un duda
- Iniciador del tema joto_joto
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estas diciendo de plantarla en un terreno a pocos metros de tu casa pero q no sea tuyo, si bueno supongo q seria mas dificil probar q es tuya, pero piensa q el q pase por ahi podria pillar la cosecha, como no es de "nadie", luego otra cosa es cultivo de guerrilla, q es mas chungo q te pillen
Hola, la expresión de "a determinada distancia" querrá decir, se supone, que la policía no pueda determinar si son del mismo cultivo o pertenecen a la misma persona. Esto sería picaresca barata. Yo os diría, a toda la gente del foro y a los que puedan leer como visitantes estas líneas, que el cultivo de algo ilegal tiene que tener una correspondencia lógica. La lógica siempre se corresponde con la moderación, en el sentido de: ¿Es más tolerable una persona cargada de vino o de anís, que falta el respeto a los demás, que se monta en su coche y va ciega a pegarse una hostia con un coche que viene por su carril, que otra que se fuma un porro de marihuana, se sienta con su chica y se pone a escuchar entusiasmado un concierto de Nirvana? Como dice el repetido dicho: "La policía no es tonta". Sólo unos pocos pretenderán defender que es mejor un mal borracho que cualquier otro que está "afectado" por el vino o por cualquier otra sustancia, basándose en la "legalidad" de lo que se toma.
Yo os aconsejaría a todos privacidad en vuestros vicios y defectos, incluido el plantar o el fumar, o el beber. No corren buenos tiempos para los vicios y defectos, hace unos años (desde mediados de los ochenta) que existe una nueva corriente de "puritanismo", en lo físico, en lo moral y en el intento de entrometerse en la vida privada de los demás.
En este sentido, ocultad las plantaciones a la vista de los "puritanos", como se ha hecho de toda la vida, porque "ejecutores del bien en pro del Estado" los ha habido siempre, toda la vida han existido "voluntarios" para denunciar al vecino y, si era preciso, pegarle un tiro en la nuca.
¿Cómo reconocer a estos "hijos de puta"? Muy sencillo: simplemente ved y leed sus inclinaciones naturales. No os fiéis de ellos: cambian de bando según convenga, se venden por un precio, son agresivos, suelen aparentar ser más de la marcha que cualquiera; en resumen, buscan justificarse a sí mismos atacando a los demás y suelen aparecer como de "buen rollito", generalmente adaptados al sol que más calienta.
Estos "defensores del barrio", que se suelen destacar como personas gritonas, con mal rollo con su pareja, son, en general, la gente que denuncia y mueve ante la policía las historias de persecuciones y juicios. La gente más joven no suele llegar a saber el "mal rollo personal con su pareja" de estas personas y son víctimas de su "hijaputez".
Cultivar no es ilegal, lo que es ilegal es cultivar "sustancias estupefacientes", pero esta prohibición tiene sus antecedentes. Desde siempre, desde que el mundo es mundo, cada persona y cada familia cultivó lo que pudo y recolectó lo que supo: para comer, para sanar, para dormir, hasta para morir... Generalmente, en el mundo antiguo la casa era un santuario, morada de los antepasados, territorio reservado para sus moradores..., hasta que fue la iglesia la que sustituyó, como terreno sagrado, el lugar que antes ocupaba la casa, territorio de los manes y de los penates, en el mundo romano, del que provenimos, pese a quien pese.
La idea de Iglesia-Estado proviene de Constantino, pero no se hace eficaz en España hasta los visigodos, en la España más culta y romanizada, de ahí que, en el norte de España, concretamente en la cordillera cántabro-pirenaica, la resistencia a los visigodos sea brutal.
Como los árabes sustituyen los antiguos territorios godos, en general, la idea árabe es imponer la religión- Estado musulmana frente a la antigua idea prerromana de "casa- religión", por lo menos prerromana antes de Diocleciano, generador del Bajo Imperio, por razones ecónomico-estratégicas que es complicado resumir en este post.
Quiero decir con todo esto que, a todos aquellos partidarios de la intervención del Estado en las cuestiones religiosas, control de la vida y de la muerte, de si la familia ha de ser de un tipo o de otro, sabed que no sois sino la continuación del control del Bajo Imperio Romano en la vida privada, pero con más medios, pagados con los impuestos de las mismas personas a las que queréis controlar.
Evidentemente, como he dicho, nuevos conceptos socializantes e igualitarios de "evitar un mal común" o de "proteger la salud pública", son conceptos que ya utilizaban los tiranos en la Grecia antigua, buscando el "bienestar del pueblo" pero sin el pueblo, al estilo del despotismo ilustrado del siglo XVIII, con la diferencia de que "el despotismo actual supera cualquier comparación con el pasado".
Concluyo: No os fiéis de nadie, plantad en secreto, disfrutad de vuestra intimidad en secreto, sed prudentes; pero, a la hora de emitir vuestro voto, a la hora de la verdad, de cuando vosotros sabéis que tenéis el poder de cambiar en parte el destino de vuestra vida a nivel público, considerad cuanto os he dicho: No os fiéis de los demagogos, de los que defienden el control del Estado sobre las personas bajo cualquier excusa de bienestar común o sanidad pública, y, lo que es más importante, fijaos en los ojos de los que os hablan: Si pestañean mucho y evitan miraros cuando os hablan, si ocupan mucho tiempo y no os dejan decir ni pío, si observáis que van de tener la razón absoluta, desconfiad, desconfiad de todo aquello que proclama más control legal, más regulación estatal.
