, Essensie(Holanda),Weed World, Red Eye Express(Reino Unido),CÁÑAMO El Cogollo(España) yvisitar nuestras páginas web -mari juanagrowing.com y canamo.net-. Están llenas de páginas de información actua-lizada sobre cultivo. Añadimos nueva información regularmente. Además, puedes leer otras revistas de jardinería yla sección del periódico donde encontrar información sobre el clima local.

CONVERSACIONES CON UN GRAN CULTIVADOR DE GUERRILLA:

Capítulo I:Tom, un americano, es uno de los cultivadores con más éxito que he entre-vistado. Sus métodos son extremadamente simples y fáciles. Es un hombrebastante vago, pero también inteligente, que presta atención a la MadreNaturaleza. La comprensión que tiene Tom del crecimiento de las plantas leconvierte en un cultivador de guerrilla exitoso. Los siguientes conceptosbásicos son claves para entender el cultivo de guerrilla.La marihuana en estado salvaje es una planta vigorosa, agresiva y competi-tiva. Algunas variedades cuentan con un gran sistema de raíces que les per-mite sobrevivir cuando les falta agua o la tierra es pobre. Las plantas separadas almenos 3 metros crecerán, en clima seco, de90 a 150 centímetros. El cannabis es un su-perviviente. En un área controlada de culti-vo de 0,4 a 1,2 metros cuadrados, con tierrapobre, las plantas maduras crecerán alrede-dor de un metro y medio con una gran colao cogollo en la punta. La cosecha es relati-vamente grande considerando el poco tra-bajo que da el cultivo. Si preparas cuidado-samente el terreno y la plantación, cosecha-rás mucha más hierba. Remueve la tierra,acondiciónala un poco y añádele un puñadode polímeros.1Cubre la tierra alrededor dela planta con una gruesa capa de mantillonatural que atraiga el agua condensada yevite la evaporación de la humedad del sue-lo. Estas simples técnicas pueden doblar lacosecha.Una tierra adecuada permitirá que las plan-tas crezcan de 2 a 2,5 metros, desarrollandounas raíces que se extienden 1,5 metros al-rededor y penetran en la tierra hasta casi 2metros de profundidad. Estas plantas rendi-rán de dos a diez veces más que si se plantanen tierra pobre.Para preparar un jardín de exterior, eliminalas malas hierbas en otoño, cava agujeros deplantación y prepara la tierra. La tierra ab-sorberá el agua de lluvia y estará bien mezclada para la primavera. Cubre cada agujero de plantación con una capade mantillo para protegerlo de las lluvias de invierno y de las temperaturas. Esta capa de mantillo es muy importan-te. No dejes la tierra desnuda durante todo el invierno.Trasplanta las plántulas o los esquejes en primavera y cuídalos como harías con los tomates. Si cultivas en tierrapobre, cava para cada planta un agujero de 1,2 metros de diámetro por 1,2 metros de profundidad y rellénalo contu mejor mezcla de compost, tierra de trasplantes o substrato universal. Remueve la tierra en un radio de 2 metroshasta una profundidad de unos 20 centímetros para que las raíces se puedan extender.Para regar de forma barata y efectiva, haz un agujero de medio centímetro de diámetro en el fondo de un cubo de1. Los polímeros son pequeños cristales que se expanden hasta unas quince veces su tamaño cuando se mojan con agua. Se añaden a la tierra para alargar el tiempo entre riegos.
20 litros. Mezcla en el agua un fertilizante barato completo y pon el cubo sobre la tierra de manera que el agujeroquede junto al tallo de la planta. Cultivando de este modo, sólo con 4 o 6 cubos de agua aguantarán todo el verano.Riega un cubo cada diez días en tiempo caluroso. Si se riegan de esta manera, las plantas crecerán tan bien comosi tuvieran mucha agua.Si las plantas no reciben agua, forman cogollos pequeños. Una planta de 150 centímetros puede producir de 25 a170 gramos de cogollos fumables. Esta misma planta, con un poco de agua, crecerá mucho mejor y producirá máshierba de primera calidad. Podemos cultivar una planta que necesite de 80 a 160 litros de riego suplementario portemporada. O cultivar una planta que obtenga una cantidad ilimitada de agua y alcance prácticamente el mismopeso en la cosecha. ¿Por qué sucede esto?Primero la planta debe usar toda el agua de la tierra. La planta debe coger todos los nutrientes que necesita y quenaturalmente se encuentran en el subsuelo. Si incrementas ligeramente el riego y el aporte de nutrientes, obtienesuna planta mucho más fuerte y robusta.¿Cuánta agua hay previamente en la tierra? La tierra adecuada tiene 2,5 centímetros de agua por cada 30 centíme-tros de área. En 1,2 x 1,2 x 1,2 metros de buena tierra hay unos 120 litros de agua.Busca grandes núcleos de vegetación. Elimina las hierbas y las plantas verdes en otoño y cultiva el jardín laprimavera siguiente. Una de las principales cosas que hay que tener en cuenta es un adecuado suministro de agua.Muchas partes de Estados Unidos y diferentes partes del mundo cuentan con lluvias de verano que permiten elcultivo de secano. Necesitas lluvias semanales de 0,5 a 2,5 centímetros por semana. Es muy importante que lluevaregularmente durante la primavera y el verano. Un otoño seco es ideal para cosechar. Mucha lluvia y humedadfavorecen la aparición de moho en los cogollos.

CAPITULO 2,CLIMA COSTERO FRESCO Y LLUVIOSO:

Noroeste de Estados Unidos,Columbia Británica (Canadá),Reino Unido,Norte de Europa,Galicia,Costa del Cantábrico.Vansterdan vive en la Columbia Británica, en el «cinturón del plátano» de Ca-nadá, un clima bendecido con temperaturas moderadas, abundancia de lluviasy bosques perennes de coníferas. La marihuana prospera en los jardines trase-ros de la Columbia Británica. Los pequeños jardines y parcelas en montañas ypantanos necesitan poca atención una vez plantados. Este clima es similar al del Reino Unido, la costa norte yatlántica de Europa, Tasmania y el sur de Nueva Zelanda. Las precipitaciones anuales son de 100 centímetros o másy el invierno llega pronto, con niveles bajos de luz y lluvia fría que facilitan la proliferación de hongos.Vansterdan tiene un gran jardín traseroorientado al sur y rodeado por una altavalla. Combina su cultivo de interior, in-vernadero exterior y jardín para lograr lamáxima producción. Empieza los esque- jes con luces y los saca al exterior a unpequeño invernadero con calefacción, al jardín o a cultivos de montaña.El año pasado, Vansterdan compró se-millas de empresas holandesas y canadien-ses. Sacó 30 esquejes de cada una de lassiguientes plantas madre: Skunk#1, JackHerer, Blueberry, Romulan, El Niño ySuper Silver Haze, un total de 180 es-quejes. Tres semanas después, los 180esquejes estaban bien enraizados.Vansterdan escogió los más fuertes, lamitad de cada variedad, para llevarlos asu invernadero y a los jardines de exte-rior.Trasplantó 30 esquejes en el jardín trase-ro, 10 en el invernadero y los 50 restan-tes los plantó en las montañas cercanas.Elección del lugar / SeguridadLa seguridad no es un gran problema enVancouver. Vansterdan vive en un barrioconservador con vecinos a tres lados. Las plantas pueden crecer hasta la altura de la valla sin ser vistas. El invernade-ro está colocado en la cara sur de la casa y mide 1x2 metros y tiene 1,2 metros de alto. Cultiva 30 plantas demarihuana en el inverna-dero y en el jardín trasero entre las hortalizas y verduras. Algunas crecen en el terreno,mitras que otras están en macetas enterra-das en el suelo.Vansterdan compró un mapa del Ministerio de Bosques, de los alrededores de Vancouver, cogió su bicicleta de
montaña y salió a buscar nuevas localizaciones para jardines. Sus criterios: soleado, de acceso público limitado ycon buena provisión de agua.«Busco una colina orientada al sur donde el sol brille todo el día. El bosque es muy seguro, pero los árboles hacendemasiada sombra. Por eso busco grupos de zarzas espinosas, helechos o hierba de pradera donde plantar.»La elección del lugar y la seguridad no son tareas muy problemáticas en la Columbia Británica. Hay pocas patrullasaéreas buscando marihuana y el campo está verde todo el año, lo que hace que el cannabis sea difícil de distinguirde otras hierbas. El mayor riesgo para la seguridad del cultivo son los pescadores, cazadores y montañeros. Otraszonas con un clima parecido, como la costa atlántica y el norte de Europa, están más pobladas y requieren métodosde plantación más clandestinos. Es necesario camuflar el jardín a lo largo de una valla o entre otras plantas. En laColumbia Británica, los principales obstáculos son el clima frío y húmedo y la competencia con las malas hierbas.Preparación del lugar y de la tierraPreparar tres lugares requiere tres estrategias diferentes. El pequeño invernadero necesita un poco de calor paraacelerar el cre-cimiento. Para calentar fácilmente un invernadero se puede recurrir al calor natural generado por elsol o al calor artificial de la electricidad o de un combustible como el gasóleo. Para conservar el calor natural del sol,Vansterdan revistió el suelo del invernadero con 5 centímetros de poliestireno. También colocó un zócalo interiorde poliestireno, de 2,5 centímetros de grosor y 18 centímetros de alto, rodeando el perímetro del invernadero.Construyó el invernadero de uralita (fibra de vidrio ondulada y traslúcida). El pequeño invernadero parece un lugarpara guardar herramientas o trastos, ya que no se ve lo que hay dentro. La uralita deja pasar la suficiente cantidadde luz para el crecimiento vegetativo incluso en días con poca luz. Para añadir más calor, Vansterdan pega con cintaaislante un cable caliente al suelo de poliestireno y lo cubre con una delgada lámina de metal, que ayuda a repartirel calor de forma homogénea.Vansterdan es un ávido cultivador de hortalizas y lleva más de una década añadiendo estiércol y compost al jardín.Sus vecinos están acostumbrados a su fanatismo por la jardinería y no sospechan que cultiva marihuana. Cadaprimavera extiende tres metros cúbicos de compost maduro y estiércol por el jardín. Añade caliza dolomía odolomita para elevar y estabilizar el pH y la mezcla bien con la tierra. Una vez que las hortalizas están plantadas ycreciendo bien, Vansterdan trasplanta los esquejes fortalecidos al jardín.«La tierra es tan rica y fértil, que ni siquiera necesito una pala para hacer un agujero de plantación. Simplementeabro la tierra con mis manos, pongo el esqueje dentro y presiono la tierra alrededor de las raíces antes de regarlo»,nos cuenta Vansterdan con el orgullo de un jardinero orgánico consumado_Otros cultivadores construyen invernaderos bajos similares en azoteas en las ciudades o en balcones cerrados.Lechos elevadosLa tierra de las regiones frías y costeras es arcillosa pesada, que se calienta lentamente y drena mal. La plantaciónen camas convierte estos inconvenientes en ventajas. Los lechos deben elevarse de 15 a 20 centímetros para bene-ficiarse del calor y la mejora del drenaje. Utilizando lechos elevados, Vansterdan planta de dos semanas a un mesantes que otros jardineros.Si el mal drenaje es el único obstáculo y hacer lechos elevados es demasiado difícil porque el jardín está en un lugarremoto, los cultivadores más astutos «sueltan» la tierra arcillosa con un pico y una pala antes de labrarla con yesogranulado para que se rompa la arcilla.CompostLas claves del compostaje son simples: recoge materia orgánica (hierba cortada, ramas troceadas, materia vege-tal...), apílala y deja que se pudra. El montón debe tener al menos un metro cuadrado para mantener más calor delque se disipa.«Es fácil hacer compost», dice Vansterdan. « En verano, los jardineros profesionales cortan la hierba y otrosdesechos del jardín y se deshacen de ellos. Le pedí a uno que echara estos restos junto al camino de entrada de micasa. Me daba unos 3 metros cúbicos por semana. Al final del verano, tenía más de 40 metros de recortes de céspedy desechos de jardín. Lo mezclé con virutas de madera para aportarle carbono y aire. Al año siguiente,¡tenía de 3 a6 metros cúbicos del mejor compost del mundo!»«Conozco un cultivador muy atrevido que planta las cosechas de primavera encima de los montones de compost.
