En Oregón, y gracias a los impuestos recaudados por la legalización del cannabis recreativo estatal, el Departamento de Rentas del Estado ha inyectado ochenta y cinco millones de dólares a las escuelas publicas, servicios de salud, gobiernos locales y departamentos de policías del estado.
La cantidad total recaudada de impuestos de marihuana locales y estatales fue de más de $ 108 millones, con casi $ 10 millones asignados a la Comisión de Control de Licor de Oregón y al Departamento de Ingresos para la regulación del cannabis.
Estos datos económicos son una gran victoria y aliciente para el movimiento de la legalización del cannabis y por supuesto para el estado, al que los impuestos recaudados ayudan a sus ciudadanos de una forma u otra. Además, de combatir directamente al mercado negro restandole grandes cantidades de dinero que no pagan impuestos.
Apoyar económicamente a las escuelas del estado, repercute directamente en la calidad de la enseñanza e instalaciones o servicios para los más jóvenes. Estas ayudas económicas para la educación estatal tiene una muy buena acogida entre las madres y padres que apoyaron la legalización y regulación en Oregon, y es muy gratificante para ellos ver que ya es una realidad.
Muchos otros estados que están entrando en línea con estas iniciativas de legalización miran al estado de Oregon y sus números como un ejemplo. El estado es una prueba real y fehaciente del por qué un sistema legalizado y regulado es mucho mejor que un mercado no regulado y penalizador para el cannabis y la sociedad en su conjunto.