Hola todos:
Mi pareja y yo llevamos 4 años juntos, 2 y medio conviviendo. Al principio cuando le conocí, fumaba muchísima marihuana, o lo que para mí era muchísima. Se podía fumar una media de 10/15 porros cada día. Fumaba solo al despertar con el café, se iba a trabajar en moto y después cuando volvía de trabajar volvía a fumar hasta que se iba a dormir. No hacía nada más. Esto tenía consecuencia para su vida y para nuestra relación. Nunca quería salir a la calle porque en la calle no podía fumar. No podíamos salir de fin de semana a no ser que donde fuésemos pudiese fumar. Una vez salimos un fin de semana, hicimos una y media en coche hasta un sitio precioso, una masia alejada del mundo en el bosque. Íbamos a pasar allí tres días maravilloso. Cuando llegamos se dio cuenta de que se había dejado la maria en casa y decidió hacerse 3 horas (ida y vuelta) y me dejó allí para volver a buscar la maria. No os digo cómo me sentó eso después de la ilusión que me hacía salir alguna vez con él y desconectar.
En fin. Siempre está muy encerrado. Solo se levanta, va a trabajar y se encierra en casa, delante del ordenador. No hace nada más. Bueno, y va a la asociación que es el único momento en el que sale un poco, supongo que allí tiene algún amigo pero no los conozco porque no me los ha presentado nunca.
El caso es que tuvimos una crisis grande, porque yo ya no podía más. Necesitaba una vida en común, un poco de deseo y de ganas. Y él no podía tenerlas. Parecía como que se le había ido la ilusión por las cosas de la vida. no me quiero poner melodramática, pero es mi percepción.
El caso es que le dije, mal dicho, que si no dejaba de fumar no podíamos seguir. Sé que fui egoísta y tajante pero no podía más. No teníamos relación ni vida en común, éramos dos compañeros de piso y ya. Para él no, para él resultaba suficiente pero no para mí.
El caso es que cuando esto pasó mejoró un poco. Me prometió que disminuiría el consumo y que haría deporte para contrarrestar el estrés que le producía el trabajo.
Y durante un tiempo ha sido más o menos así. Sé que ha fumado más de lo que me ha dicho porque lo noto, pero él dice que no. De 400 euros en Maria ha pasado a 100, dice, que ya es mucho sacrificio para él. Pero en cuanto tiene una época de estrés como ahora vuelve a la carga. Y yo lo noto un montón. Está aislado, cansado, deprimido y nunca quiere ni le interesa hacer nada. Le quiero. Le quiero mucho. Y quiero actuar de una forma inteligente en la que poder ayudarle, pero no sé el camino.
Por favor, las personas que fumáis, cómo hacéis para mantener una vida activa? Tiene que ver su comportamiento con su adicción o simplemente es así y ya está?
Perdonad el rollo, pero es que no sé qué hacer. Solo quiero una relación normal, llevable, en la que hacer cosas juntos sin tener que estar pendientes de llevar maria de aquí para allí.
Gracias de antemano a quien se tome la molestia de leer este mensaje e intentar darme algún consejo. Seguro me ayudará porque estoy super perdida.
Mi pareja y yo llevamos 4 años juntos, 2 y medio conviviendo. Al principio cuando le conocí, fumaba muchísima marihuana, o lo que para mí era muchísima. Se podía fumar una media de 10/15 porros cada día. Fumaba solo al despertar con el café, se iba a trabajar en moto y después cuando volvía de trabajar volvía a fumar hasta que se iba a dormir. No hacía nada más. Esto tenía consecuencia para su vida y para nuestra relación. Nunca quería salir a la calle porque en la calle no podía fumar. No podíamos salir de fin de semana a no ser que donde fuésemos pudiese fumar. Una vez salimos un fin de semana, hicimos una y media en coche hasta un sitio precioso, una masia alejada del mundo en el bosque. Íbamos a pasar allí tres días maravilloso. Cuando llegamos se dio cuenta de que se había dejado la maria en casa y decidió hacerse 3 horas (ida y vuelta) y me dejó allí para volver a buscar la maria. No os digo cómo me sentó eso después de la ilusión que me hacía salir alguna vez con él y desconectar.
En fin. Siempre está muy encerrado. Solo se levanta, va a trabajar y se encierra en casa, delante del ordenador. No hace nada más. Bueno, y va a la asociación que es el único momento en el que sale un poco, supongo que allí tiene algún amigo pero no los conozco porque no me los ha presentado nunca.
El caso es que tuvimos una crisis grande, porque yo ya no podía más. Necesitaba una vida en común, un poco de deseo y de ganas. Y él no podía tenerlas. Parecía como que se le había ido la ilusión por las cosas de la vida. no me quiero poner melodramática, pero es mi percepción.
El caso es que le dije, mal dicho, que si no dejaba de fumar no podíamos seguir. Sé que fui egoísta y tajante pero no podía más. No teníamos relación ni vida en común, éramos dos compañeros de piso y ya. Para él no, para él resultaba suficiente pero no para mí.
El caso es que cuando esto pasó mejoró un poco. Me prometió que disminuiría el consumo y que haría deporte para contrarrestar el estrés que le producía el trabajo.
Y durante un tiempo ha sido más o menos así. Sé que ha fumado más de lo que me ha dicho porque lo noto, pero él dice que no. De 400 euros en Maria ha pasado a 100, dice, que ya es mucho sacrificio para él. Pero en cuanto tiene una época de estrés como ahora vuelve a la carga. Y yo lo noto un montón. Está aislado, cansado, deprimido y nunca quiere ni le interesa hacer nada. Le quiero. Le quiero mucho. Y quiero actuar de una forma inteligente en la que poder ayudarle, pero no sé el camino.
Por favor, las personas que fumáis, cómo hacéis para mantener una vida activa? Tiene que ver su comportamiento con su adicción o simplemente es así y ya está?
Perdonad el rollo, pero es que no sé qué hacer. Solo quiero una relación normal, llevable, en la que hacer cosas juntos sin tener que estar pendientes de llevar maria de aquí para allí.
Gracias de antemano a quien se tome la molestia de leer este mensaje e intentar darme algún consejo. Seguro me ayudará porque estoy super perdida.