Apila el compost hasta una altura de 60 a 90 centímetros formando una cama elevada. A continuación añade de 7 a10 centímetros de buena tierra y planta esquejes de unos 30 centímetros. Cuando las raíces llegan al compost, éstese ha enfriado y no quema, pero mantiene los esquejes calientes. Coloca un invernadero encima para proteger elfollaje. Si tiene suerte y el tiempo coopera, recogerá una cosecha de primavera», dice Vansterdan con un gestoperplejo.Tierra de montaña y de ciénaga«La mayor parte de la tierra de los alrededores está llena de agujas del abeto de Douglas y es muy ácida. El pHronda el 5, lo que hace que las plantas crezcan lentamente. Busco lugares donde crece la hierba de pasto. La tierrasuele ser un poco pobre, le faltan nutrientes, por lo que tengo dos estrategias. La primera la utilizo en lugares convegetación baja, para plantar en pastizales o zonas pantanosas. Corto 1 metro cuadrado de hierba del suelo con unapala, le doy la vuelta y planto encima. De este modo puedo trasplantar unos 50 esquejes en un día. La tierrapantanosa aporta la suficiente agua, y yo sólo añado un poco de fertilizante de liberación lenta cuando voy arevisarlas la primera semana de agosto. Está claro que estas plantas no crecen tan grandes como las de mi jardín,pero no me dan mucho trabajo.»Vansterdan lleva doce años plantando en jardines secretos en las montañas a los que sólo se puede llegar andandoo en bicicleta de montaña. Cosecha alrededor de la mitad de los esquejes que planta. El resto se pierden a manos delos humanos y otros animales (insectos, hongos), o a causa del clima.«Cultivar en la Columbia Británica es diferente que hacerlo en los alrededores de Toronto, por ejemplo. El tiempoaquí, en las tierras bajas del continente, es suave en verano, con chaparrones ocasionales. La lluvia fuerte comienzaen septiembre. Si tu cosecha no está recogida para mediados de septiembre, los cogollos se mojan y se enmohecen,normalmente con moho gris (botritis), a veces el polvoriento mildíu comienza antes en las hojas. Toronto está en elcentro del continente y es mucho más cálido y húmedo. Las plantas crecen más rápidamente, pero también debenser recogidas antes de las heladas», dice Vansterdan con un fuerte acento canadiense.Si el tiempo coopera y Vansterdan planta pronto, los esquejes establecen un sistema de raíces fuerte y denso y nonecesitan mucha agua durante la temporada de crecimiento. Una gruesa capa de mantillo ayuda a conservar el aguay a combatir las malas hierbas.Fortaleciendo los esquejes y las plántulasDespués de que los esquejes llevan tres semanas enraizando en cubos de lana de roca, Vansterdan los trasplanta amacetas de 10 centímetros llenas de tierra orgánica. Manipula las raíces con cuidado y riega los trasplantes enabundancia para que las raíces penetren en la nueva tierra. Deja los esquejes bajo una lámpara de sodio de altapresión de 400 vatios durante dos semanas antes de sacarlos al invernadero para que se fortalezcan. Mantiene losesquejes en bandejas para que sean fáciles de mover. Como no hay sitio en el invernadero para todos los esquejestrasplantados, Vansterdan llena el invernadero tres veces consecutivas. La primera cosecha de esquejes se trasplan-ta a la tierra o a macetas de 12 litros y se coloca en el jardín después de dos o tres semanas fortaleciéndose. Lasegunda cosecha de esquejes entra en el invernadero para fortalecerse y luego se trasplantará a los cultivos de lasmontañas cercanas. El tercer grupo de esquejes entra en el invernadero y crece hasta que tiene unos 45 centímetros.Luego Vansterdan induce la floración cubriendo el invernadero de forma que las plantas tengan 12 horas de oscu-ridad.Trasplantar al jardín de la montañaVansterdan cultiva los esquejes que trasplanta al jardín de la montaña en contenedores altos que promueven unsistema de raíces fuerte y profundo. Él usa contenedores de 15 centímetros de alto y 7 centímetros cuadrados.«Cuando trabajaba para el Servicio de Bosques, aprendí un truco», explica Vansterdan. «Ellos plantan semillas deárboles en contenedores altos para que tengan un sistema de raíces profundo y fuerte. El sistema radicular denso yprofundo da lugar a una planta fuerte. No podré regar o cuidar mucho a estas plantas. Un sistema de raíces fuertescontrarresta la falta de cuidados.»Otros cultivadores trasplantan esquejes de 30 centímetros con un sistema de raíces menor. Quitan los primerospares de horas y entierran las raíces más profundas en el terreno, dejando tan sólo 15 centímetros de follaje porencima del terreno. Durante las próximas semanas, el esqueje echará raíces a lo largo del tallo enterrado. «Intentovolver a ver los esquejes dos o tres veces desde que los planto.
Siempre que voy, orino alrededor de lasplantas para asustar a los ciervos y a losconejos. Como no suelo tener suficien-te, llevo orina en una botella y la salpicoalrededor de las plantas», dice con unamueca.Germinación y cuidados de lassemillasLas semillas de cannabis sólo necesitanagua, calor y aire para germinar. En au-sencia de luz, correctamente humedeci-das y con temperaturas entre 21 y 32°C, las semillas tardarán en germinar de 2a 10 días. La germinación es más rápidacon temperaturas altas, pero empeora sila temperatura sube a más de 32° C.Cuando las semillas germinan, la cásca-ra exterior que las protege se abre y saleun pequeño brote blanco (la radícula). Los cotiledones emergen del interior de la cáscara al empujar hacia arriba enbusca de luz.Hay dos métodos muy populares de germinar semillas. Uno consiste en colocar los cañamones en papel de cocinao en una servilleta de papel humedecidos en una habitación cálida (entre 21 y 32° C). No debe darles la luz.Riega la servilleta o el papel cada día para mantenerlo húmedo, pero escurre el agua que sobre. Los cañamonesgerminarán en pocos días. La semilla contiene una reserva de alimento para la germinación. El crecimiento seacelera si regamos con una solución sua-ve de fertilizante. En climas húmedos, rie-ga con una solución suave de lejía o deun fungicida (de 2 a 5 gotas en 4 litros)para prevenir los hongos. Planta las se-millas cuando se vea el brote blanco (laradícula). No expongas la tierna radículaa luz o viento intensos por un tiempo pro-longado. Planta la semilla germinada enla tierra, a una profundidad de 0,5 a 1centímetros, con la punta de la radículahacia abajo. Si no sabes qué parte debe irhacia abajo, coloca la semilla tumbada delado.El segundo método de germinación con-siste en enterrar las semillas en un semi-llero o cubo de enraizamiento y mante-ner el substrato uniformemente húmedo.Trasplanta de dos a cuatro semanas des-pués de que la plántula nazca. Utiliza unacuchara para sacar la plántula y trasplan-tarla con las raíces intactas.Una esterilla caliente o un cable calientebajo o en la tierra acelerarán lagerminación sin secar la tierra demasia-do rápido.
Un problema habitual entre los novatos a la hora de germinar es el exceso de riego. Mantén la tierra húmeda demanera uniforme, pero no empapada. Planta las semillas en una bandeja de germinación y ponlas en un lugar cálido(no caliente), como encima de la nevera, por ejemplo. Pon un trozo de papel mojado encima de la tierra, para queretenga la humedad. Quita el papel tan pronto como las semillas germinen y salgan de la tierra. Si se deja el papel enla tie-rra se inhibe el crecimiento. Habitualmente, cuando se utiliza este sistema, las semillas sólo necesitan un riegoinicial. Una bandeja o un semillero con una esterilla caliente debajo pueden necesitar riego diario, mientras que unamaceta profunda, de unos 4 litros, necesita ser regada cada dos o tres días. Cuando la superficie de la tierra estáseca (de 0,5 a 1 centímetros de profundidad) es hora de regar. Recuerda que cuando las plantas son jóvenes haypocas raíces para absorber el agua y son muy delicadas.Los cotiledones son las primeras hojas que aparecen cuando germina la semilla. En unos pocos días, crecerán lasprimeras hojas reales. Durante el estadio de plántula, el sistema de raíces crece con rapidez, mientras que el creci-miento del follaje es lento. El nuevo sistema de raíces es muy pequeño y requiere una cantidad moderada peroconstante de agua. Demasiada agua ahoga las raíces y causa podredumbre de éstas o del tallo. La falta de agua secael joven sistema de raíces. Conforme las plántulas vayan madurando, unas crecerán más rápidas y fuertes. Otrasserán débiles y larguiruchas. Vansterdan entresaca las plantas débiles entre la tercera y quinta semana y trasplantalos ejemplares fuertes sin ningún daño.Temperatura de la tierraLos cubos de enraizamiento, de lana de roca (rockwool), turba, etc. son muy cómodos y promueven un sistema deraíces fuerte. Las macetas de turba son pequeños contenedores fabricados con turbaprensada con una pared exterior permeable. Planta la semilla o el esqueje en la maceta de turba y mantenlo siemprehúmedo. En los esquejes asegúrate de apretar la superficie del substrato alrededor del tallo para que haya uncontacto firme entre el tallo y el substrato. Cuando las raíces asomen por los lados del contenedor es el momento detrasplantar. Cuando se hace bien, las plántulas y los esquejes no sufren ningúnshock por el trasplante. Compruebalos cubos de enraizamiento y las macetas de turba a diario. Mantén una humedad uniforme, pero que no esténempapados. Los cubos de enraizamiento y las macetas de turba no tienen nutrientes. Alimenta las plántulas cuandotengan una semana y los esquejes tan pronto como estén enraizados con un fertilizante muy diluido. Utiliza la mitado la cuarta parte de lo que diga la etiqueta.Método intensivo de semillasOtra opción es plantar muchas semi-llas en un área pequeña. En tierra fér-til y suelta, planta las semillas a 1 cen-tímetro de profundidad. Algunos cul-tivadores preparan pequeños espaciosde 1 metro cuadrado donde plantantres filas de semillas separadas unoscentímetros. Los cultivadores que tie-nen cuatro o cinco espacios de culti-vo tienen la cosecha asegurada. Culti-van de dos a cinco plantas en variossitios. La fotografía infrarroja es me-nos efectiva contra jardines pequeños.Para hacer más espacio, los cultiva-dores cortan las plantas débiles a lascuatro o cinco semanas y arrancan losmachos conforme van apareciendo.EsquejesAl contrario que los humanos, elcannabis se reproduce tanto
sexualmente como asexualmente. Las semi-llas son el resultado de la reproducción sexualen tanto que los esquejes representan la re-producción asexual o vegetativa. Lo que loscultivadores de cannabis llaman esquejar oclonar es cortar la punta de una rama yenraizarla. Técnicamente, clonar es reprodu-cir plantas a partir de una sola célula.Una vez que se conoce el sexo de una plan-ta, es hembra y tiene al menos dos meses deedad, es hora de sacar esquejes.Los esquejes son una réplica genética exactade la planta madre. Una planta hembra daráesquejes que serán hembras exactas a la ma-dre. Ocasionalmente, una flor macho puedeaparecer en un esqueje de una planta hem-bra. O una planta puede tener un crecimien-to o una mutación diferente a otros esquejesde la misma planta.Los esquejes de la misma planta dan lugar aadultos idénticos si se cultivan en el mismomedio ambiente. Los mismos clones, en di-ferentes climas, pueden parecer plantas dis-tintas.La clonación también tiene sus inconvenien-tes. La planta madre produce esquejes igua-les a ella; si no es perfecta o resistente a lasenfermedades, los esquejes también compar-tirán sus debilidades. Esquejar es fácil y sen-cillo. Un índice de supervivencia del cien porcien puede conseguirse siguiendo los pro-cedimientos explicados a continuación.La mayoría de los esquejes sacados en pe-riodo vegetativo enraízan con rapidez y cre-cen deprisa.en floración pueden enraizar con rapidez,pero necesitan más de un mes para retomarel crecimiento vegetativo y pueden florecerprematuramente.La clonación cambia la química de la planta.El tallo, del que bro-taban hojas, debe cam-biar y producir raíces para sobrevivir. Se de-ben evitar todos los sprays,Los esquejes sa-cados de plantasya que contribuyen a crearestrés a los esquejes.Los esquejes enraízan más rápido cuandolos tallos tienen un contenido alto decarbohidratos y bajo de nitrógeno. Al lavarla tie-rra con agua eliminamos los nutrientes,incluyendo el nitrógeno. Las hojas puedenlavarse pulverizándolas por ambas caras conagua. Cada día durante una semana pulveri-
za abundantemente, con agua tibia y lim-pia, el follaje. El contenido de carbohidratossuele ser mayor en las ramas viejas, bajas ymaduras. Un buen signo de un alto conte-nido en carbohidratos es que la rama se plie-gue o se doble en lugar de torcerse. Mien-tras enraízan, los esquejes requieren un mí-nimo de nitrógeno y niveles más altos defósforo para facilitar el crecimiento de lasraíces.Los estimulantes del crecimiento de las raí-ces u hormonas de enraizamiento se ven-den en líquido, polvo o gel. Los profesio-nales prefieren el líquido y el gel porque pe-netran mejor. Procuran evitar las hormonasde enraizamiento en polvo, porque se ad-hieren mal al tallo y el índice de superviven-cia es peor.Hay que tener en cuenta que algunos deestos productos no se deben usar en plan-tas comestibles. Lee la etiqueta con aten-ción antes de usar un producto.Los esquejes enraízan más rápido cuandola tierra está templada (entre 21 y 26° C).Los esquejes transpirarán menos si el aireestá a unos 3 grados más frío que la tierra.Pulverizar los esquejes con agua es una buena forma de enfriar el follaje y reducir la transpiración.«Cada vez que comienzo a esquejar una variedad, practico con 5-10 esquejes de prueba antes de hacer una clonaciónen serio», me cuenta Vansterdan con el cuchillo en la mano.El sexo de la plantaLos cultivadores pueden, en ocasiones, co-nocer el sexo de las plantas a partir de lasdoce semanas de edad, que es cuando losmachos y las hembras comienzan a dife-renciarse. Los machos suelen sacar un pe-queño brote, con forma de garra o de uña,en los nudos de la planta donde se juntanuna rama y el tallo. Las hembras tienen ha-bitualmente dos largos pistilos blancospreflorales que salen de un brote similar.La presencia de un brotecito en forma degarra o de dos pistilos blancos no designanecesariamente el sexo de las plantas cre-cidas desde semilla. La única prueba segura de su sexo son las verdaderas flores, que nacen al acortarse los días (verlas fotografías en color).A partir de mediados de agosto, Vansterdan inspecciona las plan-tas a diario y va arrancando los machos conformemuestran flores. A continuación, los seca y se fuma las hojas o se las regala a los amigos.Los esquejes están disponibles todo el año. El año pasado, Vansterdan quiso saber el sexo de las plantas quecultivaba desde semilla antes de trasplantarlas en el jardín. Las semillas eran tan caras que no quería cometer ningúnerror. Las creció desde semilla y sacó esquejes para sexarlas.
