La Kali Mist es sativa y tarda en terminar la floración, por lo que hay que ser paciente. Crece alta y en interior podría ser necesario doblarla o cortar la punta apical, ya que tiende a estirarse en floración. Tiene pocas hojas y no es una variedad especialmente bonita. Los cogollos salen no muy densos, el olor es como a sándalo, a canela, a especias orientales, y el colocón es cerebral y activo, muy adecuado para no quedarse dormido o tirado. Es para salir de marcha, para irse a bailar, para tocar música, etc. Es una gran elección cultivar Kali Mist. Este año volveré a plantar esta variedad en interior, durante el verano.