El metodo ke explican es el mismo ke postie hace unos dias de Soma y Nirvana, pero estos no llaman "bananas" a las flores macho q producen las hembras, fijense en la pagina solo en esta parte hay fotos de las flores macho o bananas en hembras puras. Lo de las condiciones ambientales para producir mas hembras es lo ke mas me interesó.
En un experimento realizado en 1999 cultivamos 15 variedades de semillas "feminizadas". Comenzamos con 30 semillas por variedad.
Las metas eran: 1) determinar el porcentaje de plantas femeninas, masculinas y hermafroditas. 2) comparar la homogeneidad entre las plantas de semillas "feminizadas" con las plantas cultivadas a partir de semillas "normales".
1. Los resultados fueron excelentes. Nueve de quince variedades tenían una descendencia 100% femenina. El porcentaje de plantas femeninas de las otras 6 variedades estaba entre el 80 y 90%. Estas plantas eran todas hermafroditas, produciendo sus flores masculinas al final del ciclo vital. Una corrección de las semillas no fue necesaria, tampoco se encontraron machos.
2. Aproximadamente el 70% de las plantas de variedades cultivadas con semillas "feminizadas" eran mucho más uniformes que las plantas procedentes de semillas "normales" de la misma variedad. Cerca del 20% de las variedades eran algo más uniformes, mientras que en el 10% de las variedades no se vieron diferencias de homogeneidad.
Según la literatura y nuestras propias investigaciones, el crecimiento de una planta macho o hembra a partir de semilla, excepto por la predisposición de los cromosomas del sexo, también depende de varios factores ambientales. Los factores ambientales que influyen el sexo son: 1) una concentración más alta de nitrógeno producirá más hembras. 2) una concentración más alta de potasio producirá más machos. 3) una humedad mayor dará más hembras. 4) una temperatura más baja dará más hembras. 5) más luz azul dará más hembras. 6) menos horas de luz darán más hembras. Es importante comenzar con estos cambios a partir de la etapa de tres pares de hojas y continuar por dos o tres semanas antes de volver a las condiciones normales. ( la 5 y la 6 se contradicen o no son muy claras)
Para producir nuestras semillas feminizadas partimos de clones femeninos seleccionados. En condiciones normales estos clones femeninos no producen ninguna flor masculina.
Con nuestro método logramos que estos clones femeninos produzcan abundantes flores masculinas y polen. Utilizamos el polen asÌ obtenido para la producción de nuestras semillas "feminizadas".
Las fotos en esta página: http://www.dutch-passion.nl/spaans/female.html
Para obtener las alabadas "semillas feminizadas", utilizamos esquejes femeninos seleccionados de máxima calidad (clonos) acodados de nuestras variedades de cáñamo. En circunstancias de crecimiento normales no habrá ninguna flor masculina. Sin embargo, hemos desarrollado un método para impulsar a los clonos femeninos a producir numerosas flores masculinas (véase las fotos). Utilizamos el polen producido para la producción de las "semillas feminizadas".
Para obtener las alabadas "semillas feminizadas", utilizamos esquejes femeninos seleccionados de máxima calidad (clonos) acodados de nuestras variedades de cáñamo. En circunstancias de crecimiento normales no habrá ninguna flor masculina. Sin embargo, hemos desarrollado un método para impulsar a los clonos femeninos a producir numerosas flores masculinas (véase las fotos). Utilizamos el polen producido para la producción de las "semillas feminizadas".
En un experimento realizado en 1999 cultivamos 15 variedades de semillas "feminizadas". Comenzamos con 30 semillas por variedad.
Las metas eran: 1) determinar el porcentaje de plantas femeninas, masculinas y hermafroditas. 2) comparar la homogeneidad entre las plantas de semillas "feminizadas" con las plantas cultivadas a partir de semillas "normales".
1. Los resultados fueron excelentes. Nueve de quince variedades tenían una descendencia 100% femenina. El porcentaje de plantas femeninas de las otras 6 variedades estaba entre el 80 y 90%. Estas plantas eran todas hermafroditas, produciendo sus flores masculinas al final del ciclo vital. Una corrección de las semillas no fue necesaria, tampoco se encontraron machos.
2. Aproximadamente el 70% de las plantas de variedades cultivadas con semillas "feminizadas" eran mucho más uniformes que las plantas procedentes de semillas "normales" de la misma variedad. Cerca del 20% de las variedades eran algo más uniformes, mientras que en el 10% de las variedades no se vieron diferencias de homogeneidad.
Según la literatura y nuestras propias investigaciones, el crecimiento de una planta macho o hembra a partir de semilla, excepto por la predisposición de los cromosomas del sexo, también depende de varios factores ambientales. Los factores ambientales que influyen el sexo son: 1) una concentración más alta de nitrógeno producirá más hembras. 2) una concentración más alta de potasio producirá más machos. 3) una humedad mayor dará más hembras. 4) una temperatura más baja dará más hembras. 5) más luz azul dará más hembras. 6) menos horas de luz darán más hembras. Es importante comenzar con estos cambios a partir de la etapa de tres pares de hojas y continuar por dos o tres semanas antes de volver a las condiciones normales. ( la 5 y la 6 se contradicen o no son muy claras)
Para producir nuestras semillas feminizadas partimos de clones femeninos seleccionados. En condiciones normales estos clones femeninos no producen ninguna flor masculina.
Con nuestro método logramos que estos clones femeninos produzcan abundantes flores masculinas y polen. Utilizamos el polen asÌ obtenido para la producción de nuestras semillas "feminizadas".
Las fotos en esta página: http://www.dutch-passion.nl/spaans/female.html
Para obtener las alabadas "semillas feminizadas", utilizamos esquejes femeninos seleccionados de máxima calidad (clonos) acodados de nuestras variedades de cáñamo. En circunstancias de crecimiento normales no habrá ninguna flor masculina. Sin embargo, hemos desarrollado un método para impulsar a los clonos femeninos a producir numerosas flores masculinas (véase las fotos). Utilizamos el polen producido para la producción de las "semillas feminizadas".
Para obtener las alabadas "semillas feminizadas", utilizamos esquejes femeninos seleccionados de máxima calidad (clonos) acodados de nuestras variedades de cáñamo. En circunstancias de crecimiento normales no habrá ninguna flor masculina. Sin embargo, hemos desarrollado un método para impulsar a los clonos femeninos a producir numerosas flores masculinas (véase las fotos). Utilizamos el polen producido para la producción de las "semillas feminizadas".