Sexar con esquejesEste sistema distingue los machos de las hembras en el cien por cien de los casos sin alterar el ciclo de crecimientode las plantas que queremos sexar. Para sexar con clones debes sacar dos esquejes (uno se podría morir) de cadaplanta. Etiqueta los esquejes para saber a qué planta corresponden.Mientras estén enraizando deben tener sólo doce horas de luz al día. Coloca los esquejes en un lugar totalmenteoscuro o cúbrelos con una caja durante la noche. El fotoperiodo de doce horas desencadenará la floración. Elesqueje mostrará su sexo en dos semanas. Cosecha todos los machos, excepto aquellos que quieras para criar, yconserva las hembras. Los machos se pueden esquejar e inducir a florecer cuando se necesita polen para fecundaruna hembra. Una vez conozcas el sexo de los esquejes, elimina los padres que no necesitas y deja las madres parasacar nuevos esquejes..Deja las plantas madres en el exterior durante el verano para mantener el crecimiento vegetativo. Los esquejestienen que recibir doce horas de luz, puedes cubrirlos con una caja o situarlos en un lugar completamente a oscuras.Asegúrate de que los esquejes reciben 12 horas de luz y 12 de completa oscuridad cada 24 horas. Si la luz se cuelapor alguna rendija o te olvidas de cubrir las plantas, la floración se retrasa y le cuesta más comenzar. Una vez quehayas cosechado las hembras sexadas, puedes decidir qué madres te gustan más.Esquejar o donar paso a pasoPrimero. Elige una planta madre que tenga al menos dos meses de edad y 60 centímetros de altura. Cada mañana,desde una semana antes de cortar los esquejes, lava la tierra con al menos un litro de agua por cada dos de tierra(asegúrate de que la maceta drena bien) o lava las hojas pulverizándolas abundantemente con agua limpia. Estoarrastrará el nitrógeno.Segundo. Elige como esquejes las puntas de las ramas bajas de más edad. Busca una rama firme y sana de 3 a 6milímetros de diámetro y de 5 a 20 centímetros de larga. Con una cuchilla afilada córtala en una diagonal de unos45°. No aplastes el tallo cuando hagas el corte. Poda dos o tres pares de hojas. Debe haber al menos dos pares dehojas en la superficie y uno o dos nudos, a los que les has podado las hojas, bajo tierra. Haz el corte entre dos nudosy sumerge inmediatamente el esqueje en agua limpia y tibia.Tercero. Para que el mantenimiento y el trasplante sean más cómodos utiliza macetas de turba o cubos deenraizamiento. Llena pequeños contenedores o bandejas para plantones con arena gruesa lavada, vermiculita, mez-cla sin tierra o, si no hay otra cosa, tierra para macetas. Riégalos con abundante agua templada. Con un lápiz o unpalito haz un agujero, un poco más grande que el tallo del esqueje, en el substrato. El fondo del agujero deberíaquedar, como poco, a un centímetro del fondo de la maceta.Cuarto. Consigue hormonas de enraizamiento para esquejes de madera blanda. Las hormonas liquidas suelen pre-ferirse a los polvos. Prepara la mezcla de hormonas justo antes de usarla. Sumerge el tallo de cada esqueje entre 10y 20 segundos en la hormona liquida o rebózalo con las hormonas en polvo. Coloca los esquejes en los agujeros delas macetas. Compacta el sustra-to suavemente alrededor del tallo.Quinto. Riega con una solución suave de vitamina B1 hasta que la superficie esté uniformemente húmeda. Riegacuando sea necesario.Sexto. Los esquejes enraízan bien con un fotoperiodo de 18 a 24 horas de luz de fluorescentes. Pon un fotoperiodode 12 horas si estás clonando para determinar el sexo.Séptimo. Coloca una cubierta sobre los esquejes para mantener la humedad cerca del 80%. Puedes fabricarla conbolsas de plástico, plástico para envolver o cristal. No olvides dejar un respiradero para que los esquejes tengan airefresco. Otra opción consiste en pulverizar los clones con agua tibia varias veces al día. Ambos métodos ayudan amantener la humedad, algo muy importante, ya que no hay raíces que absorban agua para la planta.Octavo. La cubierta de plástico debe mantener la temperatura entre 21 y 26° C.Noveno. Algunos esquejes se ven marchitos durante unos pocos días y las hojas se pueden pudrir si tocan la tierrahúmeda. Quita las hojas podridas. Los clones deberían tener buen aspecto al final de la semana.Décimo. Los esquejes tardan en enraizar de una a cuatro semanas. Las puntas de las hojas se ponen amarillas yaparecen raíces por el fondo de los cubos de enraizamiento. Los esquejes comienzan a crecer verticalmente. Parasaber si han enraizado los esquejes que estén en bandejas, saca uno con cuidado y compruébalo.Trasplantando pequeñas plántulasLos cultivadores que trasplantan pequeñas plantitas encuentran que el índice de supervivencia es mayor que cuando
se trasplantan plantas grandes. La movilidad y la seguridad son muy importantes cuando se transportan plántulas.La clave para el éxito reside en plantar en contenedores fáciles de transportar con un espacio amplio y profundopara las raíces y aclimatar las plantas al nuevo ambiente antes de trasplantarlas.TrasplantePara mantener un ritmo rápido de crecimiento hay que trasplantar las plantas a un contenedor mayor en cuanto seles queda pequeño el que tienen. Si las raíces no pueden crecer, la planta se atrofia. Algunos de los síntomas soncrecimiento lento y enfermizo y plantas larguiruchas. Trasplanta al mismo tipo de tierra. Vansterdan planta lassemillas y los esquejes en macetas de turba o cubos de enraizamiento, ya que son muy fáciles de trasplantar.«Los cubos de enraizamiento más pequeños son más fáciles de trasplantar y se mezclan mejor con la tierra. Alprincipio usaba cubos de rockwool (lana de roca) de 7 y 10 centímetros pero se mantenían demasiado húmedos ylas raíces penetraban con lentitud en la tierra. Los cubos más pequeños se secan más rápido y las raíces penetranantes en la tierra», cuenta Vansterdan.El trasplante es una operación traumática. Los minúsculos pelos de las raíces son super delicados, y la luz, el aire ounas manos torpes los dañan con facilidad. Las raíces crecen en la oscuridad, en un ambiente fijo y seguro, perocuando no están en contacto con la tierra se secan y mueren deprisa. Se cuidadoso.Cuando trasplantes procura tocar las raíces lo menos posible. La vitamina B1 ayuda a las plantas a recuperarse delshock del trasplante. Las plantas necesitan tiempo para asentarse y restablecer el flujo de líquidos desde las raíceshacia toda la planta. Necesitan poco nitrógeno y potasio y grandes cantidades de fósforo. Cuando la vitamina B1 seusa correctamente y las raíces se tratan con cuidado, el trasplante no supone ningún problema nishock para la planta.«Yo suelo trasplantar por la tarde para que las plantas tengan toda la noche para recuperarse. Después de trasplan-tar, riego con mucha agua para que la tierra se asiente alrededor de las raíces y las mantenga húmedas. Durante unpar de días los clones reciben luz menos intensa, lo que facilita la recuperación», explica Vansterdan.Las plantas sanas sufren menos con el trasplante. Pese a todo, trasplantar una planta enfermiza con las raícesaprisionadas por un tiesto pequeño a un contenedor mayor podría salvarla.Trasplantar paso a pasoEste ejemplo muestra como Vansterdan trasplanta una planta de un mes germinada en un cubo de enraizamiento al jardín exterior.Primero. Fortalece y aclimata las plantitas dejándolas en el exterior durante unas horas cada día. Durante la noche,las mete en casa. Cada día pasan más horas fuera. En una semana están aclimatadas.Segundo. Riega las plantas con vitamina B1, a mitad de concentración de lo que diga la etiqueta uno o dos díasantes de trasplantarlas.Tercero. Prepara el agujero de plantación (ver capítulo 111).Cuarto: Riega la tierra hasta que esté saturada.Quinto. Con cuidado, coge la planta junto con el cubo de enraizamiento. Si está en tierra, procura que las raíces semantengan en un bloque.Sexto. Planta el cubo de enraizamiento en el agujero de plantación. Asegúrate de que todas las raíces estén crecien-do hacia abajo.Séptimo. Rellena el agujero alrededor de las raíces. Con delicadeza, afirma la tierra en contacto con las raíces.Octavo. Riega con vitamina B1 a mitad de concentración de lo que diga la etiqueta, hasta que la tierra esté comple-tamente saturada, pero no encharcada.Noveno. Durante un par de días, para disminuir la cantidad de luz que reciben, sitúa las plantas bajo una pantalla oen la sombra. Pasados tres o cuatro días sácalas al sol poco a poco.Décimo. La tierra orgánica fértil aportará los nutrientes necesarios para un mes o más de crecimiento antes de quesea necesario fertilizar.Crecimiento de la plantaciónEl tiempo es más cálido al final de la primavera, y el invernadero ya no necesita ser caldeado. Vansterdan saca lasplantas y el suelo de poliestireno del invernadero. Una vez vacío, quita el invernadero, labra la fértil tierra orgánicade debajo y la deja lista para plantar. A continuación trasplanta la última cosecha de esquejes en la tierra orgánicaque preparó con acondicionadores de la tierra (ver Apéndice) el otoño anterior. Pone el invernadero sobre los
clones, apoyado en bloques de quince centí-metros. La rendija que queda sirve de venti-lación. En los días cálidos, Vansterdan abreel techo del invernadero para que el aire en-tre por el suelo y salga por el techo.En unos días, los esquejes se han asentadoen el fértil suelo y comienzan a crecer. Enun mes los clones llegan hasta los 45 centí-metros. Entonces comienza a abonarfoliarmente, con un fertilizante de floración,cada tres o cuatro días. También cube cadadía el invernadero con una manta oscura paraque sólo reciban doce horas de luz y docede oscuridad y comiencen a florecer.«Cuando hace calor y estoy floreciendo unacosecha en el invernadero la ventilación esel principal problema. Lo mantengo tapadodurante las mañanas que son más frescas.Quito la cubierta a media mañana. Manten-go el techo abierto para que tenga abun-dante ventilación», me explica Vansterdanmientras consulta en el periódico la hora delamanecer y de la puesta de sol, «hay luz des-de media hora antes de amanecer hasta me-dia hora después de que se ponga el sol».Los esquejes del jardín crecieron tanto quehubo que doblarlos y podarlos para que nodieran sombra a las hortalizas. Vansterdanno les presta especial atención aparte de regarlas. A mediados de agosto mezcla guano de murciélago con la tierrapara que tengan flores más grandes.Los esquejes de la montaña no reciben ningún cuidado.CosechaEl pequeño invernadero fue lo más fácil de cosechar. Los esquejes estaban maduros entre ocho y nueve semanasdespués de co-menzar la floración. Vansterdan cortó las plantas por la base, quitó las hojas más grandes y las colgóde una cuerda en la habitación de secado (ver capítulo IV para más información).Vansterdan cosechó los cogollos de las plantas del jardín de uno en uno. Los cogollos que reciben más luz maduranantes que los que están en sombra. Mientras la planta estaba viva, había quitado las hojas más grandes alrededor delcogollo con el peciolo incluido. A continuación cortó las ramas cargadas de cogollos de una en una y las fuecolocando en una caja de cartón. Cuando la caja estuvo llena llevó los cogollos a la sala de secado.Las plantas de los jardines de las montañas maduran en momentos diferentes, por lo que fueron necesarios tresviajes distintos para cosechar. Cosechó las plantas completas cortándolas por la base sin quitarles ninguna hoja.Luego cortó las ramas en trozos de 60 a 90 centímetros para que cupiesen en su mochila. Separó los troncosgruesos y los cortó en trozos pequeños que repartió por la zona para que se descompusieran.«Tuve suerte este año, la lluvia llegó tarde y no hubo problemas de mildíu o moho en los cogollos. Creo que locelebraré con una fumada, tengo toda una selección», cuenta mirando sus 40 kilos de marihuana secándose (verCosecha en capítulo IV).

