Historia de EEUU: El impuesto sobre la marihuana y Timothy Leary

La Ley del Impuesto sobre Marihuana (The Marihuana Tax Act) estuvo en vigor durante más de treinta años en los Estados Unidos. Anslinger utilizó su querida legislación para eliminar toda producción de cannabis en EEUU ya fuese  recreativo, medicinal o industrial

“The Marihuana Tax Stamp Act”, de conformidad con los límites constitucionales, no prohibía directamente el cannabis. De hecho, Anslinger y sus  colaboradores  tenían muchas ganas de hacerlo, pero la Constitución federal simplemente no autorizaba al Congreso para regular lo que los ciudadanos estadounidenses podrían meterse en sus propios cuerpos, por lo que se necesitaba alguna solución.

Su solución fue brillante. Abogados del Tesoro dieron  cuenta de que mientras el gobierno federal no podía ejercer un “poder general sobre la policía” para prohibir las drogas, los impuestos eran perfectamente admisibles  y también lo eran los requisitos de mantenimiento de registros razonablemente relacionados con dichos impuestos.

Esta idea resultó  clave para su plan. Así la Ley de “Marihuana Tax Stamp Act” técnicamente no prohibía el cannabis, pero en vez de ello recaudaba  impuestos sobre transferencias y registraba todas las transacciones de  marihuana, cualquiera que vendiese marihuana sin registrarse era multado con un impuesto punitivo. Pero, los agricultores que trataban de cumplir con los requisitos del registro de la ley pronto experimentaron un brusco despertar.

En los años previos a la aprobación de la Ley “The Marihuana Tax Stamp Act”, Anslinger presionó furiosamente para que los gobiernos estatales aprobasen los llamados  “Uniform State Narcotics Acts”, contra las drogas, las leyes aprobadas estaban diseñadas para crear un frente unido contra las drogas peligrosas. Pero mientras quela American Medical Association  se opuso a incluir la marihuana entre las sustancias prohibidas, Anslinger envió a sus lobbies para presionar agresivamente las legislaturas estatales hasta que el cannabis se prohibiese en todos los estados. Así, después de la aprobación de “The Tax Stamp Act”, el Tesoro reveló sus verdaderos motivos: cualquier agricultor con su registro que cultivase, sin demora, sería detenido, juzgado y condenado en virtud dela Ley actual, ya que el Tesoro federal pasaría su inscripción del registro al gobierno de su  estado y  luego se usaría su registro de agricultor como dato en su contra en un tribunal estatal.

Anslinger había encontrado un hueco en la Constitución y el gobierno federal se sometió a una expansión sin precedentes de su poder para invadir la vida privada de los ciudadanos. Durante tres décadas, este sistema eficazmente acabo bajo tierra con toda la producción,  venta e ingestión de cannabis.

Timothy Leary llegó a  Harvard. Como profesor de psicología y convertido en “gurú” consiguió él mismo que lo expulsaran de Harvard por dar hongos de psilocibina a sus alumnos y  fue expulsado de su complejo en el estado de Nueva York por permitir una cultura imprudente para cultivar. A finales de 1965, Leary intentó establecer otra comuna en México, pero  fue expulsado de ese país antes de empezar. No tuvo más remedio que dar la vuelta, cuando trató de volver a entrar en los EE.UU., un agente de aduanas registró su vehículo y le encontraron “sustancia”.

Leary fue acusado de tráfico internacional de drogas y de violarla Marihuana TaxStamp Act . Sus abogados lograron que inmediatamente fuese expulsado porque el doctor  no llegó a cruzar la frontera norteamericana. Sin embargo, esta the Tax Stamp Act hizo su camino hacia la Corte Supremay  en 1969 se implantó en toda la nación por sorpresa.

En una rara decisión de  9-0,la Corte revocó por unanimidad la Marihuana Tax Act como inconstitucional en virtud de las protecciones garantizadas dela Quinta Enmienda contra la autoincriminación. Los abogados de Leary argumentaron con éxito que en virtud de la aplicación de dos niveles dela Ley del Impuesto, no había manera posible para cumplir con la ley, sin auto-incriminación, proporcionando una confesión en contra de la propia voluntad. El Tribunal vio la ley como nada más que un intento de eludirla Constitución, a expensas de los derechos civiles y la derogó

Así, por un breve período, el gobierno federal no tuvo ninguna prohibición en absoluto de la marihuana en sus libros.

Por: Jeremy Daw

Fuente en inglés