Hay algo que no encaja en el relato de Nis, para empezar hay varias contradicciones, y las explico:
1ª) En el subtítulo dice: "El fuma y quiere dejarla..."
Y luego afirma que no la quiere dejar, que es ella la quiere que él lo deje.
2º) Dice: "Han habido breves periodos de tiempo en que no la ha dejado".
Esto se denominaría como deseo frustrado, es decir, se produce una contradicción en la expresión pero que refleja el deseo de ella y a la vez el de él, el choque entre lo deseable para ella y la realidad que no secunda ese deseo. Y es que, de ser cierto en que no la ha dejado durante breves periodos supone que, en realidad, no fumaría sino en esos breves periodos de tiempo, que es lo que ella desearía probablemente.
3º) Culpa a la marihuana de su probable ruptura matrimonial, pero con seguridad las causas son otras y por eso puse el post anterior. Es ella la que ha cambiado con respecto a la mujer que se casó y no él que sigue siendo el mismo fumador de marihuana. Los hombres no son máquinas inalterables. Si te casas con una mujer que te muestra una cara y al cabo de un tiempo te muestra otra distinta, hay engaño y jurídicamente este engaño es causa de nulidad desde tiempos inmemoriales. Era una de las típicas causas de nulidad de matrimonio: el error en la persona, al creer que te casabas con alguien y luego resulta que es distinto a como se había mostrado, da igual que se hubiese mostrado como multimillonario y luego no lo era o que se hubiese mostrado como tolerante con tu vicio y luego no lo era.
4º) Los síntomas: "insomnio, fuertes depresiones, ansiedad, muy mal humor, violento y golpeador ocasional".
Insomnio: La marihuana ayuda a relajarse y con los años muchas personas se van volviendo insomnes, es decir, necesitan dormir menos. Para mí dormir bien es estar en la cama cinco horas seguidas, para otros supone estar nueve o diez horas. Yo siempre he dormido mucho menos que mi mujer y estoy en el ordenador a las cuatro de la mañana mientras mi señora lleva ya tres o cuatro horas en la cama.
O sea, puede ser que ese insomnio no proceda de la marihuana sino de otros factores: consumo de estimulantes, alcohol, mal rollo en el matrimonio, problemas económicos (me guío a pensar que éstos son los verdaderos problemas de ese matrimonio) o laborales.
Fuertes depresiones: Cierto, la marihuana coadyuda mucho a que las personas con tendencia a la depresión se acentúe con ese consumo. Si tiene depresión debería dejar de fumar en absoluto, sea cual fuere la causa que motiva dicha depresión.
Ansiedad: Lo mismo que antes, la marihuana agrava la ansiedad, y ésta puede estar motivada por cualquier causa ajena al consumo de marihuana.
Mal humor: Nada que ver con la marihuana, tiene que ver con el carácter y con el entorno. Si te está tocando las pelotas tu mujer todo el día: "Manolo, deja de fumar, deja de fumar, no fumes, deja de fumar, no te enciendas eso, dèjado, no compres, no cultives, te lo he tirado, se lo he contado a tus amigos, es por tu bien, etc, etc, etc". Acabas de una mala leche espantosa, como ya he dicho en el post anterior.
Violento y golpeador: Ahí ya sí que la marihuana no tiene tampoco nada que ver. Entra entonces el sentido común, porque un matrimonio, una pareja, una relación de amistad se basan en dos cosas fundamentales: confianza y respeto mutuo.
Cuando se pierde el respeto mutuo se pierde también la confianza en el otro y se le va tomando miedo. No debe durar más de un día una relación de ese tipo, fume o no marihuana, está claro que se ha perdido el respeto por la otra persona y no se debe convivir con quien no te respeta, antes de llegar aún más lejos y acabar en los juzgados, en la cárcel, en el hospital o en el cementerio.
Mi consejo: De ser cierto lo que dices, Nis, sepárate ya mismo, seas tú o él el culpable da lo mismo, ese matrimonio está roto, rehaz tu vida y olvídate de él. Si no ha habido hijos lo tienes fácil, si los ha habido, serán pequeños y ni se darán cuenta de lo que sucede, pero ganarán en salud mental.
Azumi: No te pongas triste, mujer, una separación puede ser muy conveniente en ciertos casos, como éste, por ejemplo.