CAPITULO 3,CLIMA COSTERO CALIDO Y ARIDO:


Costa del Mediterráneo.IntroducciónConchita vive en España, cerca del mar Mediterráneo, donde el clima es cáli-do y suave la mayor parte del año. El sol brilla con fuerza muchos de esos díasy cuece la tierra arcillosa y pedregosa. Esta tierra drena mal y a las raíces lescuesta penetrar en ella.Como hicieron antes su madre y su abuela, Conchita cultiva cannabis. Hacedos años Conchita formó equipo con otro cultivador, Felipe, que abandonólas represivas leyes estadounidenses sobre cannabis y se instaló en España. El clima español es muy similar al deCalifornia, donde Felipe cultivó marihuana durante más de veinte años. Felipe ha trasladado sus conocimientossobre cultivo a las condiciones ibéricas y, junto con Conchita, recoge excelentes cosechas.Conchita y Felipe tienen tres jardines separados entre sí. Uno en su casa, al lado del mar Mediterráneo, otro a unoskilómetros hacia el interior de la regióny el tercero en las montañas.El jardín de sucasa está repartido entrela azotea de su edificio y un balcón muysoleado. El jardín del interior, alejadode la costa, está plantado en el patio deun viejo granero abandonado en la gran- ja de los abuelos de Conchita. El jardínde la montaña está a un día de viaje ynecesita pocos cuidados. También tie-nen un pequeño cultivo de interior ilu-minado con una lámpara de alta presiónde sodio (HPS) y dos tubosfluorescentes.Selección del lugar«Aparte de semillas cojonudas, un jar-dín necesita buena tierra, suministro deagua, al menos seis horas de sol directoy debe ser seguro», dice Felipe con laseguridad de un experimentado cultiva-dor de guerrilla americano.«California era genial; podías esconder15 a 25 metros para plantar en plata-formas colocadas en la copa y evitar serdetectados. La paranoia se vuelve tanespesa durante la época de la cosechaque puedes cortarla y liarla en un canu-to. Yo he estado paranoico con los agen-tes de la DEA, que van fuertemente armados, con la policía y con los ladrones de marihuana. Por eso me largué, yano aguantaba más. Aquí puedo cosechar mis plantas y no ser perseguido», cuenta Felipe con emoción.Felipe peregrinó por varias compañías de semillas de Amsterdam y compró paquetes de semillas de Neville’s Haze,
Super Silver Haze, El Niño, White Rhino, White Widow, Great White Shark, Jack Herer, Jack Flash y Shiva Shanti.La larga temporada de cultivo es perfecta para las variedades Haze, mayoritariamente sativas; las otras semillascrecen bien en exterior.Las leyes de Estados Unidos permiten el embargo de todos los bienes que provengan de o se hayan usado paracometer el «crimen» de cultivar cannabis. Los cultivadores que plantan marihuana en su propiedad a menudopierden sus tierras y bienes si les arrestan. Las autoridades embargan cualquier bien que puedan vender. Los ingre-sos producto de estas ventas a menudo van directamente al departamento de policía que ha efectuado la detención.Si el cultivador tiene niños viviendo en casa, el Estado se los quita, normalmente en el momento del arresto. Loscultivadores que viven en países con legislaciones represivas a menudo cultivan en suelo público o en cualquierpropiedad salvo en la suya. Si el propietario del terreno sabe que se está cultivando marihuana, también puedeperderlo y ser perseguido junto con el cultivador.España y Portugal ocupan la península Ibérica, situada en Europa Occidental, donde el sol brilla prácticamente todoel año. Es el paraíso del cultivador. Las costas sur y este disfrutan de la influencia templada del Mediterráneo.Algunos pequeños microclimas del interior mantienen temperaturas lo suficientemente cálidas como para cultivarmarihuana entre 6 y 12 meses al año. La costa norte recibe la influencia fría del océano Atlántico; llueve más y lastemperaturas son más bajas. El paisaje, de un verde exuberante, es similar al del norte europeo, el noroeste ameri-cano, el suroeste canadiense o Tasmania. España tiene casi tantos climas de cultivo diferentes como América delNorte.Elegir el lugar fue fácil para Conchita y Felipe. Su jardín de balcón está en el quinto piso y es difícil verlo desde lacalle. Durante siete u ocho meses al año, el balcón recibe entre cinco y seis horas de sol directo cada día. La azoteaes segura y soleada todo el día. Los tíos de Conchita tienen una granja a unos 40 kilómetros de la costa. La tierra esarcillosa y compacta, con un pH alrededor de 8. La mayoría de los 10 metros cuadrados de jardín reciben sol direc-to todo el día. La puerta del patio está cerrada y hay paredes altas en los cuatro lados que ocultan el interior; no seve desde fuera. Los tíos de Conchita viven en la granja, pero no usan la zona del viejo granero. Están encantados deque Conchita y Felipe lo utilicen para cultivar marihuana. El lugar para el jardín de la montaña (850 metros dealtitud, en terreno público) lo encontró Felipe la primavera pasada mientras buscaba setas. Tiene sol abundantedurante los siete meses de desarrollo de la planta. La tierra es rocosa, llena de minerales y poco más.Felipe se trajoThe Western Garden Book (Sunset Publishing Co. Menlo Park, CA USA) cuando vino de América.Este libro cuenta con abundante información acerca de los distintos microclimas del oeste de América del Norte.Impulsada por la generación delbaby boom,la jardinería ha experimentado un renacimiento en Estados Unidos, ycon él han surgido nuevos libros de jardinería regional y catálogos de venta de hortalizas, hierbas y flores. Estaspublicaciones están llenas de información sobre cómo cultivar en un microclima concreto. Los cultivadores deguerrilla más avispados aplican la información que encuentran en estos libros y catálogos para cultivar marihuanaen sus microclimas (para más detalles, ver Apéndice).Es conveniente hacerse amigo de jardineros o de los empleados del centro de jardinería local para aprender cómoy cuándo cultivan los tomates y otras hortalizas para conseguir la mejor cosecha. Hay que leer la sección de jardinería de los periódicos y revistas locales. Los periódicos locales suelen advertir cuando llegan plagas de hon-gos o insectos. Conocer los problemas antes de que se presenten ayuda a reconocerlos.Polen de cáñamo a la deriva o machos mal situadosEl polen del cáñamo industrial o de machos canallas puede viajar a la deriva desde unos metros a cientos dekilómetros hasta que se deposita y poliniza las hembras en floración. En las ciudades, el polen a la deriva causamuchos problemas a los cultivadores que plantan en el balcón, la azotea o el jardín trasero. Algunos vecinosincompetentes suelen equivocarse al distinguir los machos, o bien no los arrancan. Una ligera brisa en un día secoy caluroso de verano puede llevar el polen a través de la ciudad y fastidiar una cosecha sinsemilla. Dependiendo dela cantidad de polen, los cogollos pueden quedar total o parcialmente polinizados.Tanto los cultivadores urbanos como los rurales se enfrentan al riesgo del polen a la deriva proveniente de camposde cáñamo industrial. Una cosecha puede ser fertilizada sin que lo sepamos. El cáñamo industrial para fibra secultiva legalmente en Europa oriental y occidental, Canadá, Australia y muchos otros países. A través de agriculto-res locales o del Ministerio de Agricultura los cultivadores se enteran de cuándo se plantan las cosechas de cáñamo.Estudiando el viento local y la climatología, pueden predecir a dónde irá el polen. La humedad y la lluvia son lospeores enemigos del polen a la deriva. El polen que se forma en las plantaciones de cannabis de baja calidad de
Marruecos a menudo vuela en dirección norte, hacia España. En días secos una buena parte del polen llega fértil ala Península. Cuanto más sube la humedad, más polen muere durante el viaje.Una vez polinizadas, las plantas hembras reconducen su energía hacia la producción de las semillas. La producciónde nuevas flores y resina se hace muy lenta. Si una planta con un contenido alto en THC es polinizada por cannabiscon poco THC o por cáñamo industrial, la descendencia tendrá muy buena pinta, olerá bien, pero no te colocará.Los cultivadores que tengan problema con el polen a la deriva pueden cultivar esquejes en interior y trasplantarlosfuera más tarde para que las hembras comiencen a florecer después de que el cáñamo industrial, que florece entremediados de agosto y septiembre, y los machos incontrolados ya hayan soltado todo o casi todo su polen. Además,plantan en zonas protegidas del viento, depresiones en laderas orientadas al sur, lugares donde rara vez sopla elviento.Si el problema es grave, los cultivadores suelen plantar una cosecha de primavera en invernadero y provocan lafloración con 12 horas de oscuridad. Otros cultivadores plantan en un invernadero con un extractor constante. Laentrada de aire se cubre con una toalla mojada. Una esquina de la toalla reposa en un recipiente con agua para quevaya absorbiendo humedad. El exterior del invernadero se riega para matar cualquier grano de polen.Un cultivador astuto llama a la oficina local de Medio Ambiente y pide el último análisis que haya de calidad de aire(incluyendo polen de cáñamo). Explica que es alérgico al polen de cáñamo y que necesita saber todo lo que sepansobre ello.SeguridadLa policía española no busca agresivamente ni jardines ni culti-vadores de marihuana. Los helicópteros de la policíano vuelan con sensores de infrarrojos y otros juguetes para espías de alta tecnolo-gía pensados para la guerra. Laseguridad es una cuestión de man-tener el jardín detrás de una pared, en un balcón protegido o en una zona ruralremota e inaccesible. Hay pocos cultivadores que tengan la mala suerte de que los vecinos llamen a la policía.Normalmente la policía arranca las plantas y se va.Los cultivadores toman sencillas medidas de seguridad como poner su casa o su piso a nombre de otra persona y noalardear (demasiado) del jardín. Los cultivadores americanos que viven bajo el yugo de la inquisición cannábica nopueden contar a nadie nada de su afición. Ni siquiera se puede confiar en los miembros de la familia. Los jardinerosse ven forzados a mentir a sus familias y a sus amigos sobre sus plantas preferidas. Muchos cultivadores llevan unadoble vida, con dos grupos de amigos, los que no lo saben y los pocos de confianza que sí lo saben. La forma másfácil de no levan-tar sospechas es, cada vez que surge el tema, estar de acuerdo con la línea dura antidrogas yreferirse a los cultivadores de marihuana como una carga para la sociedad. A menudo estos cultivadores pin-tan unaescena que borra toda sospecha sobre ellos.Preparación del jardín y plantaciónEl jardín de la granja Felipe llevó a cabo el test descrito en «¿Qué clase de tierra tie-nes?» (ver Apéndice). Losresultados mostraron que la tierra rocosa está compactada con arcilla que drena muy mal. Esta tierra es muy duracuando está seca. Los tests no mostraban el contenido mineral de la tierra. En España, la tierra, dependiendo dellugar, tiene altas concentraciones de sodio, calcio, hierro y magnesio, lo que afecta al pH y a la absorción denutrientes. El sodio causa los peores problemas. Nuestros jardineros decidieron que sería mejor hacer su propiatierra que intentar trabajar con la existente.Felipe y Conchita también leyeron los apartados del Apéndice sobre pH, agua, tierra, compost y fertilizantes antesde preparar los jardines. Años de experiencia le han enseñado a Felipe a preparar la tierra de los jardines al menosun mes antes de plantar. «Me gusta poner mucho compost y estiércol en la tierra. La tierra de aquí es casi todoarcilla, añadiendo materia orgánica se mejora el drenaje y la capacidad de retención de agua. No siempre puedoencontrar estiércol bien maduro que no queme las jóvenes plántulas recién trasplantadas. Mezclo compost conestiércol fresco y dejo que envejezca durante un mes o más para que se enfríe y no queme las plantas», explicaFelipe. Continúa, «Evito el estiércol con un alto contenido de sal. Los ganaderos dan sal (nitrato sódico) a las resespara que engorden más rápido. Esta sal aparece en la orina y el estiércol. Un poco de sal es adecuado, perodemasiada sal bloquea los nutrientes y atrofia las plantas».La tierra del patio del granero estaba muy compactada después de 25 años sin ser cultivada. Le faltaban nutrientes.Conchita es amiga de un vecino llamado Gregorio que tiene una vaquería. Gregorio limpia los establos periódica-mente. Durante años ha estado apilando la mezcla de paja y estiércol que saca de los establos. Gregorio les dio
cinco cargas de 2 metros cúbicos (10 me-tros cúbicos en total) de este compost bienenvejecido.Tenían dos opciones para preparar la tie-rra: cavar hoyos individuales para cadaplanta, o bien arar ligeramente la superfi-cie, añadir compost y estiércol, y hacer ca-mas elevadas. Decidieron cavar agujeros deplantación para cada planta y llenarlos deuna mezcla de tierra rica en compost y es-tiércol.Una excelente manera de mejorar rápida-mente la tierra pobre es cavar un hoyo gran-de y profundo y llenarlo de buena tierra.Cuanto más grande sea el agujero, mejor.La explicación es bien sencilla: las raícespenetran más profundamente en la tierra enbusca de agua y nutrientes. Cuando la tie-rra es perfecta y tiene alrededor de 1 metrode profundidad, el agua se retienehomogéneamente; las raíces fuertes y pro-fundas dan lugar a plantas sanas y vigoro-sas, fáciles de mantener. Si el cultivador de-dica un tiempo extra al comienzo, su esfuer-zo se verá ampliamente recompensado; ten-drá pocos problemas y cosechará gordos co-gollos llenos de resina.«Usamos un martillo neumático para romper el sue-lo arcilloso. Un amigo fontanero nos prestó un mar-tillo neumático eléctrico y un generador portátil. Loconectamos y empezamos a romper la costra delsuelo. El martillo neumático nos ahorró horas de tra-bajo», me cuenta Felipe con una sonrisa satisfecha.Después de una fuerte lluvia, la dura tierra arcillosaestaba lista para trabajar. Felipe y Conchita cavaronlos agujeros de plantación con el martillo neumáti-co, picos y palas. Decidieron experimentar con eltamaño y la forma de los agujeros. Cavaron algunosde lxlxl metros y otros de 2 metros de diámetro y 20centímetros de pro-fundidad en el borde en descen-so hacia el fondo de 1 metro. Un fondo en descensosigue el contorno natural de las raíces y permite quepenetren fácilmente. Con el martillo neumático ablan-daron el fondo de los agujeros otros 30 centímetros,aunque sin sacar la tierra. Al lado de cada agujeroamontonaron la tierra, separando la fina capa de tie-rra superficial de la tierra profunda, más rocosa. Elsubsuelo arcilloso forma, al hacer los agujeros, uncontenedor bajo tierra para su mezcla de cultivo. Elagua penetra lentamente en la tierra arcillosa y per-manece dentro del agujero.Tras dos días de trabajar con el martillo neumático,
