Mi primera vez la recuerdo como si hubiera fumado ayer… estábamos en un descampado con vista al valle, cerca de un canal sentados bajo la sombra de un árbol hablando de todo lo que hablan todos cuando se juntan… esa tarde teníamos de tres hierbas distintas. Unos de los camaradas dijo que era mejor si hacíamos un churro mezclando las tres y así salía uno familiar súper potente… era la primera vez que fumaba y no quería verme como un novato así que mantuve el secreto. (primer error, pero ya saben, las burlas, el miedo, el momento, la timidez, etc…) Empezamos a fumar y me pasaron el churro, le di uno, dos, tres toques y al suelo…. Jajaja así de fuerte!!
Cuando me di cuenta me desplomé cayendo de cara hacía la tierra, me ayudaron a incorporarme y me acuerdo bien de lo espaciado que me parecía el tiempo, de lo sutil del movimiento de las hojas con el viento. Vomite y después me quedé acostado un rato hasta que poco a poco me fui sintiendo mejor viendo como el viento mueve las plantas en el campo. Nadie me había dicho nada de como se fumaba, sólo que había que aguantar el humo lo más posible y eso precisamente fue lo que hice, además los “amigos” con los que estaba no eran exactamente mis mejores amigos y sabían lo mismo que yo o tal vez menos, sólo aquellas historias que se va pasando de boca en boca y cuando fumé todo se confabulo en mi mente para darme un malviaje de puta madre…ellos dando consejos para hacerme sentir mejor, haciéndome preguntas sobre como me sentía, etc… y yo pensado en todos esos mitos que ustedes ya conocen sobre quedarse loco o en el viaje, que ya quieres que se te baje, piensas en los padres en que si te vieran se morirían de vergüenza… en fin, todas esas mamadas llegaron a mi mente. Así que ya se imaginan.
Fue hasta después que dejé de tener miedo de estar conmigo mismo y con mis pensamientos cuando fumo y así fue que aprendí a no malviajarme y a controlar mi viaje. Ahora fumo como un campeón, si se puede diario, pero también es cierto que se extrañan esos primeros colocones pero bueno así soy feliz y cuando soy feliz me dan ganas de fumar y cuando no estoy tan feliz me dan ganas de fumar para pensar en porqué no estoy tan feliz y termino por darme cuenta de que sigo estando igual de feliz que antes sólo que ahora una pendejada me molesta, pero si tiene solución no me preocupo y si no tiene pues tampoco.
Así que me calmo y veo las cosas con más detenimiento… a veces con demasiado detenimiento… pero así es esto y como a ustedes me gusta…
Saludos camaradas
Fbf