Aplicación de CO2 en cultivo interior ( FERTILIZACION CARBONICA )

panoramixx

Floración
7 Diciembre 2007
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Una buena forma de aumentar al máximo el rendimiento de los cultivos de interior es aplicar CO2 artificialmente. Hace millones de años había en el ambiente mucha más concentración de CO2 de la que hay actualmente. Hoy la concentración de CO2 que tenemos en ambiente esta aproximadamente entre las 300 y las 400 partes por millón (ppm) , pero no siempre ha sido así. Hace millones de años las concentraciones eran mucho mayores, del orden de las 2000ppm. y el crecimiento de las plantas en aquellas condiciones era exuberante.

Aunque ha pasado mucho tiempo, las plantas en general no han perdido la capacidad de asimilar altas concentraciones de CO2 . Por eso si aumentamos artificialmente la concentración de CO2 en cultivo interior, el desarrollo de las plantas se verá en aumento. En concepto de producción se puede obtener un aumento en la cosecha de hasta un 25%.

Existen varios métodos para aumentar el nivel de CO2 en cultivo de interior:

SISTEMAS DE COMBUSTIÓN: Éste método consiste en utilizar el CO2 residual en la combustion de calefacciones o estufas que funcionen con gas propano o gas natural. También existen quemadores diseñados expresamente para este fin y que ofrecen un rendimiento mucho mayor en cuanto a producción de CO2. En este sistema será necesario utilizar un controlador de ppm de CO2 digital para que regule el flujo de entrada del gas.

SISTEMAS DE INYECCIÓN: Es quizá el método más utilizado, por su fácil instalación y regulación. También resulta relativamente económico y muy discreto. Consiste en inyectar CO2 comprimido en bombonas, preferiblemente que sea CO2 “de uso alimentario ya que otros tipos de CO2 que se comercializan llevan muchas impurezas y tieneden a bajar bruscamente la temperatura del cultivo. Al igual que ocurre con los sistemas de combustión, aqui también se hace necesario contar con un controlador digital de CO2 que regule el flujo de entrada. El problema de estos controladores es que suele ser dificil encontrar precios razonables en el mercado



SISTEMAS DE REACCIÓN QUIMICA: Son también llamados “métodos caseros”. Consiste en mezclar dos determinados compuestos de modo que se produzca una reacción química que evapore CO2 como gas residual. Las reacciones más utilizadas son mezclar azúcar con levadura, o también es muy común diluir bicarbonato de sodio en vinagre. Los mayores inconvenientes de estos sistemas es que sólo son aconsejables para pequeños cultivos, y presentan dificultades para controlar su dosificación.

Otro método muy económico de generar CO2 para espacios reducidos son las bolsas o pads, unos novedosos y limpios sistemas.

FERTIRRIGACIÓN CARBÓNICA: El CO2 también se puede aplicar mediante el agua de riego (agua carbonatada). Existen sistemas de inyección de CO2 a presión para la tuberia de riego principal, esto se suele utilizar en grandes instalaciones de cultivo. Otro sistema muy práctico son las llamadas pastillas de CO2, que son tabletas efervescentes para añadir al agua momentos antes de regar. En la fertirrigación carbónica las plantas no aprovechan el CO2 directamente para la fotosíntesis . Pero está demostrado que regar con agua carbonatada tiene múltiple ventajas: estabiliza el ph del agua, ayuda a eliminar la cal, facilita la absorción de los nutrientes y genera efectos hormonales que aumenta notablemente el desarrollo de las plantas.



Al aplicar CO2 en cultivo de interior hay que hacerlo siempre siguiendo ciertas reglas para asegurarse que las plantas lo van a poder aprovechar bien y que no vamos a despediciar gas tontamente. El CO2 no se debe aplicar durante la fase de crecimiento de las plantas, ya que entre otras cosas produce espigamiento y una mayor distancia internodal , y ésto hay que evitarlo siempre. Se empieza a aplicar a partir de la tercera semana de floración, en baja proporción, y ésta dosis hay que irla aumentando progresivamente conforme va avanzando la floración, sin sobrepasar en ningún momento las 1800ppm. El CO2 se aplica para favorecer la fotosíntesis de las plantas, así que durante el ciclo de oscuridad se debe cortar el suministro.

El CO2 favorece una rápido crecimiento de la pared celular, pero carece de un núcleo sólido, así que habrá que aumentar las dosis de fertilizante para “rellenar” esos núcleos. De no hacerlo asi tendremos plantas flácidas que con el peso de los cogollos se vendrán abajo. Para ayudar a que las plantas asimilen mayores dosis de fertilizante, tendremos que subir la temperatura de cultivo . De este modo aumentara la transpiración de las hojas, las plantas tomarán mayores cantidades de agua por las raices , evaporando abundantemente el agua restante por las hojas pero quedándose con los nutrientes.

En caso de exceso de CO2 en el cultivo, las plantas se intoxicarán. Los primeros síntomas que veremos es un amarilleamiento inusual en las hojas. Por otro lado, para las personas el CO2 aunque no es un gas venenoso como tal, también puede ser peligroso en concentraciones superiores a 5000ppm, y los primeros sintomas que aparecen son mareos y sensación de asfixia.

Resulta imposible especificar los parámeros óptimos para garantizar una asimilación CO2 al 100%, ya que entran en juego muchas variables como genética, potencia de luz empleada, tipo de fertilizantes… Por ello vamos a aconsejar unos valores pero entendedlos sólo de modo orientativo:

 
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