los picos y las palas, Conchita y Felipe habían cavado 20 agujeros de aproximadamente 1 metro cúbico cada uno.Rellenaron los agujeros por capas. Primero una capa de 10 cen-tímetros de pequeñas rocas, luego una capa de 20centímetros de tierra y harina de huesos. Para acabar, rellenaron los agujeros con la mezcla de compost, estiércol,paja, fosfatos de roca y harina de algas marinas. Añadieron mezcla hasta formar un montón que se elevaba unos 30centímetros por encima del suelo; durante la temporada, la tierra se irá asentando (ver Fertilización orgánica enApéndice).A continuación, amontonaron la tierra más profunda que habían extraído de los agujeros para formar un alcorquealrededor de cada agujero que ayudase a recoger el agua de lluvia.«Pensé que Felipe estaba loco cuando dijo que teníamos que cavar esos agujeros. Estaba segura de que era unsadomasoquista e intentaba que yo lo fuera. Le odié. Pero me enseñó fotos de sus plantas de 2 kilos (de cogolloseco y manicurado) en California. De ahora en adelante, siempre plantaré en grandes hoyos», asegura Conchita.Una vez que los agujeros estuvieron preparados y abundantemente regados, era hora de sacar 70 esquejes de lasplantas madres que crecían en interior. Seis semanas después de sacar los esquejes, estarían listos para ser trasplan-tados al exterior (ver Esquejar o clonar en capítulo 11). Cavar 20 hoyos fue una tarea dura, así que plantar esquejesparecía lo más sensato. Si hubieran plantado semillas, algunas habrían sido machos y no tendrían plantas madres delas que sacar más clones.Para germinar semillas y cultivar esquejes, Felipe colgó con una cadena una lámpara de alta presión de sodio de 250vatios en un rincón de una habitación. Germinó las semillas en una bandeja baja con tierra comercial para macetas.La tierra tenía nutrientes suficientes para el primer mes de crecimiento. Cuando las semillas germinaron, las tras-plantó en contenedores de 3 litros llenos de tierra comercial. Colocó todas las macetas juntas y colgó la lámpara desodio 45 centímetros por encima. Con la ayuda de un extractor, mantuvo la temperatura de la habitación entre 18y 26° C. Felipe tuvo cuidado de mantener la tierra uniformemente húmeda, pero no empapada de agua. Las plantasmadres, los esquejes y las plántulas de semilla las riega sólo con agua destilada. El agua del grifo y el agua embote-llada tienen demasiados sólidos disueltos y provocan problemas de absorción de nutrientes.Felipe fertilizó solamente una vez, dos semanas antes de trasplantar, con abono líquido a mitad de concentración.Los esquejes estuvieron enraizando durante tres semanas bajo luz de fluorescente y crecieron durante otras tressemanas con la lámpara de 250 vatios de alta presión de sodio. Tanto los fluorecentes como la lámpara de sodioestuvieron encendidos las 24 horas del día. Este régimen de luz genera un poco más de crecimiento y les evita tenerque comprar un programador. Los esquejes de seis semanas eran fuertes, sanos y frondosos.Eliminaron los 10 esquejes más débiles y mantuvieron 60, en macetas de 10 centímetros. Cada día Conchita sacabalos esquejes al exterior para que recibieran unas pocas horas de sol directo y los devolvía al interior durante las fríasnoches (ver Fortaleciendo los esquejes y las plántulas y Trasplante en capítulo 11).La mayoría de los agricultores de este clima plantan tomates en abril. Los tomates y la marihuana compartenmuchas necesidades climáticas. El cultivador espabilado planta los esquejes y las plántulas cuando los agricultoreslocales más experimentados plantan las tomateras.Jardines de balcón y terrazaConchita y Felipe son unos enamorados del marisco y frecuentan el mercado local. Un día, mientras chupaba lacabeza de una gamba, Conchita tuvo una idea: «Podemos cultivar en las cajas de poliestireno en las que transportanel pescado. Son contenedores perfectos para terrazas y balcones muy cálidos.»Estos contenedores pesan poco y son bajos, miden 45 centímetros de lado y 30 centímetros de profundidad. Elpoliestireno blanco aísla las raíces del calor exterior. Mark, el pescadero, les dio 15 contenedores.Felipe perforó seis agujeros de 1 centímetro de diámetro en el fondo de cada contenedor y los lavó con agua y jabón. A continuación, forró el interior de los contenedores con varias hojas de papel de periódico antes de llenarloscon tierra de trasplantes que compraron en un centro de jardinería. El papel de periódico ayuda a mantener lahumedad y evita que la tierra salga por los agujeros de drenaje.«Los últimos años planté en el balcón con tiestos llenos de tierra del jardín. Esa tierra no aguantaba el aguahomogéneamente y los tiestos de plástico se calentaban mucho. En aquel momento no me di cuenta, pero las raícesse cocían en los tiestos calientes. Cambiando a tierra comercial y a macetas aislantes blancas, nuestra cosecha sedobló», cuenta Conchita con ojos brillantes. Continúa, «Me gusta el poliestireno blanco. Antes de conocer a Felipeno sabía cómo penetra el agua en la tierra. La tierra caliente se seca y deja una ranura alrededor del tiesto que seconvierte en una zona de raíces muertas. Intentar que crezcan raíces en una zona de raíces muertas es como intentar
cultivar helechos en el desierto del Sahara».La tierra de trasplantes de los centros de jardinería tiene mejor textura y es más fértilque casi cualquier tierra de jardín mezcladacon compost. El pH y la composición vie-nen en la etiqueta de la mayoría de las tie-rras que se venden en las tiendas. Quienescultivan en zonas con muchas lluvias mez-clan un puñado de caliza dolomita (en elpolvo más fino que haya) en cada macetapara mantener el pH estable y añadenmagnesio y calcio a la mezcla.Después de fortalecerse durante una sema-na, los 30 esquejes de seis semanas estabanlistos para salir al exterior. Trasplantarondos en cada uno de los 15 contenedores.El jardín de la montaña«Nos lleva seis horas de coche llegar al jar-dín de la montaña. Cada vez que vamos,viajamos dos días y trabajamos allí un día.Sólo vamos dos veces al año. Una, a prin-cipios de mayo, cuando paran las lluvias, y la otra a finales de septiembre, para cosechar. El jardín se cuida a sí mismo», cuenta Felipe con más aires de hombre de negocios de los que nunca le había visto.Antes de preparar la tierra, limpian el lugar de malas hierbas y matojos y cavan una pequeña terraza para cadaplanta, entre rocas, arbustos y árboles bajos. Cavaron 20 hoyos de unos 50 centímetros de lado y amontonaron. lasrocas alrededor del perímetro. Rellenaron los agujeros con una mezcla de turba, tierra, polímeros y capas defertilizante orgánico de acción lenta.Colocando un trozo de madera o de plás-tico en el fondo del agujero que corte eldiscurrir del agua, el drenaje es más lento.Para retener el agua también podían haberusado polímeros, grava, ver-miculita, etc.Plantaron dos esquejes hembras en cadaagujero y regaron con agua de lluvia saca-da con un sifón de los barriles que lleva-ban en el coche. Después de regar en abun-dancia, recogieron hojarasca de los alre-dedores y la extendieron como mulch(mantillo) alrededor de las plantas paraayudar a retener el agua e impedir el creci-miento de malas hierbas. AguaEl agua en España suele estar llena de sólidos disueltos, también llamados «impurezas minerales» o «sales iónicas»,que afectan al pH y a la disponibilidad de los nutrientes (ver Agua y pH en Apéndice). A menudo, el pH está fuerade los límites 5,8-7, lo que impide la absorción de los nutrientes. Las zonas desérticas del inte-rior y la costa mediterránea tienen un agua alcalina, con pH supe-rior a 7. Las zonas con altas precipitaciones bajola influencia del océano Atlántico son con frecuencia ácidas, con un pH por debajo de 7. Un exceso de sólidosdisueltos en el agua de riego provoca que algunos nutrientes no estén disponibles para que la planta los absorba. Elexceso de sales inhibe la germinación de las semillas, quema los tiernos pelos de las raíces, las puntas y los bordesdé las hojas y, en general, atrofia a las plantas. El agua tiene mucha sal hasta a 30 kilómetros de la costa. Cuando se
riega con agua salada (salobre), si el drenaje es insuficiente, las sales aumentan hasta alcanzar niveles tóxicos.Demasiado a menudo, los cultivadores pasan por alto que el agua está llena de sólidos disueltos.Felipe tiene un medidor de sólidos disueltos (DS) con el que analizar el agua en cada uno de sus tres jardines.Tanto el agua de la ciudad como la de la granja tienen más de 250 ppm (partes por millón) de sólidos disueltos.«Aluciné cuando vi que el medidor de sólidos disueltos indicaba 250 ppm. No tenía ni idea de que el agua estuvieratan cargada de sal. Pensé que el medidor estaba estropeado y analicé el agua variasveces; los resultados fueron los mismos. El medidor sólo refleja la cantidad total de sólidos disueltos. Sabía quepara resolver el problema el primer pasoera averiguar qué sales había en el agua»,cuenta Felipe con la mirada del hombreque acaba de ver al fantasma de la sal.Felipe sabía que esta agua dejaría el de-sarrollo de la planta en la mitad. Sí, en lamitad. Una planta que debería haber pe-sado 2 kilos, sólo pesará uno. Resolvereste problema podría doblar su produc-ciónsin aumentar el trabajo. Tenía que haber unasolución.
Felipe y Conchita hablaron del agua convarios agricultores locales e incluso conun señor del Ministerio de Agricultura.Aprendieron que el sodio causa grandesproblemas. Los cloruros y los sulfatostambién dan problemas, pero pueden la-varse de la tierra. El exceso de sodio enel agua bloquea la absorción de otrosnutrientes. La marihuana sólo puede usarde 5 a 10 ppm de sodio, pero hay más de50 ppm en el agua. Las raíces absorbenel sodio y no el potasio, aunque tambiénesté disponible. Las altas concentracio-nes de sodio en la tierra hacen que losnutrientes y la humedad salgan de las raí-ces en lugar de entrar en ellas.El sodio tiene un fuerte poder de perma-nencia y es caro de extraer. Hay diversasopciones. Una es un caro aparato deosmosis inversa que filtra entre 75 y 150litros de agua y cuesta entre 30.000 y75.000 pesetas; este aparato filtra el aguacon sales a través de una membrana quesólo deja pasar agua pura; los sólidos di-sueltos (sales fónicas) se extraen del agua.Otra, también cara, es la desionización:pasar el agua a través de dos resinas y cambiar lassales perjudiciales con hidroxilo e hidrógeno, queson inocuos. Otras dos opciones importantes sonla destilación y la electrodiálisis.La forma más fácil y barata para detectar los sóli-dos disueltos es mirar el residuo que deja el aguaal evaporarse. Este residuo aparece como una pe-queña película de polvo que queda tras la evapora-ción. Busca sales en la superficie de la tierra o al-rededor de los agujeros de los contenedores. Lasmacetas de barro a menudo tienen restos blanque-cinos de sales por fuera. Si los niveles de sales sonbajos, causan pocos problemas con la absorciónde nutrientes. Niveles altos, por encima de 200 ppm,provocan grandes problemas impidiendo la absor-ción de los alimentos. Los síntomas de estos pro-blemas pueden tardar semanas en aparecer clara-mente.Regla práctica: pon medio litro de agua en una sar-tén y deja que se evapore. Si queda una películablanca visible, hay demasiadas sales disueltas en elagua.El sodio del agua, muy soluble, se acumula conrapidez en la tierra. Los cultivadores que riegan
con agua rica en sodio ven como las plan-tas crecen con lentitud, dan hojas peque-ñas y alcanzan poca estatura. Al seguirregando se produce estrés a causa delsodio, ya que el líquido sale de las raícesy éstas se deshidratan. Cuanta más aguarica en sodio se les da, más secas que-dan. ¡Las plantas pierden la capacidadde absorber agua!¿Cuánto sodio es demasiado?Si hay más de 50 ppm, el cultivador deberealizar ajustes desde el principio. Lamayoría de las aguas de España tienenmás de 50 ppm de sodio.Usa sólo agua destilada o agua de llu-via para enraizar los esquejes, germi-nar las semillas y mantener las plantasmadres. Cuando las plantas tienen unoo dos meses, son más fuertes y puedenaguantar mayor exceso de sodio. Esnecesario lavar la tierra una vez al mes(ver más abajo).¿Qué se puede hacer con un agua cargada de sodio tan soluble? Una opción para aquellos que tengan entre 50 y 75ppm de sodio es lavar el exceso de sales enjuagando la tierra con 3 litros de agua por cada litro de tierra. Al lavarlatierra también se arrastra el exceso decloruros y sulfatos, lo que hace que sea unabuena opción para los cultivadores urbanos,que tienen mucha agua y plantas en mace-tas.«Después de trasplantar, riego abundante-mente con agua del grifo o del pozo, ambastienen mucho sodio. A continuación añadofosfato amónico al agua, con esto el sodiose hace soluble y se puede lavar de la tierra.El fosfato amónico también añade nitróge-no (amonio) y fósforo (fosfato) a la tierra.»Los cultivadores que tengan mucho sodioen el agua y poca cantidad de ésta, debenseguir el consejo de Felipe al pie de la letra.Los cultivadores disuelven una pequeña can-tidad de fosfato amónico en un barril de aguade riego antes de regar las plantas. Se puedediluir el agua cargada de sales mezclándolacon agua de lluvia.Para resumir, hay cuatro formas baratas demejorar la calidad del agua:1. Riega las plántulas, los esquejes y lasmadres con agua destilada o agua de lluvia.2. En jardines con macetas, lava la tierra con3 litros de agua por cada litro de tierra.
