Te cuento, por lo que he leído, cuando se cosechan las ramas, se hace una manicura rápida de las hojas más grandes y se ponen a secar los cogollos. En una semana, aproximadamente, la marihuana ya está seca.
Para saber si está seca, se doblan las ramitas laterales y, si crujen al romperse, está a punto. Los cogollos deben tener un punto de humedad en su interior para poder pasar a curación, que es cuando se meten en botes de cristal opacos o cajas de madera, que se abren al principio una vez al día para ventilarlos. El ideal es tenerla al menos dos meses curando, aunque hay quien prepara grandes reservas con varios meses de curación. También se puede envasar al vacío la marihuana, una vez curada.
Otros dicen que son dos semanas de secado si no se ha manicurado previamente, pero esas dos semanas las establecen como periodo máximo de secado, por lo que se entiende que, si no se ha manicurado serán unos diez días de secado, y si ha habido previa manicura, la mitad de tiempo, aproximadamente. En ambos casos se puede hacer la prueba de quebrar la ramita lateral y escuchar el crujido seco.
Para saber si está seca, se doblan las ramitas laterales y, si crujen al romperse, está a punto. Los cogollos deben tener un punto de humedad en su interior para poder pasar a curación, que es cuando se meten en botes de cristal opacos o cajas de madera, que se abren al principio una vez al día para ventilarlos. El ideal es tenerla al menos dos meses curando, aunque hay quien prepara grandes reservas con varios meses de curación. También se puede envasar al vacío la marihuana, una vez curada.
Otros dicen que son dos semanas de secado si no se ha manicurado previamente, pero esas dos semanas las establecen como periodo máximo de secado, por lo que se entiende que, si no se ha manicurado serán unos diez días de secado, y si ha habido previa manicura, la mitad de tiempo, aproximadamente. En ambos casos se puede hacer la prueba de quebrar la ramita lateral y escuchar el crujido seco.