La solución para todo es mucho más sencilla: El hogar es inviolable (de momento), plantad en casa, procurad tener lo suficiente para el autoconsumo, pasad de vuestros vecinos, sed amables con todo el mundo, ayudad en vuestro entorno a todos los que podáis y, en poco tiempo, el barrio estará lleno de gente que fuma marihuana, asiste a los demás en el centro del barrio, y no tengáis miedo, por unas pocas plantas ningún juez ordena registro domiciliario ni la policía lo solicita.
Lo dicho: no pasarse, porque siempre pagan justos por pecadores, en realidad, la policía persigue a los traficantes.
Yo os aconsejaría a todos privacidad en vuestros vicios y defectos, incluido el plantar o el fumar, o el beber. No corren buenos tiempos para los vicios y defectos, hace unos años (desde mediados de los ochenta) que existe una nueva corriente de "puritanismo", en lo físico, en lo moral y en el intento de entrometerse en la vida privada de los demás.
En este sentido, ocultad las plantaciones a la vista de los "puritanos", como se ha hecho de toda la vida, porque "ejecutores del bien en pro del Estado" los ha habido siempre, toda la vida han existido "voluntarios" para denunciar al vecino y, si era preciso, pegarle un tiro en la nuca.
¿Cómo reconocer a estos "hijos de puta"? Muy sencillo: simplemente ved y leed sus inclinaciones naturales. No os fiéis de ellos: cambian de bando según convenga, se venden por un precio, son agresivos, suelen aparentar ser más de la marcha que cualquiera; en resumen, buscan justificarse a sí mismos atacando a los demás y suelen aparecer como de "buen rollito", generalmente adaptados al sol que más calienta.
Estos "defensores del barrio", que se suelen destacar como personas gritonas, con mal rollo con su pareja, son, en general, la gente que denuncia y mueve ante la policía las historias de persecuciones y juicios. La gente más joven no suele llegar a saber el "mal rollo personal con su pareja" de estas personas y son víctimas de su "hijaputez".
Cultivar no es ilegal, lo que es ilegal es cultivar "sustancias estupefacientes", pero esta prohibición tiene sus antecedentes. Desde siempre, desde que el mundo es mundo, cada persona y cada familia cultivó lo que pudo y recolectó lo que supo: para comer, para sanar, para dormir, hasta para morir... Generalmente, en el mundo antiguo la casa era un santuario, morada de los antepasados, territorio reservado para sus moradores..., hasta que fue la iglesia la que sustituyó, como terreno sagrado, el lugar que antes ocupaba la casa, territorio de los manes y de los penates, en el mundo romano, del que provenimos, pese a quien pese.
La idea de Iglesia-Estado proviene de Constantino, pero no se hace eficaz en España hasta los visigodos, en la España más culta y romanizada, de ahí que, en el norte de España, concretamente en la cordillera cántabro-pirenaica, la resistencia a los visigodos sea brutal.
Como los árabes sustituyen los antiguos territorios godos, en general, la idea árabe es imponer la religión- Estado musulmana frente a la antigua idea prerromana de "casa- religión", por lo menos prerromana antes de Diocleciano, generador del Bajo Imperio, por razones ecónomico-estratégicas que es complicado resumir en este post.
Quiero decir con todo esto que, a todos aquellos partidarios de la intervención del Estado en las cuestiones religiosas, control de la vida y de la muerte, de si la familia ha de ser de un tipo o de otro, sabed que no sois sino la continuación del control del Bajo Imperio Romano en la vida privada, pero con más medios, pagados con los impuestos de las mismas personas a las que queréis controlar.
Evidentemente, como he dicho, nuevos conceptos socializantes e igualitarios de "evitar un mal común" o de "proteger la salud pública", son conceptos que ya utilizaban los tiranos en la Grecia antigua, buscando el "bienestar del pueblo" pero sin el pueblo, al estilo del despotismo ilustrado del siglo XVIII, con la diferencia de que "el despotismo actual supera cualquier comparación con el pasado".
Concluyo: No os fiéis de nadie, plantad en secreto, disfrutad de vuestra intimidad en secreto, sed prudentes; pero, a la hora de emitir vuestro voto, a la hora de la verdad, de cuando vosotros sabéis que tenéis el poder de cambiar en parte el destino de vuestra vida a nivel público, considerad cuanto os he dicho: No os fiéis de los demagogos, de los que defienden el control del Estado sobre las personas bajo cualquier excusa de bienestar común o sanidad pública, y, lo que es más importante, fijaos en los ojos de los que os hablan: Si pestañean mucho y evitan miraros cuando os hablan, si ocupan mucho tiempo y no os dejan decir ni pío, si observáis que van de tener la razón absoluta, desconfiad, desconfiad de todo aquello que proclama más control legal, más regulación estatal.
La solución para todo es mucho más sencilla: El hogar es inviolable (de momento), plantad en casa, procurad tener lo suficiente para el autoconsumo, pasad de vuestros vecinos, sed amables con todo el mundo, ayudad en vuestro entorno a todos los que podáis y, en poco tiempo, el barrio estará lleno de gente que fuma marihuana, asiste a los demás en el centro del barrio, y no tengáis miedo, por unas pocas plantas ningún juez ordena registro domiciliario ni la policía lo solicita.
Lo dicho: no pasarse, porque siempre pagan justos por pecadores, en realidad, la policía persigue a los traficantes.
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