3. Mezcla un 50% de agua de lluvia con el agua del grifo para diluir las sales disueltas.4. Riega una vez con agua del grifo y después otra con agua del grifo a la que le hayas añadido sulfato amónico.FertilizantesEn España hay disponible una limitada gama de fertilizantes comerciales. Los centros de jardinería y los almacenesde productos agrícolas tienen unos pocos fertilizantes químicos en forma soluble, granular y de acción lenta. Losfertilizantes orgánicos vienen en forma de estiércol y otros elementos naturales (ver Fertilizantes en Apéndice).Como el agua, la tierra de España está llena de minerales. Sodio, calcio y magnesio causan, de nuevo, grandesproblemas. Las soluciones frente al exceso de sodio las encontramos en el apartado Agua (más arriba). El exceso decalcio mantiene el pH demasiado alto y bloquea la absorción de varios nutrientes; el hierro seguido del potasio sonlos más afectados. Para evitar este problema, asegúrate de que los fertilizantes contengan hierro quelatado (vertambién Hierro, Clorosis y pH en Apéndice). El exceso de magnesio provoca la rápida absorción de microelementos,pero no suele causar problemas.Tanto en el jardín de la granja como en el de las montañas, Felipe y Conchita añadieron fertilizantes orgánicos a latierra para que las plantas tuvieran los nutrientes necesarios para todo su desarrollo y no fuera necesario abonarposteriormente. Si hubiera algún problema como crecimiento lento, puntas de las hojas quemadas u hojas queamarillean consultarían el apartado Fertilizantes en el Apéndice, en busca de soluciones.Las plantas del balcón y las de la azotea reciben tres tipos de fertilizantes. Para germinar y mientras son plántulas,momentos en que la absorción de fósforo aumenta, reciben un fertilizante de floración, diluido en el doble de aguade lo que dice la etiqueta. Durante la etapa de crecimiento vegetativo cambian a una fórmula alta en nitrógeno y, afinales de agosto, cuando las plantas comienzan a florecer en respuesta a las noches más largas, a un fertilizante defloración. Todos los fertilizantes que utilizan contienen hierro quelatado.Muchos fabricantes de fertilizantes hidropónicos preparan abonos específicos para aguas muy mineralizadas. Nor-malmente requieren que los pedidos sean de un volumen mínimo y los abonos se presentan en líquido o en forma decristales solubles. El cultivador envía una muestra de agua a la compañía de fertilizantes para que la analicen y lehagan una mezcla de abonos específica para su agua. Estas mezclas de fertilizantes también funcionan bien en tie-rra y alivian los problemas de nutrientes antes de que aparezcan.Crecimiento de la plantaciónUna vez que se solucionaron los problemas de tierra, agua y fertilizante, crecer las plantas fue muy fácil.Conchita revisa las plantas del balcón y de la azotea a diario. Cuando la tierra de los contenedores está seca a 1centímetro de la superficie, riega hasta que el 10-20% del agua sale por los agujeros de drenaje. Durante los dosprimeros meses después del trasplante, las pequeñas plantas sólo necesitan un abonado. Cuando las plantas teníanunos dos meses y estaban creciendo bien, las comenzó a abonar cada cuatro o cinco riegos con un fertilizantelíquido a mitad de concentración. Las plantas índicas, mayoritariamente afganas, necesitan menos fertilizante quelas sativas, que aguantan más abono. Lavan la tierra, religiosamente, una vez al mes (ver Podar y doblar en capítuloIV).La marihuana deja de crecer a temperaturas superiores a 28° C y el jardín de la azotea alcanza de sobra este calor.Felipe construyó una estructura para sombrear las plantas de la azotea y protegerlas del sol abrasador. El techo y lasdos paredes más grandes de la estructura están cubiertas con una malla de tela densa y de poco peso especial parareducir la intensidad de luz. Alrededor del 50% de la luz solar atraviesa la malla y permite un rápido crecimiento.Felipe dejó los dos extremos de la estructura abiertos para que la brisa refrescase las plantas. También coloca toallasbajo las macetas y las moja durante el día. La humedad se evapora y refresca el invernadero de sombra. En los díasde más calor colocan un ventilador en un extremo de la estructura.Como muchos cultivadores inteligentes, Conchita y Felipe llenan bidones con agua corriente y los colocan sobreladrillos, a 1 metro del suelo. Disuelven fosfato amónico en los bidones para que el sodio se deposite (precipite) enel fondo y riegan extrayendo el agua por arriba con un sifón. Cuando el bidón está vacío, limpian el sedimento.Después de cada riego, llenan los bidones de nuevo para que el cloro del agua se evapore. Mantienen también unbidón bajo el canalón del tejado para recoger el agua de lluvia. Mezclan el agua de lluvia con el agua de los otrosbidones para diluir los sóli-dos disueltos antes de regar.Cada sábado, visitan a los abuelos de Conchita y el jardín de la granja. Felipe pasa el rato con el abuelo de Conchita,fuma porros, cuenta historias y riega el jardín. Para compensar el agua salobre, Felipe esparce un poco de fosfato
amónico soluble alrededor de las plantas antes de regar. Riega cada planta durante dos minutos, hasta que el aguase acumula en el alcorque y disuelve todo el fosfato amónico. Cuando la última planta ha sido regada, comienza denuevo. Al regar en abundancia, el fosfato amónico se filtra a través de la tierra y desprende el sodio.«Antes, cuando cavaba pequeños agujeros en el jardín de atrás, tenía que regar cada uno o dos días. Si la tierra sesecaba, las raíces se secaban y morían. Felipe me enseñó a hacer hoyos grandes y llenarlos con buena tierra, quemantienen el agua y drenan bien. A las plantas les gustan y a mí también», cuenta Conchita con cara de fumada.Las plantas de la montaña dependen de la lluvia y de la humedad que se condensa naturalmente en el mulch. Lalluvia aquí es esporádica. La cosecha depende de cuánta lluvia haya caído. Un buen año es el que cosechan de 30 a50 gramos por planta. Los años de poca lluvia, cosechan de 10 a 30 gramos de cogollos secos por cada hembra.Plagas y enfermedadesA lo largo del mar y del océano, en las viejas ciudades y pueblos pesqueros, el aire húmedo del mar cubre las tierrasbajas y se con-densa en los edificios de piedra o ladrillo. Los hongos y los insectos proliferan en estos microclimashúmedos. En las montañas hay vientos que agitan las plantas y las secan. Las hojas, para protegerse de la deshidra-tación, transpiran humedad provocando con ello que las raíces absorban más agua. Este estrés convierte a las plan-tas más débiles en un blanco fácil para los insectos y las enfermedades. La temperatura rara vez baja de los 0° C ylas poblaciones de insectos no ven su ciclo vital interrumpido.Conchita y Felipe inspeccionan las plantas cada semana en busca de daños causados por hongos o insectos: Tam-bién preguntan a otros cultivadores y agricultores de la zona para saber si ellos están teniendo problemas. Cuandoinspeccionan en busca de insectos y ácaros, buscan en la cara superior e inferior de las hojas puntitos causados porarañas y daños de insectos masticadores o de babosas. Si ven algún insecto o encuentran zonas dañadas, identificanla plaga y esperan una semana, para versi la situación empeora, antes de pasar ala acción (ver Plagas y enfermedades enApéndice).Para controlar a los insectos, Conchitautiliza varios viejos remedios familiares.Elimina a mano tantas orugas y babosascomo encuentra. Si el daño persiste, usaun spray hecho en casa (ver Apéndice).Los ácaros son habitualmente la peor delas plagas chupadoras. Las orugas cau-san los más graves problemas entre losinsectos masticadores. Felipe y Conchitasiguen las medidas de control del Apén-dice.El mildíu aparece si las condiciones sonpropicias. El moho gris o botritis ataca alos cogollos durante los días húmedos ycálidos del otoño. Consultar el Apéndicepara las descripciones de las enfermeda-des y las medidas de control.Cosecha de primavera«El año que viene cultivaré una cosechade primavera, como hace Josete en elsur», cuenta Felipe con excitación. «Estan fácil que no puedo esperar a probar-lo. Planta esquejes en interior a primerosde diciembre. El 15 de febrero, Josete saca los esquejes a un pequeño invernadero que ha aislado colocandopoliestireno alrededor del perímetro para mantenerlo más caliente. Los esquejes crecen en él durante cuatro sema-
nas hasta que el tiempo es algo más cálido. En el norte, donde vivimos, tendríamos que meter los esquejes en casadurante la noche para protegerlos del frío. Josete trasplanta los esquejes a macetas de 6 litros llenas de tierracomercial de trasplantes y los mantiene en el balcón. Los días son cortos (de 10 a 11 horas) y los esquejes comien-zan a florecer. <¡A mediados de abril está cosechando cogollos maduros!»En el equinoccio de primavera (21 de marzo), los días tienen exactamente la misma duración que las noches. Desdeese día en adelante, en el hemisferio norte, los días se van alargando y las noches se acortan. Las plantas queempiezan a florecer a principios de marzo, pueden ser cosechadas entre mediados y finales de abril. Si para lasegunda semana de abril aún no muestran signos de acabar la floración, los cultivadores las cubren con bolsas deplástico oscuro o cajas opacas. Los niveles de luz primaverales son más bajos y los cogollos resultan más pequeños.Las plantas de una cosecha de primavera deben tener entre 30 y 60 centímetros cuando se saquen al exterior. Si lasplantas son demasiado pequeñas, menos de 30 centímetros, la cosecha será muy, muy pequeña.Hay un aparato automático para oscurecer las plantas que se puede usar en verano. Consiste en un contenedorgrande, con ruedas, que tiene dos rieles en forma de arco, por los que se desliza, cada doce horas, una cortina negraque cubre las plantas.Segundas cosechasLos cultivadores cosechan en primavera y dejan en las plantas alrededor de un 20% del follaje más bajo para podercosechar de nuevo en otoño. Cortan las ramas/cogollos de las plantas, dejando las ramas más bajas con algunoscogollos y hojas. Conforme los días se van alargando, las plantas desarrollan de nuevo crecimiento vegetativo ycontinúan creciendo a lo largo del verano. Cuando, en otoño, los días vuelven a acortarse y las noches se alargan,las plantas florecen por segunda vez.En climas donde no hiele, los cultivadores pueden cosechar las plantas a finales de otoño y dejarlas invernar en elexterior o en un invernadero. Si las plantas sufren mucho estrés por las temperaturas o la humedad, pueden morir.Deben recibir luz suplementaria por la noche para que retomen el crecimiento vegetativo y no florezcan.Para lograr los mejores resultados, instala una luz de alta presión de sodio para que, entre el sodio y el sol, recibanun total de 18 horas de luz cada 24 horas. La luz extra hace que las plantas hembras, que ya han florecido, vuelvanal crecimiento vegetativo. Mantén la cosecha rejuvenecida con 18 horas de luz hasta primeros de marzo, cuandopueden florecer bajo la luz natural. Las plantas revegetadas estarán listas a mediados o finales de abril.Fertiliza las hembras parcialmente cosechadas con un abono alto en nitrógeno para estimular el crecimiento verdedel follaje. Ayudará a las ramas a volver al crecimiento vegetativo en 6 u 8 semanas.Cosecha perpetuaEs posible lograr una cosecha perpetua o constante enexterior si se combina con un jardín de interior para ma-dres y esquejes. Sencillamente, mantén un grupo de es-quejes creciendo en la habitación de las madres. Confor-me los necesites, sácalos al exterior a un invernadero.Cubre el invernadero para que sólo reciban 12 horas deluz al día y florecerán en 7-12 semanas, dependiendo dela variedad.Cosecha«La parte más dura de cosechar es esperar hasta que lasplantas estén listas. Incluso después de llevar más de vein-te años cultivando, es duro esperar hasta que los cogo-llos están completamente maduros para recogerlos», diceFelipe jugando con una afilada podadora. « Por eso sa-crifico una o dos plantas en una cosecha temprana. Deeste modo, tengo hierba antes y no recojo toda la cose-cha demasiado pronto.» (Ver Cosecha en capítulo IV.)
Capítulo IVClima continental.Europa continental.Mediooeste de Estados Unidos. Interior de la península Ibérica.IntroducciónEl Gran Steve es un motero que creció en el corazón del cinturón del maízamericano. Dejó la granja y, a mediados de los ochenta, se trasladó a la ciu-dad, donde trabaja como soldador. Durante los fines de semana, arranca suHarley Knucklehead y se larga a su cabaña en las montañas.Cada año cultiva plantas a partir de semillas bajo una lámpara de halogenurosmetálicos de 400 vatios. En un par de meses, las semillas dan lugar a plantasfuertes. Entonces se las lleva al campo en busca de un nuevo hogar. El secretodel éxito del Gran Steve es su habilidad para encontrar lugares discretos y escondidos y para mantener una cosechaen marcha hasta el momento de recogerla. Al jardín de la montaña se llega por un sendero tras una caminata de unostreinta minutos.Es posible que Steve no recoja una cosecha de la mejor calidad cada año, ya que utiliza semillas de plantas quecruza al azar (ver Crianza: cruzando plantas, en capítulo V).Cultiva una pequeña cosecha de sinsemilla en un invernadero situado en el jardín de atrás de su casa. Compra floresartificiales de Hibiscus, gardenias y rosas con tallos de alambre en una tienda de artesanía cercana. El Gran Steve lascuelga de las plantas del invernadero. Además el invernadero está protegido por plástico translúcido.«Tengo cuidado en cómo engancho las flores. Hay que hacerlo bien, no quiero que parezcan irreales. Encontré unlibro en la biblioteca con fotos de todas las flores que uso. Lo utilizo como una guía para hacer que las floresparezcan reales», dice el Gran Steve con la convicción de un cultivador de orquídeas.El jardín de atrás se escapa de las manos. El tiempo es tan cálido y perfecto que las plantas crecieron como locas losaños anteriores. Este año escoge variedades más pequeñas de buen rendimiento.Selección del lugarEl Gran Steve es demasiado listo comopara plantar en su propio terreno. Alquilauna cabaña en el campo y siempre plantaen propiedad pública o en el terreno deotro. Cada año siembra en sitios nuevos.Le gusta cultivar en lugares de poco trán-sito, entre matorrales y pequeños árbo-les. Steve descubrió dos campos agríco-las que llevaban unos años sin usarse. Hacultivado buenas cosechas al lado de ríosy arroyos pero, en los últimos diez años,ha perdido dos cosechas por inundacio-nes y desbordamientos. Cuando plantabaal lado de un río se aseguraba de que lasplantas no fueran visibles desde el río.Algunos años Steve plantó en cubos, enterrero rocoso inaccesible. No necesitapreparar la tierra, simplemente trae bol-sas de cultivo y las llena de tierra por elcamino. Las plantas no se hacen tan gran-des, pero rara vez son vistas, porque cre-
cen donde nadie va o donde nadie esperaría encon-trarlas. Las plantas reciben mucho sol en las laderasrocosas de mala tierra. Un lugar con matorrales den-sos, como zarzas, es otra localización ideal. Las zar-zas crecen lo suficientemente altas como para que lagente no pueda ver a través de ellas y también impi-den el paso de la gente y de los animales más gran-des.«Uno de mis trucos favoritos es plantar donde hayamuchos mosquitos» -dice Steve, disimulando la son-risa-, «si puedo encontrar un lugar con avispas, tam-bién. Eso tiene el doble de mala leche. El mejor sitioque nunca he encontrado estaba cerca de la madri-guera de una mofeta. Cada vez que iba tenía que po-nerme Vicks Vapor Rub en la nariz para protegermedel olor. Nunca fue nadie por allí».«Planto en claros rodeados de densos matorrales deortigas, hiedra venenosa. Guardo semillas y las dis-perso. Simplemente me cubro con un traje para lalluvia y guantes para protegerme. Después lavo eltraje para eliminar las púas y los aceites que puedanhaber quedado enganchados. Es una buena forma demante-ner a los chorizos lejos de la huerta»-dice Stevecon una sonrisa-, «si un ladrón quiere robarme lasplantas, <¡le costará mucho!»Los senderos ideales son invisibles, muy soleados ytienen mucho crecimiento bajo. Los cultivado-res caminan por el lecho de ríos y arroyos paraevitar ser detectados. El rápido crecimiento dela vegetación borra entre viajes cualquier ras-tro que hayamos dejado. Algunos cultivadoresabonan el sendero ligeramente si pasan a me-nudo pero, cuidado, es muy fácil fertilizar enexceso a las plantas salvajes. Otros agriculto-res nunca van al jardín por el mismo camino ytoman muchas precauciones para evitar dañarla vegetación. A finales del verano y principiosdel otoño, la vegetación dañada ya no volveráa crecer. El Gran Steve siempre se ha pre-guntado: ¿Puedo ver el sendero que acabo dehacer?.Sino puedo verlo, ¡perfecto!; si puedoverlo, lo oculto. Cuanto más difícil sea para tillegar al jardín, más difícil será que nadie vaya.Los cultivadores previsores llevan todo lo quepueden necesitar -tubos de PVC, bombas deagua con motor de gasolina, bidones de agua,tierra, etc.- a comienzos de la primavera, antesde que la vegetación baja haya crecido, y lo es-conden hasta que les hace falta. Es aconsejablecubrir los bidones o depósitos de plástico lige-ro para protegerlos de la luz ultravioleta.
La tierra fértil y buena puede escasear en lasladeras remotas y, a menudo, la mejor está enlas zonas de pastos. Las hierbas reciclan losnutrientes de la tierra y forman una capa super-ficial de tierra fértil (ver Tierra, en Apéndice).«Compré bloques de fibra de coco. Son estu-pendos, compactos y fáciles de transportar.Cuando los rompo en trozos y les añado agua,se expanden hasta aumentar varias veces su ta-maño», me cuenta Steve, mostrándome comolas carga en la mochila.Una fuente de agua cercana hace que la vida deun cultivador sea más fácil y segura. Al trans-portar agua se daña la vegetación del sendero yse corre el riesgo de ser visto. Cuantos más via- jes se hagan, más fácil será ver el sendero. Bus-ca una fuente de agua que no se seque en vera-no. El consumo de agua viene determinado porel clima. Es posible hacer una cosecha en tie-rras secas si llueve una vez cada una a cuatrosemanas.La luz solar es menos importante, aunque esen-cial. Para lograr un crecimiento aceptable sonnecesarias cinco horas de sol directo. Cuantomás mejor. Los cultivadores que busquen lossitios durante el invierno deben imaginarse cómoserán las sombras que harán los árboles en pri-mavera y en verano teniendo en cuenta que elsol estará más alto.Las hembras en floración destacan como lucesde neón si el follaje de los alrededores se seca ymuere antes de la cosecha.Si puedes tener acceso exclusivo en barca a tu jardín, perfecto, evitarás muchos riesgos poten-ciales.SeguridadEn Estados Unidos cada año, la policía descu-bre cientos de miles de plantas de cannabis gra-cias a la vigilancia desde el aire y la fotografíainfrarroja. Las grandes plantaciones son más fá-ciles de descubrir que los jardines pequeños.Muchas comunidades de Estados Unidos reci-ben fondos federales para erradicar las cosechasde marihuana. Algunos departamentos de poli-cía venden las propiedades que confiscan y com-pran nuevos equipos de vigilancia de alta tec-nología, armas de fuego, vehículos y otros ju-guetes con los que buscar y destruir las plantasde marihuana y la vida de los cultivadores. Lasleyes sobre marihuana son extremadamente se-veras en muchos estados. Los miembros de lasfuerzas del orden mienten, engañan y roban para
lograr sus objetivos. No confíes en ellos bajoninguna circunstancia.Los programas como «Denuncia a un cultiva-dor de marihuana», con recompensa incluida,son habituales en Estados Unidos. Seis policíasde narcóticos, armados y peligrosos, vinieron aregistrar mi casa enviados por un soplón. Losde narcóticos no me decían quién o por qué mehabía denunciado, ni siquiera si el chivato exis-tía. Si alguien sabe o sospecha que estás culti-vando marihuana, tendrán un gran poder sobreti. Un enemigo vengativo puede acusarte sinpruebas, incluso aunque no cultives. Los culti-vadores suelen evitar a los novios y novias ce-losos, a los miembros de la familia y a los malosamigos. Uno de los casos más tristes que hevisto fue el de una hija que extorsionaba a supadre. El padre cultivaba marihuana para ali-viar el glaucoma que padecía. Su hija le amena-zó con hacerle arrestar si no vendía parte de lacosecha y le daba el dinero.Cuando escojas un lugar, recuerda que puedehaber así como buscadores de setas, de mari-huana o caminantes. Si la caza es popular en tuzona, consulta todas las normas y regulacio-nes. El jardín tendrá que estar escondido deotros visitantes del campo. También puede haber ciclistas o conductores de vehículos 4x4.Preparación del lugarAl preparar el jardín, la seguridad es la cuestión más importan-te. Los huertos bien escondidos se cosechan, lasplantas detectadas por extraños no.Prepara los lugares para cultivar con seis meses de antelación. Para obtener los mejores resultados deja que la tierraya acondicionada se asiente al menos durante un mes antes de plantar.Si el cultivo está en una pendiente, losagujeros de plantación se cavarán en terrazas para evitar el desnivel. Asegúrate de que la terraza sea lo suficiente-mente grande como para recoger todo el agua posible. Haz canales para recoger el agua y llevarla hasta la planta.Moldea con tierra un alcorque alrededor de la planta que retenga el agua de lluvia.Si la vegetación es muy densa, córtala para formar un pequeño claro donde unas 3-6 plantas reciban suficiente luzsolar. Cuando preparo la tierra, corto las raíces de las plantas que pueden competir con la marihuana y labro la tierraen agujeros de 60 a 90 centímetros de lado.La tierra a la orilla de un río es casi siempre fértil tierra de aluvión. Esconde el jardín tanto de los pescadores ycaminantes como del tráfico fluvial.En los bosques densos, hay más luz solar cerca de las copas de los árboles. Algunos cultivadores ingeniosos utilizanplataformas para cazar ciervos para cultivar en los árboles. Instalan un sistema de poleas para elevar un grancontenedor y tierra de trasplantes hasta la plataforma. También colocan una manguera de riego desde el suelo hastalas plantas. El cultivador va cada semana con agua y una bomba para elevar el agua hasta las plantas y regarlas.Es conveniente tener un socio que trabaje en el suelo mientras el otro lo hace en el árbol. Los jardineros precavidosusan una cuer-da de seguridad y un arnés. Tampoco están «colgados» más de cuatro horas cada día. Recuerda queun escalador cansado tiene accidentes con más facilidad.Crecimiento de la plantación«Levantaba pesas y comía bien, así es como llegue a ser el GranSteve. No hay grandes secretos, sino cosas básicas.Las plantas son lo mismo. Sólo les doy lo que quieren’, cuenta el Gran Steve. «Este zumo de naranja recién
exprimido te va a encantar. Toma.»Una vez que las plántulas se asientan en tierra fértil y rica con abundante sol, comienzan a producir crecimientovegetativo vigoroso. Producen tanto crecimiento verde y de follaje como la luz, el aire, los nutrientes y el agua lopermitan. Si se cuida correctamente, la marihuana crecerá entre 1 y 5 centímetros diarios. Si la planta está atrofiadatardará semanas en recuperarse. Para suministrar el agua y los nutrientes necesarios, las plantas necesitan un siste-ma radicular fuerte, que no esté restringido. Si dejamos que el crecimiento vegetativo continúe sin restricciones,prácticamente nos garantizamos una pesada cosecha. Cuanto más grande se hace una planta, más rápidamente seseca la tierra. Un sistema de raíces mayor es capaz de absorber más agua y nutrientes. Se crean fuertes ramaslaterales que pronto se llenarán de cogollos.«Para un cultivador de guerrilla, es duro y difícil estar siempre en el jardín para darles a las plantas lo que necesitan.Por eso es tan importante la preparación de la tierra y la plantación. Una vez que se han establecido, mis plantasaguantan mucho y siguen creciendo bien. Con suerte no sufrirán estrés, tendrán un buen año de abundante lluvia ypocas plagas, y yo recogeré una cosecha de muerte», dice el Gran Steve mientras me muestra uno de sus famosostomates. «Cultivo tomates en el jardín de atrás para mantenerme al tanto de lo que pasa en el cultivo de guerrilla. Silos insectos o el tiempo seco afectan a las tomateras, esto me avisa de que el cultivo de hierba probablementetambién estará sufriendo y tengo que pasar a la acción.»Podar y doblarDobla por seguridad: disimula las plantas del jardín convirtiéndolas en un seto.Doblar y podar cambia el patrón de crecimiento del cannabis, afectando a la forma de la planta, el flujo de líquidosy la concen-tración de hormonas. La poda afecta severamente a las plantas, mientras que doblar tiene efectos mássutiles. Cuando podamos una rama, nacen nuevas ramas de los nudos que hay justo por deba-jo del corte. Esto nosignifica que la planta vaya a crecer el doble. La amputación de una rama no hará que crezca más rápido o pro-duzca más hojas.Doblar es parecido a podar. Doblando una rama alteramos el flujo de las hormonas pero, al contrario que con lapoda, no las eliminamos. Es mucho menos perjudicial y perturbador para las plantas que la poda. Para doblar unarama, llévala hasta la posición deseada y átala. Se puede doblar mucho una rama antes de que se rompa o se pliegue.Si una rama se pliega, la colocaremos bien, la ataremos y se recuperará. Se doblan mejor las ramas jóvenes, blandas,que las viejas y rígidas. Al doblar las ramas y situarlas horizontalmente las impulsamos a crecer verticalmente, haciael sol. Los cogollos que reciben más luz se convierten en impresionantes colas.Ata las plantas con cables o cuerdas. Los cables plastificados funcionan muy bien. No ajustes mucho el cable, dejaque el tallo tenga espacio para respirar. Si se aprieta mucho, se corta el flujo de líquidos.Cuando dobles una rama, hazlo con cuidado, aunque el cannabis aguante mucho. A veces una rama se desgajará ose doblará, cortando el flujo de líquidos. Puedes arreglar con facilidad estos desperfectos entablillando la rama conun palito sujeto con alambre o cinta aislante.La poda hace que una planta crezca más frondosa. Las ramas bajas se desarrollan más rápidamente cuando se cortael brote ter-minal (central). Al podar el brote central se altera la concentración de hormonas inhibidoras del creci-miento. Estas hormonas (auxinas) impiden que las ramas laterales crezcan muy deprisa. Cuanto más lejos se en-cuentra una rama de las hormonas que hay en la punta de la planta, menos le afectan estas auxinas. Por este motivo,una planta de cannabis sin podar crecerá con forma de abeto.Usa siempre herramientas limpias para podar; esteriliza la podadora, las tijeras, etc., limpiándolas con alcohol.Existen tres métodos o técnicas básicas para podar la marihuana. Con el primer método se podan las ramas bajascuando las plantas tienen de 100 a 150 centímetros. Así se concentran las hormonas de floración y se logra que loscogollos de las puntas de las ramas sean más fuertes y gruesos.En el segundo método, se pinzan o podan las puntas de las plantas. Esto dispersa las hormonas de floración y lograque las plantas crezcan más frondosas. Podando una planta cuando tiene un mes y, de nuevo, cuando tienen dos otres meses, lograremos que sea más frondosa. La poda continua mantendrá la marihuana con aspecto de seto. Podaren exceso durante un tiempo puede alterar el equilibrio hormonal y provocar que la planta produzca crecimientoespigado y cogollos débiles. También puede retrasar la floración. Poda o pinza las puntas uno o dos meses antes deque la floración comience. Si se poda cuando los pistilos ya han aparecido, se retrasará la floración.El tercer método consiste en podar todas las ramas salvo unas pocas. Se corta el brote central por encima de cuatroramas que se dejan intactas. Esto concentra las hormonas de floración en las cuatro ramas principales. Cuando hay
menos ramas, éstas son más fuertes y pro-ducen cogollos más pesados. Las ramasse seleccionan cuando la planta tiene unosdos meses. Se escogen las cuatro prime-ras ramas que nacen y las más fuertes.Al quitar las hojas, estresamos a las plan-tas. El estrés inhibe o limita el crecimien-to. Sólo se deben eliminar las hojas queestén claramente muertas o infectadas porhongos o insectos. Quitar las hojas no espodar, sino acuchillar a una planta sana.Poda las ramas bajas que crecen espiga-das y débiles. Cuando podes, corta la ramacompleta. La poda de las ramas bajas tie-ne un efecto mínimo en la concentraciónde hormonas.«A veces, cuando se me acaba la hierbapara fumar, reviso las plantas y les podoalgunas ramas bajas para sacar unoscanutos», me cuenta Steve.Podar para fumarLa marihuana aumenta su potencia con-forme va madurando. Hay un notable in-cremento de potencia cuando las puntascomienzan a brotar pistilos con aspectode pelitos blancos. La máxima potenciallegará entre 8 y 16 semanas después. Loscultivadores más desesperados cosechanhierba antes de tiempo cortando puntas decrecimiento (más potentes) u hojas (me-nos potentes). Otros cultivadores cosechanramas o plantas completas. Al cortar laspuntas de crecimiento, se dispersan las hor-monas de floración que llegan hasta las ra-mas bajas. El corte de puntas también pro-voca que nuevos pares de ramas nazcanpor debajo del corte. El Gran Steve tienetanta hierba almacenada del año pasadoque no necesitará podar puntas.CosechaUna vez que una hoja grande está completamente formada, la concentración de THC en esa hoja ha alcanzado sumáximo. Las hojas verdes y sanas conservan la potencia.Cosecha las hojas si muestran signos de enfermedad o amarillean sin que el fertilizante lo evite. Una vez quecomienzan a amarillear y mueren, la potencia disminuye. Las hojas más grandes a menudo amarillean justo antes deque los cogollos estén maduros.La marihuana necesita agua a lo largo de toda su vida. Si se decide racionar el agua para estresar a las plantas, sólodebe hacerse en los últimos días.El tamaño de la planta tiene poco que ver con su madurez. En exterior, una planta puede alcanzar una altura de másde 3 metros y no estar lista para cosechar, o bien estar completamente madura con unos pocos centímetros dealtura.

Algunos cultivadores cosechan durante la noche para evitar ser descubiertos por otros montañistas. Es más fácil ycómodo transportar el cannabis recién cortado durante la noche. Los cultivadores más precavidos averiguan cuan-do cambia el turno de la policía y cosechan en ese momento. Si un vecino o un paseante llaman a la policía, lesllevará un rato llegar. Una navaja afilada ayudará a reducir la cantidad de material que hay que transportar. Hayquien elimina las hojas grandes un par de días antes de cosechar. Se puede transportar la cosecha en una mochila, loque reduce la posibilidad de ser detectado. Si cosechas diferentes variedades guarda cada una en una bolsa diferen-te.Diferentes variedadesEs mejor dejar las variedades no aclimatadas a nuestras latitudes, tales como la colombiana o la jamaicana, madurarhasta fin de octubre, o incluso mediados de noviembre si el tiempo lo permite.El tamaño y la edad de una planta tienen poco que ver con su madurez. La velocidad a que florece una plantadepende de la cantidad de horas de oscuridad que recibe cada 24 horas, no de la duración de tiempo necesaria paraque las flores maduren. Típicamente, el cannabis cambia del crecimiento vegetativo a la floración cuando la luzdiaria baja por debajo de las 12-14 horas. En general, una plántula necesita tener 60 días de edad antes de madurarcomo adulto. Los esquejes florecerán aunque tengan menos de 60 días.Las variedades sativas puras tardan más en madurar que las variedades índicas puras. Hay muchas variedadesdisponibles que son un cruce de índica y sativa. A veces se mezcla tambiénCannabis rudelaris.En el punto máximode floración los cogollos tienen el mayor olor y la mejor fragancia. Conforme envejecen, la fragancia pierde subouquet.Cuándo cosecharEl punto perfecto de madurez depende del desarrollo de los cogollos, del tiempo y de los hongos. Los ladrones y lapolicía también pueden influir en la decisión de cuándo cosechar. El tiempo puede forzar una cosecha temprana.Consulta las previsiones meteorológicas por si llega un frente frío que pueda traer heladas. Una helada suave (unao dos horas con temperaturas de 0° C o -1° C) o incluso temperaturas de 1 a 4° C pueden ralentizar el crecimientodurante unos días. Una helada fuerte acabará con una cosecha en una hora o menos. Las plantas que se han heladoparecen y saben, cuando se fuman, a espinacas cocidas. Vigila el clima frío y húmedo, ya que beneficia a los hongosy puede forzar una recogida temprana.Cosecha las plantas que crecen en campos de agricultores antes de que éstos recojan su cosecha. Averigua cuándose cosechó el año pasado y cuándo está previsto cosechar este año. Es conveniente plantar variedades que madurenpronto. Consigue una copia de la normativa local sobre caza e indaga entre los habitantes de la zona cuándo es latemporada. De este modo podrás evitar a los cazadores.Si hay una ligera helada temprana cuando los cogollos aún son pequeños, algunos cultivadores prefieren arriesgarsey dejar que se acaben de hacer antes que cosechar una pequeña cantidad de cogollos prematuros.Para garantizar el mínimo daño posible a los delicados cogollos, la cosecha debe ser trasladada inmediatamente a unlugar seguro donde secarla. Si dejamos el cannabis recién cosechado en un montón, húmedo, durante más de unaspocas horas, aumentan las probabilidades de que el moho2 aparezca.Cosecha de machosLas flores macho tardan, desde que aparecen, de dos a cuatro semanas en madurar sus vainas de polen. Vigila a lasque se abren antes de tiempo. Los machos continúan produciendo flores duran-te varias semanas después de que lasprimeras flores comiencen a esparcir polen. Una vez que las flores de los machos son claramen-te visibles pero aúnno se han abierto, se alcanza el pico de mayor producción de THC y el mejor momento para cosecharlos; aunque losmachos tienen mucho menos THC que las hembras, algo tie-nen. El proceso de degradación del THC se aceleraconforme las flores se desarrollan y caen.Para evitar la polinización, si hay hembras cerca, los cultivado-res cubren los machos con una bolsa de plástico enel momento de cosecharlos. Mantén los machos completamente aislados de las hembras llevándolos al menos a unkilómetro de distancia. En interior, bajo una luz, es aún mejor. La capacidad de producir polen fértil no cambia eninterior.Normalmente, se suele cosechar la mayor parte de las ramas y dejar sólo una o dos, suficientes para producir polen.2. Una vez que veas la más mímina cantidad de moho gris, cosecha inmediatamente. Corta y desecha cualquier trozo con moho. Fumar hierba contaminada con este moho puede ser muy perjudicial.
Una flor macho contiene suficiente polen para fecundar muchos óvulos de hembras. Unos pocos racimos de floresmacho producen el polen necesario para la mayoría de los proyectos de crianza.La cosecha de los machos puede alargarse cortando las flores con tijeras o con las uñas conforme van naciendo.Tras cosechar unas flores, saldrán otras nuevas. Las nuevas flores macho estarán maduras cuando las hembras seencuentren en plena floración. En esta lenta tarea es fácil que se te escapen unas pocas flores macho.Cosecha de sinsemillaLas flores sinsemilla maduran entre seis y más de doce semanas después del comienzo de la floración.El mejor momento para cosechar lasinsemilla es cuando la producción de THCha llegado a su máximo, pero aún no hacomenzado el proceso de degradación.Los cogollos más bajos, que reci ben me-nos luz, pueden madurar con mayor lenti-tud. Las variedades índica o índica/sativasuelen pasar de 5 a 10 semanas de rápidaformación de cogollos antes deestabilizarse. La cosecha se recoge entreuna y tres semanas después de que el cre-cimiento se ralentice. La cosecha de lamayoría de las variedades índicas comer-ciales suele estar lista toda a la vez en 8 o12 semanas.Las variedades sativa tienden a formarcogollos a un ritmo cons-tante durantetoda la floración, sin un descenso claro enel ritmo de crecimiento. Con estas varie-dades, los cogollos de la punta de la planta están maduros entre unos días y un par de semanas antes que loscogollos de las ramas bajas. Estas plantas se cosechan en variars veces. Las plantas de temporada larga, como lasthai, pueden florecer durante varios meses.Hay tres excelentes métodos de comprobar el grado de madurez: fumar, la ley del rendimiento decreciente y laobservación científica. Fumar es el más divertido. Recoge un cogollo, sécalo a 90° C de 10 a 15 minutos y fúmatelo.La hierba estará áspera y picará, pero se puede catar. Realiza este test cuando no estés colocado, hazlo varias vecesdurante la floración. Usando esta técnica es el globo o colocón el que decide cuándo hay que cosechar.El punto de rendimiento decreciente se alcanza cuando los pistilos de la parte baja del cogollo mueren (se ponenmarrones) más rápidamente de lo que crecen nuevas flores en la punta del cogollo. En este punto, la producción deTHC ha pasado su máximo y está de bajada. Éste es el mejor método para saber, a simple vista, si un cogollo estámaduro.El método más fácil y preciso de saber cuándo ha llegado la producción de THC a su máximo consiste en observarlas glándulas de resina con un microscopio barato (20-50 aumentos). Coge una pequeña y fina porción resinosa delcogollo y sitúala bajo el microscopio de 30 aumentos. Una linterna o una lámpara ayudarán a iluminar la muestradesde arriba para poder observar la resina sin sombras. Con los microscopios portátiles podemos ver las glándulasde resina sin cosechar el cogollo. Busca tres tipos de glándulas: los tricomas con cabeza (con forma de chupa-chups), que tienen la mayor concentración de THC, otras glándulas como las bulbosas y las que parecen pelos, quetienen mucho menos THC.Las prioridades dictan el tiempo de la cosecha. Una vez que los tricomas con cabeza tienen una cabeza, estánplenamente desarrollados y todavía son traslúcidos, es el momento para una cosecha temprana. Cuando las glándu-las se vuelven de color ámbar, significa que se están comenzando a descomponer y que el contenido de THCdisminuye. Las glándulas de resina no se desarrollan todas a la vez; en consecuencia, unas glándulas estarán traslúcidasmientras otras comienzan a descomponerse. El punto óptimo para cosechar es cuando hay más glándulas traslúcidasque de color ámbar. Observa las glándulas de resina durante varios días y mira diferentes cogollos de diferentes
plantas para estar seguro de que la máxima cantidad de tricomas con cabeza están maduros para la cosecha.Los cultivadores cuentan que el colocón es mucho más cerebral si los cogollos se recogen un poco pronto, cuandohay más glándulas de resina traslúcidas; si los cogollos se recogen cuando hay más glándulas de color ámbar elefecto es más físico y narcótico. La cosecha pesará algo más si los cogollos se recogen más maduros.

COSECHAR PASO A PASO:

Deja de abonar y lava la tierra de dos a cuatro semanas antes de cosechar para evitar el sabor a fertilizan-te.Segundo.Si las ramas o cogollos maduran a diferentes ritmos, coséchalos individualmente conforme vayan madu-rando.Tercero.Si la planta entera está madura, se recoge de una vez, cortándola cerca de la base. No es necesarioarrancarla con raíces. El THC se fabrica en el follaje no en las raíces. A un cultivador le detuvieron y procesaronsólo porque tenía tierra y raíces. Destruye todas las raíces para evitar problemas.Cuarto.Cosecha las plantas por la tarde, después de un largo día soleado produciendo resina.Quinto.Es muy cómodo secar la planta entera colgándola cabeza abajo. Cuando los tallos y ramas no se cortan, elsecado es mucho más lento. Las hojas grandes, al secarse, forman una cubierta protectora para los cogollos. Lasdelicadas glándulas de resina quedan así protegidas y no se rompen ni se pierden.Sexto.Método A. Corta cada rama en tro-zos de 15 a 60 centímetros y límpialos dehojas con tijeras. Cuelga las ramas en unahabitación oscura y bien ventilada, con tem-peraturas de 15 a 21° C, hasta que esténbien secas. Una vez secas, corta los cogo-llos de las ramas teniendo especial cuidadoen no toquetear los cogollos más de lo im-prescindible.Método B. Cosecha la planta completa cor-tándola por la base y, a continuación, cuél-gala cabeza abajo. Espera a que se sequeantes de cortar las hojas grandes o manicurarlos cogollos. Con este sistema se puede per-der algo de THC, ya que los cogollos sonmás sensibles y delicados una vez están se-cos. Usa este método en climas cálidos parahacer más lento el secado y suavizar el sa-bor.Séptimo.Algunos cultivadores cortan lashojas uno o dos días antes de cortar las plan-tas. Al cosechar las hojas grandes, pronto se acelera el proceso de secado_Octavo.Al manicurar las ramas después del secado, corta todas las hojas que no estén cubiertas con resina y separalos cogollos del tallo central.Noveno.Una vez manicurados y para conservar las glándulas de resina, almacena los cogollos en un contenedorrígido, como una jarra o bote de cristal.Décimo.Calcula que entre cosechar y manicurar necesitarás de 6 a 10 horas por cada medio quilo de hierba.
 
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